More than Just Lines on a Map: Best Practices for U.S Bike Routes
Globy
1. Globy
Globy era un joven globo muy simpático al que algo nuevo le esperaba. Solía pasear por el
parque con el tendero de los helados, pero una tarde de fuerte viento, el destino cambió su
suerte.
No había otra cosa que Globy más deseara, que disfrutar de una tarde de sol y calor a la orilla
del gran lago azul del parque. Era maravilloso escuchar las risas y gritos de los niños del barrio
correteando por la hierba.
En ciertos casos Globy temía recibir uno de esos balonazos de los que algún goleador solía
lanzar con fuerza. Pero su miedo no era mayor del que muchas de las parejas tenían mientras
disfrutaban de un buen libro bajo un árbol frondoso, a la sombra.
Esa tarde, las nubes jugaban a esconder el sol y el viento las llevaba de un lado a otro. En un
soplido de estos, Globy sentía que sus pies no estaban atados al nudo que le unía a su familia.
Así era, el viento lo había soltado del grupo de globos.
Entonces Globy, comenzó a volar y volar y volar… Estaba perdido, tenía frío, el viento lo
llevaba con fuerza, no sabía hacia dónde iba…
Nuestro amigo Globy pasó largas horas de viaje; arriba, abajo, arriba, abajo… Tanto subió, que
las nubes tocó…
¡Estaba agotado! Así que se durmió. Sin embargo el viento seguía su vuelo… De repente, Globy
¡pega un brinco! Algo lo había paralizado.
¿Qué podía ser?
Era Mario, el niño que todos los jueves compraba el helado en su puesto. Globy se puso feliz,
¡vaya suerte había tenido! Mario también sonreía, ¡menudo regalo se había encontrado!
Mario cogió a Globy y se lo llevó de paseo. Fue una tarde maravillosa. Los dos nuevos amigos
pasaron por los rincones más bonitos del parque y… ¿a que no adivináis? Era jueves y fueron a
por el helado de Mario, así que Globy tuvo la gran suerte de ver a su familia y marcharse
contento a jugar con Mario.
¡Muy buenas de nuevo!
Esta vez voy a compartir con vosotros una actividad que he creado como parte de esta misma tarea, también
para mi universidad.
2. Se trata de una pequeña historia que he creado.
Mirad, mi propuesta consistiría en ir un día a una de mis clases de 3º de Primaria con un globo de color rojo.
Este globo rojo tiene nombre e historia. Os presento a... ¡Globy!
Pues bien, haría las presentaciones y les contaría la historia de nuestro nuevo amigo Globy. Después,
encendería nuestra pizarra digial y les mostraría el ppt que voy a compartir a continuación de esta explicación.
En él se ven cuatro sencillas diapositivas que narraran muy simplemente el cuento que yo les he contado.
Entonces, pediría un voluntario para que, con la ayuda de estas imágenes, se animara a contarnos la historia de
la forma en que fuera capaz de recordarla.
Y una vez conseguido el hacer partícipes a mis alumnos de la historia, les propondría prepararnos esta historia
con bits en mano y la narración redactada tras el dibujo, para ir a la clase de nuestros compañeros de primer
curso y contarles el cuento, además de pasar un buen rato con ellos.