El documento clasifica los elementos químicos que se encuentran en los seres vivos en bioelementos primarios como el carbono, hidrógeno, oxígeno y nitrógeno que constituyen el 96% de la materia viva, bioelementos secundarios como el calcio, sodio y potasio que son esenciales para funciones como la contracción muscular y la transmisión del impulso nervioso, y oligoelementos como el hierro, manganeso y cobalto que se encuentran en muy bajas cantidades pero cumplen funciones importantes como constituir