1. Vinos de corte o blends: una amistad entrañable y duradera
Por estos días, hablamos, leemos, escuchamos, vemos por todos lados referencias al Día del
Amigo. No necesariamente todo tiene que ver con el día en que el hombre llegó a la Luna, pero
sí se respira la intención de reunirse, juntarse con la gente querida, reforzar vínculos… En el
mundo del vino también hay amistades interesantes de las que hablar, lazos profundos,
aromáticos y duraderos que los enólogos generan en sus vinos a la hora de desarrollar una
nueva propuesta con determinadas variedades.
En la elaboración del vino, los enólogos dejar entrever su faceta de artistas ¿Cómo es eso? En
una ardua pero placentera tarea, estos alquimistas de las uvas siempre tienen en cuenta que
una combinación amigable entre dos o más variedades puede generar un resultado exitoso,
equilibrado y deslumbrante.
La maravilla de los cortes
¿Alguna vez, ha tenido la oportunidad de probar el contenido de esa botella que se presentaba
como imperdible? Hablamos de esos vinos que no están elaborados con un solo tipo de uva,
sino que en su elaboración prevalece la combinación de dos o más cepajes. A estos vinos se los
denomina vinos de corte, genéricos, blends (es la palabra en inglés más usada en Estados
Unidos) o assemblages (denominación más frecuente en Francia). Serán estos vinos los que
pondremos sobre la mesa para investigar esas relaciones prodigiosas, no sólo en su elaboración
sino también a la hora de su consumo.
Para revelar todos los secretos de esas alianzas, que despiertan una inmensidad de placeres en
la degustación, entrevistamos a prestigiosos enólogos y sommeliers, quienes nos ayudaron a
descubrir por qué en el mundo del vino lo que debe primar es la amistad.
Algo es seguro: como confirma Pedro Rosell, ingeniero agrónomo y enólogo especializado en
espumantes, “los vinos forman amistades diversas y a nosotros, los tomadores, nos fascinan”.
Innovación e inventiva
Ángel Mendoza, enólogo de Domaine St. Diego, asegura que a la hora de verificar qué criterios
son importantes para componer un vino de corte, “es posible que la imaginación y los múltiples
varietales existentes permitan muchas propuestas de corte. Incluso hoy, los enólogos argentinos
practican cortes monovarietales por selección de viñedos de distintos terruños. Los cortes de
varietales permiten innovación e inventiva”, sostuvo.
Por su parte, Marcelo Miras, Gerente de enología de la Bodega Del Fin del Mundo, aseguró que
“al momento de elegir las variedades para un corte de vinos hay que tomar en cuenta las
virtudes de cada variedad, sus atributos y también conocer cuáles son sus deficiencias. Así, al
momento de combinar las variedades, todas aportaran lo mejor de cada una y se
complementarán”.
“Alguna vez se me ocurrió combinar en una botella todo el encanto del Malbec con la frescura
adolescente, casi inocente y perfumes primaverales, de un Sangiovesse”, confia a modo de
anécdota el enólogo Jorge Nazrala. “Al igual que esas tías malas que hay en todas las familias,
un par de enólogos me dijeron ‘esa amistad no va a funcionar’ (sólo habían visto la etiqueta, el
vino ni lo probaron). Al igual que con esas amistades que duran toda la vida, afortunadamente se
equivocaron, vendí 15.000 botellas. No estoy proponiendo un nuevo corte, sólo cuento esta
anécdota para afirmar que ni en la amistad de los humanos, ni en la de los vinos está todo
dicho”, sostiene alegremente y con todo el conocimiento, sabiendo que para innovar hay que
arriesgar.
Clásicas combinaciones
Existen clásicas combinaciones de varietales, como la de Cabernet-Merlot, que “aún con sus
diferentes tiempos de evolución forman la pareja más famosa de la zona de Burdeos, en Francia,
y esa amistad se ha extendido al mundo”, asegura Rosell. “El Cabernet Sauvignon y el Merlot
forman una amistad de potenciación, ambos tienen notables diferencias pero con aromas de la

2. misma familia. Ambos se potencian: el Merlot, más tierno, suaviza al recio Cabernet”, sostiene
como gran conocedor.
Según el destacado Ángel Mendoza, normalmente en el corte de varietales se complementan
caracteres antagónicos pero también es posible exaltar cualidades propias similares. “Cuando
programamos Iscay, en Bodega Trapiche, cortamos Merlot con Malbec y buscamos elevar el
centro de boca del vino con dos varietales que normalmente son suaves, de acidez media
y taninos mórbidos”.
Los blancos también se complementan
También en el terreno de los vinos blancos hay espacio para la confraternidad. “En vinos blancos
jóvenes, frescos y frutados, es muy seductor el corte de Chardonnay-Viognier-Torrontés, una
verdadera ensalada de frutas en cuyos aromas y sabores aparecen recuerdos de plátano,
manzana, ananá, durazno, naranja y uva. Cada una de las variedades le aporta su fragancia
individual”, relata –e invita- Mendoza.
Y si de amistades de probada duración se trata, “el Pinot Noir, variedad tinta que se fermenta sin
maceración para obtener un vino blanco, forma la amistad más fuerte entre los espumosos, con
el blanco Chardonnay”, afirma entusiasmado Rosell. El Pinot Noir aporta al corte su acidez,
cuerpo, señorío y aromas ricos en frutos rojos, mientras que el Chardonnay brinda a la relación
delicadeza, aromas cítricos y de frutos tropicales. “Es lo que llamamos una amistad de
complementación”, resumió el experto.
Para Rosell, especialista en espumantes formado en Francia, hay combinaciones que establecen
una relación sumamente estrecha. “En la zona del Chianti se dice que mezclan la variedad tinta
Sangiovese con un poquito de Trebbiano -una variedad blanca- y parece que esta última tiene
co-pigmentos que hacen que se manifieste y perdure mejor el color rojo del Sangiovese. Es una
amistad de entrega, casi como un amigo que dona a otro un órgano. El Trebbiano no aparece
como vino, dona sus co-pigmentos y se va”, toda una muestra de entrega.
El terruño los junta
En nuestras latitudes se forman amistades que podríamos llamar “fruto de la convivencia”,
porque de tanto estar juntas, se combinan armoniosamente gracias al arte de la Enología. Asi, el
dúo Malbec-Syrah es un claro ejemplo. El Malbec, inquietante en aromas y sabores
especiados y con taninos de dulzor característico, se une a los aromas florales del Syrah, con
toques de violetas, taninos diferentes y una redondez que hace del corte un vino singular.
Los que saben, recomiendan
A la hora de elegir un corte para recomendar y hacer honor al brindis de la amistad, Mendoza
asegura, “con un poco de ego recomiendo los vinos de mi familia Domaine St. Diego. Pero con el
corazón, los soberbios vinos de corte como Trapiche Medalla, Cheval Des Andes de Bodega
Terrazas, Pasionado de Bodega Andeluna y Adventus Mediterránea de Bodega Antigal”,
aseguró.
Nazrala no se queda atrás y vaticina: “empecemos la charla con un Sauvignon Blanc bien frío.
Las empanadas con un gran Syrah (con un toquecito de roble). La carne a la masa pide a gritos
un Tempranillo. Si a la tarde todavía seguimos juntos ¿no acompañaríamos el brindis con una
selva negra y un Torrontés espumante dulce natural? Al final del día, después de esto,
terminamos todos abrazados”, sostuvo entre risas.
¿Y el consumidor qué elige?
El sommelier de cava y Lic. en Turismo Martín Mantegini asegura que la curiosa búsqueda del
consumidor por encontrar en el vino nuevas sensaciones, lleva a elegir los blends. “En los
últimos años lo que ha primado en el consumidor es degustar vinos varietales, sin embargo a la
hora de catar los cortes se plantea el desafío de intentar reconocerlos fusionados, amigados. Y
de eso se trata, de conocer qué tan bien se llevan un Malbec con un Merlot, un Syrah con un
Bonarda o un Chardonnay con Semillón. El complemento de los atributos sensoriales que posea
cada uva, cultivada en cada sitio particular, junto a la mano del agrónomo y enólogo es lo que a

3. fin de cuentas, cautiva al consumidor y lo motiva a repetir la experiencia de probarlos”, agrega el
experto sommelier.
La ganadora del concurso “Vino Argentino Mejor Sommelier Argentina 2008”, Agustina de Alba,
también opina al respecto. Para ella, “los blends son los vinos top de las bodegas, son los vinos
en los que cada enólogo elige lo mejor que tiene de cada varietal, para unirlo con otra cepa y
hacer un caldo diferente, único e inigualable. Un blend es la máxima expresión del enólogo”,
asegura.
Pero, ¿cuáles son los cortes más apreciados por los consumidores? Mantegini responde sin
dudar que son “los que combinan cepajes que gustan de un mismo terroir, que expresan todo su
potencial por separado, y que juntos se potencian de manera tal que crean un nuevo vino
reforzado en calidad y expresión”- al tiempo que agrega-, “el tradicional corte Malbec - Cabernet
Sauvignon - Merlot es el ejemplo de un clásico, ya que encuentra en ese trío una armonía ideal
entre la elegancia y fruta del Malbec, la robustez y personalidad del Cabernet Sauvignon y la
suavidad y sobriedad del Merlot.
¿Qué recomendamos a esos aventurados consumidores que se aprestan a buscar nuevas
sensaciones? Mantegini sostiene que el corte de uvas blancas y tintas en una misma botella es
una de las más grandes singularidades o rarezas. “En nuestro país se puede hallar al tinto Syrah
con la blanca Viognier juntos en los terruños sanjuaninos, donde llegan a desarrollar una linda
amistad”, aseguró. Así mismo también sugiere que, “los blends de más de cuatro varietales
atraen por su singularidad, y se asemejan mucho a una pieza de arte, que cuando gusta se
transforma en un algo único e irrepetible”.
Para Agustina, las combinaciones más singulares pueden ser aquellas que combinan Pinot Noir
– Malbec, Tannat- Malbec y Petit Verdot con Syrah. Una unión que tiene todo para descubrir”.
Como los vinos, los amigos se complementan
Pensando en los amigos, todos somos varietales para la joven sommelier Agustina de Alba.
“Algunos somos suaves y sensibles como los Pinot Noir, otros somos mas fuertes, potentes, de
gran carácter como el Cabernet Sauvignon. Eso sí: todos somos únicos, diferentes e irrepetibles.
No es lo mismo, un Pinot Noir de la Patagonia que uno mendocino, el carácter cambia pero una
vez que un Pinot se junta con un Cabernet, por ejemplo, se genera una nueva combinación, y las
características de ambos empiezan a esfumarse, dando origen tras complementarse, a nuevas
combinaciones, sensaciones y sabores. Lo increíble es que hay algunos tipos de blends que
generan una unión tan increíble, que uno se sorprende y se pregunta ¿siendo varietales tan
diferentes, opuestos y singulares, como puede ser que juntos se combinen tan bien?” Eso es lo
que se puede llamar amigos… el secreto de la verdadera amistad.