El fascismo surge en Italia en los años 1920 debido a varios factores: la insatisfacción con los resultados de la Primera Guerra Mundial, la crisis económica y las huelgas masivas. Benito Mussolini fundó el Partido Fascista en 1919 y ganó apoyo de grupos conservadores con sus grupos de combate paramilitares. En 1922, Mussolini se convirtió en primer ministro de Italia y eventualmente estableció una dictadura fascista totalitaria.