Trump propone bajar impuestos a ciudadanos y empresas para aumentar el dinero disponible, estimular la demanda y la inversión, lo que crearía más puestos de trabajo. También quiere subir los aranceles de importación para desalentar la salida de empresas y animar su regreso, además de impulsar obras públicas que compensen a las empresas y a los contribuyentes y generen un círculo virtuoso de crecimiento.