Este documento presenta el programa "Calidad y equidad de la Educación" de la Organización de Estados Iberoamericanos para 2001-2002. El programa busca mejorar la calidad de los sistemas educativos preservando la equidad a través de dos componentes: calidad (evaluación y sistemas de información) y equidad (atención a grupos desfavorecidos). El objetivo es generar oportunidades de aprendizaje para toda la población atendiendo a la diversidad.

1. Programa Calidad y equidad de la EducaciónDocumento programático2001-2002<br />Texto aprobado por la 68ª Reunión del Consejo Directivo de la OEI en Valencia (España) el 26 de marzo de 2001<br />Descripción<br />La lógica predominante de este programa de cooperación, que vincula calidad con equidad, es la de una opción para articular en un mismo proceso programático dos espacios de reflexión y de intervención que hoy representan un ciclo virtuoso: incrementar los niveles de calidad y de pertinencia de los sistemas educativos, preservando o estimulando aquellas acciones positivas que influyen decididamente en el desarrollo de políticas educativas “para todos”, prestando una especial atención a aquellos sectores que -por diversas causas- se encuentran alejados o no suficientemente integrados en el sistema.<br />En este sentido, se aprecian en el programa dos componentes con perfiles propios, pero necesariamente conjugados en una estrategia de actuación con vocación integral, con miras a la optimización de sus impactos. Para ello, ambos componentes han de estar en estrecha conexión, facilitando así trasvases de experiencias y buscando en forma permanente escenarios de convergencia y de articulación en la elaboración teórica y en su aplicación práctica. <br />Durante el pasado bienio, el componente de calidad ha estado abocado centralmente a los aspectos relativos a la evaluación de la calidad de la educación; su ámbito de trabajo prioritario ha sido aquel definido por el Programa Cumbre de Evaluación de la Calidad. En el próximo bienio, este componente se reforzará con la capacitación y la asistencia técnica para la mejora de los sistemas de información educativa.<br />En el caso de la equidad, el esfuerzo se seguirá dirigiendo a identificar espacios susceptibles de absorber cooperación técnica; proceder a un análisis detallado de los mismos; confeccionar o actualizar los correspondientes “estados del arte”; y definir eventuales líneas de actuación que serán desarrolladas en bienios posteriores. Para ello, este componente se alimentará de los resultados que vayan produciendo los componentes de calidad (evaluación educativa y sistemas de información), de los trabajos que al respecto elabore el Observatorio, así como de aquellos productos que deriven del quehacer del propio programa (políticas compensatorias, atención a la diversidad, entre otros).<br />Junto a ello, la propuesta de trabajo promueve también el desarrollo de proyectos multiprogramáticos focalizados en sectores sociales en situación de riesgo.<br />Fundamentos <br />La década de los noventa se inició con el reconocimiento de la educación como un derecho fundamental para todos, promoviéndose una visión ampliada de la educación básica referida a la satisfacción de las necesidades de aprendizaje a lo largo de toda la vida(1).<br />A partir de este reconocimiento de una visión ampliada de la educación, la región experimentó un avance notorio; los objetivos trazados a principios de la década suponían un paso adelante en el terreno de las preocupaciones centrales dentro del sistema educativo. Con estructuras relativamente consolidadas o en vías de consolidación y procesos inminentes de democratización, la base del sistema educativo creció en forma constante y los fenómenos de inclusión/exclusión educativa comenzaron a tener otras características más complejas que las conocidas hasta el momento. <br />Los gobiernos iberoamericanos asumen que una educación integral de calidad supone la formulación de políticas que contemplen la igualdad de acceso, permanencia y egreso de la población, procurando grados crecientes de equidad social y promoviendo programas específicos de compensación de desigualdades(2). Además, resulta evidente que la calidad de la educación, la equidad, el desarrollo y la integración cobran protagonismo ante el reto de la globalización(3).<br />Diez años después de la Declaración Mundial de Educación para todos, en Dakar se establecen un conjunto de objetivos y de compromisos que destacan el papel preponderante que ocupa el eje de la calidad y la equidad en el marco de las políticas educativas, y que dan cuenta de la necesidad de aunar esfuerzos en la cooperación internacional para el logro de tales retos(4).<br />Hoy la preocupación se centra en el diseño de estrategias que articulen los factores externos e internos a la escuela con la finalidad de crear más y mejores oportunidades de aprendizaje para la población escolar y escolarizable, atendiendo a la diversidad y heterogeneidad de las mismas. Aunque el balance de la década de los noventa muestra importantes avances tendentes a la universalización de la educación primaria, la región de América Latina continua siendo una de las regiones más inequitativas del mundo(5). Surge entonces la necesidad de emprender acciones que promuevan el desarrollo y la consolidación de políticas de atención educativa de la diversidad, orientadas hacia la mejora sustantiva de la equidad en la región.<br />Entre los múltiples significados atribuidos al concepto calidad cabe destacar el criterio de calidad como eficacia, entendida como el logro de los objetivos propuestos por el propio sistema educativo. En este sentido, el énfasis está puesto en los resultados de aprendizaje efectivamente alcanzados por la acción educativa. Otro criterio de calidad está asociado con la pertinencia, tanto en términos individuales como sociales. En este caso, el peso se concentra en los fines atribuidos a la acción educativa y su importancia para el desarrollo individual y social. En tercer término se destaca el criterio de calidad de los procesos, es decir, de los recursos y los medios para el desarrollo del aprendizaje.<br />La conjunción de estos criterios y la integración de los factores escolares con los extraescolares dan lugar a lo que se denomina oportunidades de aprendizaje, concepto relativamente nuevo y complementario al de calidad, ya que permite sintetizar la preocupación por la misma. El interés por la calidad de la educación y de los servicios educativos se asocia a esta preocupación por generar adecuadas oportunidades de aprendizaje para la totalidad de los alumnos.<br />Este enfoque permite relacionar el eje de la calidad con el de la equidad, dado que a través de la incorporación del concepto de oportunidades de aprendizaje, el desideratum de lograr igualdad de oportunidades para toda la población escolar adquiere nuevos significados; el interés se centra no sólo en cuántos y en qué proporción asisten, sino en quiénes aprenden en las escuelas, qué aprenden y en qué condiciones lo hacen. Los objetivos vinculados con la equidad están, por lo tanto, relacionados con la capacidad de los sistemas educativos para generar condiciones adecuadas para el aprendizaje y promover aprendizajes relevantes para toda la población, atendiendo a su heterogeneidad. Para ello, es necesario promover el desarrollo de herramientas conceptuales y metodológicas que prohíjen la articulación operacional de la equidad y calidad en las políticas educativas y sociales de la región. <br />Un complejo abanico de factores y elementos componen este constructo de la calidad de la educación. Muchos debates teóricos arrojan como resultado un cierto estado de desarrollo del conocimiento teórico-conceptual al respecto, y un menor desarrollo de herramientas e instrumentos para captar la presencia o ausencia de factores que contribuyen a esta compleja construcción de la calidad de la educación. Es necesario, entonces, establecer criterios de calidad y diseñar procesos de evaluación. Los sistemas de medición de la calidad deben considerar la diversidad de situaciones individuales y grupales para evitar cualquier tipo de exclusión. Con esta finalidad, el programa de Calidad y Equidad desarrolla como uno de sus componentes el fortalecimiento de los sistemas nacionales de evaluación, acción que se lleva a cabo a través del Programa Cumbre Evaluación de la Calidad de la Educación desde 1995.<br />Los indicadores tradicionales del desempeño del sistema educativo son insuficientes para reflejar la calidad y la equidad. Estos indicadores respondían al supuesto de que dentro de la escuela siempre se aprendía, supuesto que hoy es cuestionado. Se daba por entendido que a mayor número de años de escolaridad correspondía una mejor educación, con lo cual bastaba que el sistema educativo garantizara el acceso al mismo y luego la permanencia para obtener resultados positivos.<br />Una gestión educativa eficaz y eficiente requiere de la disponibilidad de sistemas de información educativa que suministren insumos necesarios para la evaluación de la calidad y la equidad de los sistemas educativos. Esta línea de acción se desarrollará en colaboración con el programa de Desarrollo Escolar y Administración Educativa.<br />Objetivo general<br />Contribuir al incremento de la calidad y la pertinencia de los sistemas educativos y estimular acciones positivas orientadas a fomentar la igualdad de oportunidades y la justicia social, a partir de la valoración de la diversidad cultural y la atención a grupos en situación de desigualdad educativa.<br />Objetivos específicos<br />Promover el desarrollo y la consolidación de políticas y proyectos de atención a la desigualdad educativa en el conjunto de los países de la región.<br />Favorecer la instalación o consolidación de sistemas nacionales de evaluación de la calidad educativa para los niveles básico y medio.<br />Apoyar la consolidación y fortalecimiento de los sistemas de información educativa como apoyo a la gestión.<br />Fomentar el desarrollo de herramientas conceptuales y metodológicas sobre el eje de calidad y equidad dentro del sistema educativo.<br />Matriz de líneas de acción<br />Objetivos específicos - Principales componentes<br />1. Promover el desarrollo y la consolidación de políticas y proyectos de atención a la desigualdad educativa en el conjunto de los países de la región.<br />Desarrollo de proyectos integrales de atención a poblaciones desfavorecidas, desde una perspectiva integral, que incluyan acciones pluriprogramáticas.<br />Acciones de capacitación, asistencia técnica, pasantías, investigaciones y producción editorial, que propicien el intercambio de experiencias y la producción de conocimiento en el área.<br />2. Favorecer la instalación o consolidación de sistemas nacionales de evaluación de la calidad educativa para los niveles básico y medio<br />Capacitación, asistencia técnica, construcción de bancos de información, organización de pasantías y desarrollo de estudios comparativos que permitan incrementar la capacidad instalada en el ámbito de la evaluación educativa en la región<br />3. Apoyar la consolidación y fortalecimiento de los sistemas de información educativa como apoyo a la gestión<br />Capacitación de funcionarios y técnicos en el desarrollo de competencias vinculadas con la gestión de la información dentro del sistema educativo.<br />Articulación de diferentes iniciativas existentes en la región de construcción de sistemas de indicadores complejos sobre el sistema educativo y asesoría y capacitación para su uso con fines de mejora<br />4. Fomentar el desarrollo de herramientas conceptuales y metodológicas sobre el eje de calidad y equidad dentro del sistema educativo.<br />Realización de estudios e investigaciones que permitan incrementar el conocimiento existente en las áreas de la calidad y equidad dentro de los sistemas educativos<br />Notas<br />(1) Conferencia Mundial sobre Educación para todos. Jomtiem, Thailandia, 1990.<br />(2) V Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno. Bariloche, Argentina, 1995.<br />(3) IX Conferencia Iberoamericana de Educación. La Habana, 1999.<br />(4) Foro Mundial de Educación para todos. Dakar, Senegal, 2000.<br />(5) Conferencia Educación para todos. Marco de Acción para las Américas. Santo Domingo, 2000.<br />