10. Pragmática Sanción de 1788, que abole la Ley Sálica , promulgada en el acceso al trono de Carlos IV. Sin embargo, fue retirada y no llegó a publicarse. Ella restablecía la sucesión tradicional de la monarquía hispánica , permitiendo a las mujeres reinar
11.
12. La Revolución de 1830 en Francia y el consiguiente regreso de los liberales al poder, con el regreso de los liberales al poder, lo que impedía a los absolutistas la posibilidad de recibir ayuda al exterior.
13. Del cuarto matrimonio de Fernando VII con María Cristina de Nápoles nace en 1830 la princesa Isabel y poco después Luisa Fernanda,
48. Es decir, todos los grupos opuestos al liberalismo, que preferían la estabilidad y la seguridad del tradicionalismo carlista Apoyos sociales del Carlismo
65. La Segunda Guerra Carlista : de menor duración e importancia que se extendió ente 1846-1849.
66. La Tercera Guerra Carlista , que estalló durante el Sexenio Democrático y acabó con la Restauración Borbónica (1873-1876). Esta termina con el problema carlista.
75. Los carlistas más moderados (Gómez, Zaratiegui y Maroto), conscientes de la imposibilidad de una victoria militar y se mostraban más favorables a un pacto con los isabelinos, a cambio de que éstos respetaran los fueros
76.
77. Aunque unos pocos resistieron hasta julio de 1840 en Aragón y Cataluña, la guerra civil concluyó con la victoria de los liberales isabelinos, la huida de Don Carlos a Francia y con la firma del Convenio de Vergara (1839) General Maroto: firma el Convenio de Vergara con Espartero en 1839
78.
79.
80. La Legión Auxiliar portuguesa, integrada por tropas regulares, fue de más ayuda
83. Muestra de la intervención extranjera en la guerra civil carlista, fue la misión de Lord Edward Granville Eliot, enviado del Gobierno británico para tratar las condiciones de la lucha y evitar los excesos.
84. En 1835 carlistas e isabelinos firman el Convenio Eliot, que garantizaba el buen trato a prisioneros y heridos, el fin de las represalias contra la población civil, el intercambio de presos, así como el ámbito de aplicación efectiva, Navarra y las provincias vascas.
88. El deseo de reintegrar a los carlistas en el nuevo sistema político creado por los liberales
89.
90. Reconocimiento de los grados a mandos y oficiales carlistas., reinsertándoles en el Ejército regular (Zaratiegui)
91. Ambigua promesa de mantener los privilegios forales de Navarra y provincias vascas
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96. Pero mantienen sus privilegios militares, es decir, no tienen la obligación de salir fuera de su territorio.
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98. A cambio se introduce el concierto económico para cada provincia, que calculaba la contribución anual de los ciudadanos vascos a los gastos generales del estado
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102. Tuvo poco seguimiento en los territorios del País Vasco y Navarra. Cataluña es la única donde se producirá un mayor seguimiento. La causa de ello es el descontento (“malcontents”) de los “matiners” ( o madrugadores, son los campesinos y artesanos), que rechazan la sociedad industrial.
103. La crisis económica (1846-1847), la presión demográfica, la crisis agraria y las hambrunas son causas de esta reacción popular.
110. Debilidad gubernamental de la I República, ante las distintas insurrecciones que se dan simultáneamente: cubana, cantonal, campesina y carlista.
111.
112. El pretendiente se comprometió a restablecer los fueros suprimidos por Felipe V.
113. Llegó a formar un Gobierno, con capital en Estella, que editó sellos y acuñó monedas.
114. Con la Restauración Borbónica en 1874, Alfonso XII toma el mando del Ejército, derrotando a los carlistas.
115.
116. En febrero de 1876 se firma la Paz de Somorrostro (“Paz sin vencedores ni vencidos”)
117. En julio de 1876 se abolieron los fueros de las provincias vascas (no se habla de abolir, sino de reformar el antiguo régimen foral).
118. Cánovas se limitó a informar a los representantes de las Diputaciones forales la decisión de hacer extensiva a todos los territorios españoles idénticas obligaciones, como: servicio militar o pago de contribuciones. Sin embargo, continuó el sistema de concierto económico .
121. Entre 1833 y 1876 el conflicto se manifestará a lo largo de tres guerras civiles, pero el ideario carlista, versión española del tradicionalismo europeo, tuvo una vida más larga.
122. Fue un movimiento de protesta contra las corrientes dominantes de la época: Liberalismo, capitalismo, industrialización y urbanismo, socialismo, irreligiosidad y ateísmo.
123. Fue un conflicto que ensangrentó y dividió a la sociedad española durante gran parte del siglo XIX.
130. El protagonismo político de los militares. Éstos, ante la amenaza carlista se convierten en pieza clave para la defensa del régimen liberal. Los generales o “espadones” se erigieron en árbitros de la vida política. El recurso al pronunciamiento fue una fórmula habitual de instaurar cambios de gobierno y reorientar la política
131.
132. TRAS LA DERROTA DEL ABSOLUTISMO: LA CONSTRUCCIÓN DEL ESTADO LIBERAL