1. ORACIÓN FINAL
¿POR QUÉ, SEÑOR?
¿Por qué, Señor
rompes las fronteras del cielo
y te adentras, sin ruido ni aspavientos,
en la débil humanidad que espera tu salvación?
¿POR QUÉ, SEÑOR?
Sólo hay una respuesta,
tan grande como Tú mismo
y tan corta la palabra que te define:
¡TODO POR AMOR!
Por amor naces y por amor bajas
Por amor lloras y por amor redimes
Por amor te dejas adorar
y por amor, un día también,
en otro trono, de madera también,
demostrarás lo mucho que nos amas.
¡POR AMOR, SEÑOR, VIENES AL
MUNDO!
EXHORTACIÓN DE DESPEDIDA
Cantad los villancicos que aprendimos de
niños, que nos hagamos niños para mejor
entender el milagro de un Dios hecho un
niño pequeño, un bebé. ¡Feliz Navidad! Y
que la paz de Dios este con nosotros y con
nuestros hermanos y con el mundo entero,
que tanta PAZ Y AMOR NECESITAN.
Dios de la paz, don de paz para toda la
Humanidad, ven a vivir en el corazón de
todo hombre y de toda familia. Sé tú
nuestra paz y nuestra alegría. (J.Pablo II)
RITO DE CONCLUSIÓN
BENDICIÓN Y DESPEDIDA.
ADORACIÓN DEL NIÑO JESÚS.
(Villancicos de CD)
PARROQUIA DE SAN DIEGO
Avda.de san Diego, 61. Madrid
24/25 de Diciembre de 2013.
Ciclo A. Misa del Gallo
MONICIÓN DE ENTRADA
Recibid un primer saludo de amor y de paz.
La liturgia de esta noche, grande y bella, nos
irá mostrando el camino preciso de la
celebración. Pero, además, queremos que la
habitual bienvenida a la Eucaristía tenga más
fuerza, más contenido, más amor, aún si cabe.
El Señor ya está aquí. Le hemos esperado.
Hemos intentado, así mismo, convertirnos a Él
para facilitar el camino de su llegada. Ya está
aquí. Es nuestra cena litúrgica de
Nochebuena, como la que acabáis de celebrar
en casa y que luego continuaréis tras la
Eucaristía.
El Señor viene. El Señor –el Niño Dios—ya está
aquí…
Un silencio profundo, una quietud total,
envolvió la Tierra en esos momentos previos
al Nacimiento.
Hermanos y hermanas con toda nuestra
alegría iniciemos nuestra eucaristía…
PERDÓN
El Señor Jesús nos invita a la reconciliación.
Confiados en su generosidad nos
reconocemos pecadores.
2. * Dios es amor. ¡Gracias por hacerte presente
en medio del duro mundo!,
Señor ten piedad.
* Dios es verdad. ¡Gracias, Señor, por hacer
de Jesús un camino que nos lleve a Ti,
Cristo ten piedad.
* Dios es humildad. ¡Gracias, Señor, porque
en el rostro de un Niño nos haces comprender
la puerta que hemos de elegir para ser hijos
tuyos: la ternura y la bondad.,
Señor ten piedad.
Dios todopoderoso tenga misericordia de
nosotros, perdone nuestros pecados y nos
lleve a la vida eterna. Amén
GLORIA.
Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a los
hombres que ama el Señor.
MONICIÓN A LAS LECTURAS
Dios, como Padre, quiere la salvación, el
futuro para todos sus hijos. Las lecturas que
vamos a escuchar son un canto, por el
Nacimiento del Señor, a la victoria, al gozo, a
la alegría.
Las tres lecturas que vamos a escuchar nos
presentan un impresionante escenario lleno
de luz, de esperanza y de promesas
cumplidas.
Escuchemos atentamente. No durmamos.
Dios deja el palacio del cielo y se adentra en la
realidad del hombre.
PETICIONES
Pedimos a nuestro buen Padre Dios,
diciendo:
TE ROGAMOS, ÓYENOS
* Por la Iglesia. Para que sea también un
BELÉN. Una casa en la que, aquellos que
llamen, puedan encontrar pan para su vida
y palabras para su existencia.
Roguemos al Señor.
* No olvidemos a nuestros hermanos
cristianos de Tierra Santa.
Recemos por los cristianos de Belén. Por
aquellos que custodian y rezan por nosotros
en la gruta de la Natividad.
Roguemos al Señor.
* Por nuestras familias. Para que, la Navidad,
sea un tiempo de fe y de oración, de fervor y
de oración. Que no nos dejemos seducir
por lo secundario.
Roguemos al Señor.
* Tengamos una oración especial por los
pobres. Por los que, como Jesús, no tienen un
lugar donde nacer. Por aquellos niños que,
por el egoísmo y las leyes injustas, no pueden
ver la luz.
Roguemos al Señor.
* Recemos, además, por nuestros difuntos.
Por aquellos que, otros años, nos
acompañaban físicamente. Que descansen en
la paz del Señor adorando y contemplando,
cara a cara, el rostro del Dios Niño.
Roguemos al Señor.
Padre Nuestro, atiende estas necesidades que
tu pueblo confiado te presenta. Por Jesucristo
Nuestro Señor. Amén.
OFERTORIO.
Cantemos todos la Navidad, Dios ha nacido,
aleluya. Su luz venció la oscuridad, Dios se
hace hombre, aleluya.