El documento discute cómo el poder de los medios de comunicación ha crecido rápidamente en los últimos años y cómo los deberes de informar e instruir están más propensos a distorsiones. También analiza lo complejo que puede ser el periodismo ético, especialmente en géneros de opinión. Finalmente, destaca varios principios éticos fundamentales para el periodismo como el derecho del público a una información veraz, la responsabilidad social de los periodistas y el respeto a la privacidad, la dignidad humana y los valores universales.