La comunicación y la educación están estrechamente relacionadas. La comunicación efectiva requiere un clima de paz y progreso, y la labor del profesorado requiere inteligencia, humanidad y amor. Un buen proceso de enseñanza-aprendizaje utiliza múltiples formas de expresión como el lenguaje, la tecnología y los medios de comunicación. La retroalimentación es fundamental para mejorar el aprendizaje de los estudiantes.