1. Se llama «El Rafita» (RAFAEL GARCIA FERNANDEZ)
Cuando tenía 14 años, junto con otros animales bastardos de igual
pelaje, violó, torturó y quemó viva a Sandra Palo, una joven deficiente
psíquica. Hasta ahora no se había podido conseguir ninguna imagen de
él, pues era menor de edad y nuestras beatíficas leyes protegían su
identidad.
Ahora, ya con 18 añitos, y después de pasar cuatro años en un
centro de menores jugando a la Play y distrayéndose en talleres
de carpintería, está de nuevo en la calle haciendo su vida
tranquilamente, a pesar de que los informes de los psicólogos
han señalado que ni se ha reinsertado ni arrepentido, por lo que
la probabilidad de reincidencia es muy alta.
Tanto la Fiscalía como el Defensor del Menor pretenden que nunca más
se vuelva a emitir su imagen a través de los medios de comunicación;
imagen que, difundida por primera vez a través de Telecinco, tuvo
2. que ser retirada de su página web en menos de 12 horas.
La madre de Sandra defiende su derecho a exigir que la imagen del
asesino de su hija sea vista por todo el mundo.
Si la Justicia le niega ese elemental derecho, nosotros,
ciudadanos normales y corrientes que elegimos,
pagamos y padecemos a los legisladores, se lo
concedemos de buen grado.
Por Sandra, por ti, por mí y por todos: enseña su
rostro.
¡¡¡ P Á S A L O !!!
Está considerado «el crimen más vil de la historia penal
española». No faltan argumentos que sustenten esta
afirmación. A Sandra Palo Bermúdez, una chica de 22 años,
getafense y con una pequeña discapacidad psíquica, la
raptaron, la violaron tres personas, la atropellaron 15 veces y
la quemaron con gasolina cuando aún le quedaba vida