Las marcas ya no solo ofrecen productos, sino experiencias y valores. Los jóvenes universitarios son consumidores exigentes que buscan marcas innovadoras, de moda y responsables socialmente. Para atraerlos, las marcas deben estar a la vanguardia de las tendencias, escuchar sus opiniones, y ofrecer productos de alta calidad a precios accesibles que se adapten a su estilo de vida dinámico y su enfoque en la tecnología y lo digital.