Este documento describe la Ilustración en España, centrándose en tres ensayistas del siglo XVIII: Fray Benito Jerónimo Feijoo y Montenegro, José Cadalso y Vázquez, y Gaspar Melchor de Jovellanos. Explica las características y etapas de la Ilustración española, influenciada por la Ilustración francesa pero manteniendo una sensibilidad religiosa distinta, y destaca la labor de críticos y ensayistas como Feijoo, Cadalso y Jovellanos.
La Ilustración en España. Los ensayistas del siglo 18..docx
1. La Ilustración en España. Ensayistas del siglo 18.
Fray Benito Jerónimo Feijoo y Montenegro (1676-1764)
José Cadalso y Vázquez (1741-1782)
Gaspar Melchor de Jovellanos (1744-1811)
La Ilustración es la salida del hombre del estado de inmadurez en el que se encontraba por
propia culpa.
(Inmanuel Kant)
François Marie Atouet, alias Voltaire (1694-1778), Jean Antoine Condorcet (1743-1794) e
Immanuel Kant (1724-1804) saludaron con optimismo los signos de la nueva sociedad que
se estaba configurando e intentaron motivar a sus contemporáneos para que colaborasen
conscientemente a acelerar la transformación social en la misma dirección que ellos
detectaban. Ese fue el motor de la Ilustración.
Entre la revolución inglesa (1688) y la francesa (1789) se desarrolla un amplio movimiento
que representa un profundo cambio en todos los órdenes del pensamiento que se llamó
"Siglo de las luces", o "de la Ilustración". Por "Ilustración" se entiende una actividad en lo
fundamental pedagógica y educativa. El ansia que subyace al proyecto ilustrado es ese
proceso de liberación de ataduras, de aligeramiento de cargas pesadas, incrustadas como
bagaje por la historia en la vida de los hombres y de los pueblos, con la pretensión de
hacerlos más veloces hacia la felicidad con la luz de la razón.
La Ilustración establece la Razón como única autoridad. La Razón es Libertad, es Justicia, es
Bien y es Felicidad. La Razón libera de las ataduras de las creencias tradicionales y ella sola
es capaz de resolver todos los problemas que se plantean al hombre. Kant dio a su siglo el
nombre de "era de la crítica". Para los racionalistas del siglo XVII, la razón es
fundamentalmente una razón especulativa; para los filósofos ilustrados, es una razón
volcada a la práctica. Es por esta actividad liberadora de la razón, y no por su capacidad
especulativa, por la que es ensalzada y por lo que los revolucionarios franceses la deificaron
2. mediante el culto a la diosa Razón. Sapere aude: Ten valor de servirte de tu propio
entendimiento, fue la Máxima de Immanuel Kant (1724-1804).
Fue Jean-Jacques Rousseau (1712-1778) quien fijó los rasgos generales de la receta del viaje
ilustrado y su prerromanticismo dio también la fórmula a los viajeros del siglo siguiente.
«El siglo XVIII es también una época de revolución en el vocabulario, especialmente en el
ámbito político. La palabra "social" no adopta su sentido moderno hasta que aparece el
Contrato social,de Rousseau;La Enciclopedia considera lapalabra como nueva y le confiere
un sentido diferente alactual."Capitalista"pertenece alvocabulario de Turgot. Laexpresión
"clase media" será empleada en la Constituyente durante la discusión sobre el censo. En
cuanto a la palabra "pueblo", que a comienzos de siglo tenía por lo general un sentido
peyorativo ("llamo pueblo a todo lo que piensa villana y comúnmente" dice Mme. de
Lambert, la amiga de Montesquieu) toma su sentido nuevo a partir de 1750; para los
redactores de la Enciclopedia, el pueblo es la "parte más numerosa y necesaria de la
nación". Igualmente, las palabras "nación" y "nacional" van adquiriendo poco a poco en
esta época su sentido moderno.
Esta transformación del vocabulario es el signo de una profunda evolución de las ideas.
Algunas palabras dominan el siglo: naturaleza, felicidad, virtud, razón, progreso. No son
nuevas, y los diferentes autores están lejos de conferirles siempre el mismo sentido. Sin
embargo, existe un "espíritu del siglo", un amplio acuerdo sobre algunas nociones
fundamentales. Del mismo modo, el siglo de la Ilustración es el que alberga el nacimiento
de los grandes conceptos, los conceptos en mayúscula: Libertad, Progreso, Hombre. El siglo
XVIII descubre especialmente la existencia del hombre. Bossuet, en su Histoire universelle,
no hablaba del universo, sino tan sólo de algunas naciones desaparecidas. Pascal habló sólo
de los hombres.
El fenómeno cultural más importante del siglo XVIII quizás sea la aparición de la
Enciclopedia. En esta obra, que fue traducida a casi todos los idiomas, encontró la
Ilustración la realización práctica de sus máximas aspiraciones. Ella agrupó a los filósofos
franceses y les dio la cohesión necesaria para atacar a fondo las antiguas instituciones y
propagar abiertamente sus propósitos renovadores de la ciencia, del hombre y de la
sociedad.» (Enciclopedia Universal Micronet S.A. 1995-2007)
3. La Ilustración está dotada de un común espíritu de transformación intelectual, social y
política,y que vinculada aunos mismos ideales desuperación del orden tradicional, aparece
dividida desde un principio en dos tendencias que tendrán una profunda repercusión:
La corriente volteriana, caracterizada por fundamentalmente por su clara ascendencia
racionalista, por su profunda carga materialista y por su extracción aristocrática, en la que
culmina la evolución ideológica racionalista iniciada en el Renacimiento y decisivamente
impulsada tras la revolución cartesiana que tuvo lugar en el siglo XVII. Esta corriente
volteriana se afanará por defender todo tipo de argumentaciones en favor del predominio
de la razón sobre cualquier tipo de pasión o entusiasmo personal a partir de la antinomia
entre el hombre natural y el hombre artificial. Acabaría en la definición abierta del ateísmo.
La corriente roussoniana, que, en una proyección muy distinta a la de la línea anterior,
seguiría la dirección de carácter más típicamente naturalista y se manifestaría por sus
decisivos rasgos de tipo sentimental, espiritualistas y populares. Esta corriente sigue una
trayectoria muy distinta a la volteriana y da lugar a una poderosa oleada de irracionalidad.
La corriente roussoniana parte de los valores derivados de la obra apasionada y vital de
Jean-Jacques Rousseau (1712-1778).
Este dualismo –volterianismo y roussonianismo– se inicia a partir de la generación ilustrada
francesa de 1748 y será fuente del bicefalismo político-ideológico del siglo XIX e incluso del
siglo XX. Bicefalismo que girará en torno al significado y el papel de la materia, el valor de
la razón y el marco de acción del individuo concreto.
Frente alculto de la razón, Rousseaupropugnó el libre desenvolvimiento de lapersonalidad
y la espiritualizaciónde laconcepción mecanicistade la naturaleza. Contrario a laeducación
intelectualista, minoritaria y elitista de los típicos ilustrados, desarrolló un sistema basado
en el desarrollo de las cualidades naturales: el hombre tiene en sí mismo suficientes fuerzas
de amor, generosidad y piedad, capaces deoponerse a las decrueldad y egoísmo. Elhombre
es naturalmente bueno, la iniquidad quedó establecida en la sociedad humana desde el
momento en que alguien se atrevió a decir: “eso es mío”.
En su famoso tratado político El contrato social o Principios de derecho político (1762),
Rousseau expuso sus argumentos sobre libertad civil y contribuyó a la posterior
fundamentación y base ideológica de la Revolución Francesa, al defender la supremacía de
la voluntad popular frente al derecho divino.
4. En su influyente estudio Emilio o De la educación (1762), expuso una nueva teoría de la
educación, subrayando lapreeminencia de laexpresión sobre larepresión, para que un niño
sea equilibrado y librepensador.
Sus ideas estuvieron a medio camino entre la Ilustración del siglo XVIII, con su defensa
apasionada de la razón y los derechos individuales, y el romanticismo de principios del XIX,
que propugnaba la experiencia subjetiva intensa frente al pensamiento racional.
La Ilustración Española
El siglo de la Ilustración no tiene en España la entidad que en otros países europeos, debido
a una mayor influencia de la religión, que ha llevado a algunos a considerar a España como
uno de los mejores exponentes de la llamada Ilustración cristiana.
Etapas de la Ilustración en España:
En la Ilustración española se vienen considerando cuatro períodos:
Finales del siglo XVII y primeros el XVIII:
El periodo de los novatores o intelectuales interesados por las nuevas corrientes
ideológicas.
Entre 1715 y los primeros años del reinado de Carlos III (1759-1788):
Este periodo está dominado por los ilustrados reformistas, con Feijoo al frente.
Reinado de Carlos III (1759-1788):
5. Periodo de plenitud de la Ilustración y del Despotismo Ilustrado en España.
Reinado de Carlos IV (1788-1808):
Retroceso de la influencia de los ilustrados. Ofensiva antiilustrada, procedente de grupos
conservadores, alarmados por el "socavamiento" del orden social y político que imputaban
a la Ilustración.
La ofensiva antiilustrada hizo que unos ilustrados se desplazaran hacia el liberalismo y que
otros intentaran restablecer el Despotismo Ilustrado después de 1808, al socaire de los
ejércitos napoleónicos presentes en la geografía española.
La "singularidad" de la Ilustración española
Donde mejor se percibe la diferencia entre la Ilustración española y la europea es en el
terreno de la religión. La sensibilidad religiosa de los ilustrados españoles se mantuvo fiel a
la ortodoxia. El ateísmo y el materialismo no arraigaron entre los ilustrados, aunque se
muestran críticos con las supersticiones y las costumbres ancestrales.
«La actitud religiosa de los ilustrados chocó frontalmente con la religiosidad popular al
gusto del Barroco. Frente a las múltiples advocaciones patronales de vírgenes y santos,
grandes ceremonias y sentimentalismo a flor de piel, los ilustrados propugnan un culto con
Cristo como centro, desarrollo de la religiosidad interior y una mayor tolerancia hacia los
otros credos religiosos.
La fe no rebasaría la dimensión interna del individuo, quedándose en los límites de lo
privado. La ley natural se convertiría en auténtica norma de conducta para cualquier
hombre, con independencia de su religión. Lo que verdaderamente importaban era el
hombre "virtuoso".
También coincidían todos los ilustrados españoles en el deseo de reforma de la Iglesia,
considerada en el plano institucional, una reforma que se enfocaba con clara inclinación
6. hacia la intervención del poder real o civil y hacia la limitación del poder temporal del
Papado.
Pero no faltaron discrepancias a la hora de las propuestas concretas, debido al deseo del
poder político de interferir, según sus planteamientos regalistas, en la vida eclesiástica. Por
eso no sólo se producirá, en muchas ocasiones, una divergencia entre las propuestas
ilustradas y los intereses gubernamentales, sino que el Estado prescindirá totalmente de
aquellas formulaciones que no favorecían su gran objetivo: incrementar su poder en la
esfera eclesiástica, como una dimensión más de su propósito de reducir o acabar con las
jurisdicciones especiales dentro del territorio de la Monarquía.» (Enciclopedia Universal
Micronet S.A. 1995-2007)
La ideología ilustrada no pasó de ser patrimonio de una minoría, pues su difusión se vio
fuertemente limitada por el nivel de analfabetismo imperante. Pero incluso esta minoría no
siempre disponía de los medios necesarios para adquirir las publicaciones ilustradas.
Los enemigos de la Ilustración procuraron evitar su propagación por miedo a ver limitada la
omnipotencia estatal y los fundamentos en los que descansaba. La censura y la Inquisición
se ocuparon de impedirlo, favoreciendo a los defensores del pensamiento tradicional.
El término procede del francés Illustration, que en alemán se llamó Aufklärung y en inglés
Enlightement. En España no se trató de un periodo específico de la cultura, sino más bien
de un ambiente general de revocación y cambio. LaIlustración españolafue sóloreformista,
y con sus vacilaciones filosóficas y dudas estéticas, refleja de forma moderada los modelos
franceses.
En la Ilustración los principios de jerarquía, disciplina y autoridad dogmática son sustituidos
por los de igualdad, independencia intelectual y libre crítica. Deísmo contra dogmatismo
cristiano, filantropía contra caridad cristiana, tolerancia contra intolerancia ideológica,
derecho natural contra derecho divino. Literariamente se produjo un enfrentamiento entre
la continuidad y la reforma.
En España la Ilustración se distinguió por la investigación y el ensayo. Agotado el genio
creador del Siglo de Oro, el mediocre siglo XVIII produjo críticos y ensayistas buenos, así
como eruditos. Característico de España, sin embargo, es que las doctrinas de la Ilustración
7. no tuvieron el carácter anticlerical tan duro que adquirieron en Francia. Por ser de origen
extranjero y por la animosidad popular contra el reformismo y centralismo borbónico, las
doctrinas ilustradas no llegaron al pueblo, que reaccionó con la rehabilitación del folclore y
del regionalismo, buscando todos aquellos rasgos diferenciales de la identidad española. Lo
más importante de la Ilustración es el ensayismo crítico y reformador: Feijoo, Cadalso y
Jovellanos.
La llegada de la dinastía borbónica a España después de la Guerra de Sucesión (1702-1714)
trajo como una de sus principales consecuencias la introducción generalizada de la cultura
francesa en este país.
Durante el primer reinado de Felipe V (1724-1746) se sentaron las bases del llamado
"prerreformismo borbónico"; y el segundo reinado de Felipe V (1724-1746), tras la muerte
prematura de su hijo Luis I, y el de Fernando VI (1746-1759) prepararon el terreno para el
gran momento del reinado de Carlos III (1759-1788), punto culminante de la Ilustración en
España.
Junto a esta influencia cultural gala, hay que colocar la presencia de otras luces también
importantes: La Enciclopedia, las teorías de Rousseau y Montesquieu, el jansenismo, los
fisiócratas (escuela de pensamiento económico surgida en Francia en el siglo XVIII y la
primera que aplicó el método científico a la economía), la filosofía de John Locke (1632-
1704), máximo representante del empirismo, el liberalismo económico de Adam Smith
(1723-1790).
La Ilustración no tuvo en España el carácter radical que alcanzó en otros países europeos.
Los ilustrados españoles no rompieron totalmente con el pasado nacional, aunque
rechazaron lalíneaoficialdela tradición españolapor serincompatible con elnuevo espíritu
de los tiempos: criticaron el estoicismo barroco o la escolástica decadente del seiscientos y
buscaron sufuente de inspiración en elsentido crítico del humanista Luis Vives (1492-1540),
en la tendencia racionalista y libertaria del erasmismo y en el positivismo de los médicos-
filósofos del siglo XVI español.
Las líneas de pensamiento más importantes de la Ilustración española son el sensualismo
como teoría del conocimiento, el liberalismo como economía, la educación como reforma
radical, el regalismo como ideario político, el jansenismo como religiosidad, la renovación
historiográfica, el periodismo como órgano divulgador y la fuerza institucional de las
8. Sociedades Económicas del País que propagaron las ideas racionales de la Ilustración en una
sociedad habituada a creencias seculares.
Figura señera de laIlustración españolafue Gaspar Melchor de Jovellanos (1744-1811), cuya
figura llena todo el siglo XVIII. Otros representantes del espíritu ilustrado en los diferentes
campos de las ciencias y de las artes fueron:
Pedro Rodríguez Campomanes (1723-1802)
Pablo Olavide (1725-1803)
Juan Meléndez Valdés (1754-1817)
Melchor de Macanaz (1670-1760)
Cándido María Trigueros (1736-1798)
Antonio de Capmany (1742-1813)
Juan Bautista Muñoz (1745-1799)
José Cadalso (1741-1782)
Francisco Cabarrús (1752-1810)
Juan Antonio Llorente (1756-1823)
9. Fray Benito Jerónimo Feijoo y Montenegro (1676-1764)
VIDA
Nació en Casdemiro (Orense) en el seno de una familia de un antiguo linaje de hidalgos. Sus
padres eran personas de amplia cultura, que influyeron en la formación del futuro escritor.
Con catorce años tomó el hábito de San Benito y renunció al mayorazgo al que tenía
derecho como primogénito. Profesó a los dieciséis años y siguió sus estudios en otros
centros de la orden.
En 1709 enseñó Teología en el monasterio de San Vicente de Oviedo, ciudad en la que
residió a partir de esta fecha. Ese mismo año se licenció y doctoró en Teología por la
universidad de Oviedo, donde, entre 1710 y 1721, ocupó la cátedra de Teología de santo
Tomás.
En 1721 fue nombrado en 1721 abad de su monasterio. En 1724 pasó a la cátedra teológica
superior de Vísperas. Se retiró por razones de salud en 1739 y desde entonces se dedicó a
su tarea de escritor.
Su vida transcurre en su retiro provinciano. Es curioso que, viviendo en este ambiente
recogido del claustro conventual, se convierta en el primer divulgador de las "Luces" en el
ámbito de la lengua castellana.
Murió en Oviedo el 26 de septiembre de 1764.
OBRAS
Benito Jerónimo Feijoo, considerado como el máximo exponente del espíritu ilustrado
español, es elrepresentante de la primera fasede la Ilustración, en él tiene una de sus cimas
laerudición del sigloXVIII. Feijoo fue un polígrafo de saber enciclopédico. Fue elprimer gran
europeísta español. Sus ataques contra la ignorancia popular y el retraso fueron duros. Sus
10. críticas elevaron el nivel cultural de la época. Fue un antidogmático convencido y un
cultivador de los adelantos científicos modernos y de la cultura francesa.
Feijoo es fundamentalmente un ensayista que contribuyó a la formación del ensayo como
género literario, género nacido en los Essais (1580) de Michel Eyquemde Montaigne (1533-
1592). Los objetivos del ensayista Feijoo son: proponer la verdad, luchar contra el error,
explicar las cosas basándose en la experiencia, la razón y la autoridad de los escritores que
trataron el tema y tener una voluntad de estilo. Su discurso ideológico no sistemático
encaja en los presupuestos de lo que era entonces el ensayo en Europa.
Feijoo siguió el lema de Kant (“atreverse a saber”) y el de Voltaire (“atreveos a pensar por
vosotros mismos”). Fue un admirador de Francis Bacon, del que cogió su entusiasmo por
los aspectos utilitaristas de la ciencia, alejándose del racionalismo cartesiano.
El tono de sus escritos es antiautoritario. Un grupo importante de sus ensayos está
destinado a combatir supersticiones y falsas creencias populares: artes adivinatorias,
profecías y milagros supuestos, duendes y espíritus familiares. Feijoo rechaza lo popular y
lo inculto, despreciando al vulgo crédulo. Intenta dar información científica y hace gala, al
mismo tiempo, de una gran erudición humanística, con pinceladas de humor personal.
Feijoo crea un tipo de prosa sencilla y directa. Su estilo es funcional. El único género que
cultivó fue el ensayo.
En dos aspectos ejerció grandísimo influjo: En elidioma, con Feijoo la prosa moderna queda
sustancialmente fijada, y en la cultura al difundir en España los avances de la ciencia y del
pensamiento europeo en permanente pugna contra el error y la barbarie.
“Casi todos los conocimientos de su tiempo se representan en el Teatro crítico. Con brío
inusitado lucha contra errores, tradiciones vulgares y nacionalismo huero. Se lanza contra
beaterías de capilla, fueran estas científicas, filosóficas o estéticas; con igual ímpetu ataca
la opinión común, contra el amor a la patria –si por patria se entendía el provincialismo y
nacionalismo de cortas miras– que escondía intereses personales y engaños. Razón y libre
examen; aunque de vez en cuando bajara humilde la cabeza ante la opinión de la Iglesia. En
este terreno emplea prudencia y cautela, en estratégicaposición para continuar rompiendo
lanzas en favor de la modernidad.” (Blanco Aguinaga, et. a.: Historia social de la literatura
española)
11. Teatro crítico universal, o Discursos varios en todo género de materias para desengaño de
errores comunes (1726 y 1740), en ocho volúmenes.
Trata temas de distintas ciencias y actividades humanas y, por su propósito de discurrir
acerca de las falsas creencias y las supersticiones, entre otros errores difundidos en el
pueblo, ha sido llamado el desengañador de las Españas.
En estaobra, Feijoo emplea eltérmino teatro en susentido etimológico griego de escenario,
incluso en el de mirar, de mirada crítica a todo tipo de materias y temas. El subtítulo
(Discursos varios en todo género de materias para desengaño de errores comunes)
manifiesta el objetivo del autor: combatir los errores, fruto de la ignorancia.
Cartas eruditas y curiosas en que, por la mayor parte, se continúa el designio del Teatro
crítico universal (1742-1760)
Estos ciento sesenta y cuatro escritos reunidos en cinco volúmenes persiguen el mismo
objetivo que el Teatro crítico universal.
Ilustración apologética al primero y segundo tomo del Teatro crítico (1729).
Justa repulsa de inicuas acusaciones (1749)
José Cadalso y Vázquez (1741-1782)
VIDA
12. Nació en Cádiz en 1741 en el seno de una familia de buena posición social. Quedó huérfano
de madre a los dos años. Su niñez transcurrió bajo la tutela de su abuelo y de su tío José
Vázquez, jesuita que llegó a ser Rector del colegio que la Compañía de Jesús.
Estudió con los jesuitas de Cádiz y después en París e Inglaterra. Viajó por toda Europa
acompañando a su padre en sus viajes de negocios y contagiándose del espíritu de la
Ilustración del momento. La estancia en el extranjero le dio la oportunidad de aprender
lenguas modernas (dominaba el inglés yel francés) y de conocer formas de vida y de cultura
diferentes a las españolas.Fue adquiriendo asíuna visión cosmopolita de lavida muy propia
de los ilustrados.
Fue cadete en el regimiento de caballería de Borbón y llegó al grado de coronel. En 1768
fue desterrado a Zaragoza por sus críticas a la sociedad madrileña, especialmente a las altas
jerarquías de la corte y sus amoríos. Volvió a Madrid en 1770, donde seenamoró de laactriz
María Ignacia Ibáñez (la “Filis” de sus versos), quien murió al poco tiempo de tifus a los
veinticinco años.
Amigo de Nicolás Fernández de Moratín y de Tomás de Iriarte, era uno de los asistentes a
la tertulia literaria de la fonda de San Sebastián. Se interesó por la reforma del teatro,
abogando por la adopción de la estética neoclásica. Destinado a Salamanca, entabló allí
relación con los poetas del grupo salmantino, sobre todo con Meléndez Valdés.
Destinado a la marina por su propia voluntad, fue designado ayudante de campo del jefe
de las fuerzas españolas que sitiaban Gibraltar. En este bloqueo fue alcanzado por una
granada inglesa y murió a las pocas horas. Contaba a la sazón cuarenta años y acababa de
ser ascendido al grado de Coronel.
Cadalso debió de ser un hombre de trato afable y cordial. Su vasta cultura europea, su
inteligencia,sunoble espíritu y su temperamento finamente irónico le granjearon el aprecio
de cuantos le conocieron. Todo esto hace del gran ensayista una de las figuras más
sugestivas y simpáticas del siglo XVIII español.
OBRAS
13. La importancia de Cadalso en el siglo XVIII es considerable como promotor de inquietudes
literarias (primera escuela salmantina) y como escritor.
Cadalsoes un escritor ilustrado español, también considerado introductor del romanticismo
en España. Fue más inspirador sugerente que un talento original. Sus Noches lúgubres son
ya prerrománticas como imitación del Werther de Goethe. Su obra cumbre son las Cartas
marruecas, crítica social del tiempo bastante pesimista, imitación de las Cartas persas
(1721) de Charles-Louis de Montesquieu (1689-1755).
Basándose especialmente en sus Noches lúgubres, muchos críticos lo consideran precursor
del romanticismo español. Pero lo fundamental de su producción tiene una tonalidad
neoclásica. Actualmente se le ve como el autor de las Cartas marruecas. Sus ideas
progresistas provocaron problemas con lacensura. Cadalsofue muy admirado en su tiempo
como poeta. Pero se ha valorado más a Cadalso como prosista, considerándose sus obras
superiores a sus poemas o a sus piezas dramáticas.
En el pensamiento de Cadalso se observa un escepticismo pesimista heredado del siglo XVII
(“todas las cosas son buenas por un lado y malas por otro... el hombre es mísero desde la
cuna al sepulcro”), junto a una gran confianza en el hombre y en el progreso.
“Si Cadalso volvía los ojos con nostalgia hacia las viejas virtudes españolas, veía también en
lacultura de los países europeos contemporáneos un modelo digno de ser tenido en cuenta.
Este sentido europeísta, unido a la patriótica preocupación por España y a la crítica de
ciertos valores históricos, hacen del autor de las Cartas Marruecas un notable precedente
de la generación del 98.” (J. García López)
Kalendario manual y Guía de forasteros en Chipre (1768)
En esta obra critica la alta sociedad madrileña y la corte. Sátiras.
En esta obra Cadalso parodia el calendario oficial que se publicaba en Madrid, criticando la
alta sociedad y la corte de Madrid. Esta obra fue la que provocó el destierro del escritor.
14. Solaya o los circasianos (1970)
Tragedia que no se llegó a estrenar al no pasar la censura. Dramatiza un enfrentamiento
entre el sentimiento amoroso y las convenciones sociales, con un desenlace cruel. La
tragedia se sitúa en un escenario exótico.
Argumento: Circasia, región de la Rusia meridional, y se atiene a las reglas neoclásicas para
la tragedia. El príncipe tártaro Selín, que ha llegado a Circasia para cobrar un tributo de
doncellas, se enamora de Solaya, perteneciente a una de las familias principales.
Don Sancho García, conde de Castilla (1771 – estrenada en 1781)
Cadalso comenzó su carrera literaria estrenando esta tragedia neoclásica de asunto épico
medieval, que fue publicada en Madrid bajo el seudónimo de Juan del Valle. Responde
formalmente al tipo de tragedia neoclásica, en cinco actos, sometida a las tres unidades y
en endecasílabos pareados. Ambientada en la época medieval, presenta un antiguo tema
legendario.
Argumento: Por complacer a su amante Almanzor, rey moro de Córdoba, la condesa viuda
de Castilla, doña Ava, papel que representó María Ignacia, intenta envenenar a su hijo
Sancho García; pero al final es la condesa quien bebe el veneno preparado para su hijo.
La obra fue interpretada por su amada María Ignacia y tuvo que ser retirada a las cinco
representaciones al no tener éxito. Falta de rigor y de vida, es lo más endeble de su obra,
tanto desde el punto de vista argumental como estilístico.
Los eruditos a la violeta (1772)
El título alude a uno de los perfumes, el de la violeta, preferidos por los jóvenes a la moda.
Este divertido opúsculo lleva el subtítulo: «Curso completo de todas las ciencias, dividido
en siete lecciones, para los siete días de la semana, publicado en obsequio de los que
pretenden saber mucho estudiando poco».
15. Es una sátira escrita en prosa y publicada bajo el seudónimo de José Vázquez y escrita con
propósito satírico contra un tipo de educación entonces frecuente: la erudición meramente
superficial.
Son textos mordaces en los que ridiculizaba el falso barniz cultural que tenían muchos de
los petimetres que poblaban los salones del Madrid de la época, así como los manuales de
cienciauniversal. El narrador es un catedrático que enseña las nociones indispensables para
poder lucirse en sociedad sin saber mucho. En esta obra, Cadalso se burla de la erudición
superficial,tan propia de una época en la que el afánde cultura había degenerado en simple
moda entre las clases elevadas.
Ocios de mi juventud (1773)
Un poemario con regusto entre rococó y romántico, escrito durante su destierro aragonés.
Una colección de cincuenta y cuatro poemas. Son poesías que pertenecen a los distintos
géneros típicos del momento: anacreónticas, pastoriles, amatorias, filosóficas y satíricas.
Los modelos abarcan desde Anacreonte y Ovidio hasta Tasso y Garcilaso.
Con esta obra, Cadalso hizo revivir la anacreóntica, enterrada con Villegas siglo y medio
antes, uno de los géneros más cultivados en el siglo XVIII, sobre todo por Meléndez Valdés
y los poetas de la escuela de Salamanca. Gran parte de las letrillas y anacreónticas de esta
obra las dedicó a su amada “Filis” (María Ignacia), cuya muerte le inspiró también algunos
lúgubres versos de carácter prerromántico.
Cartas marruecas (1789)
Es su obra más ambiciosa y un compendio de sus ideas. Está inspirada en Montesquieu.
Constituyen una censura de la decadencia y corrupción de la patria. Tomando como
pretexto un viaje por España del árabe Gazel, hace una crítica de las costumbres y defectos
nacionales, pero la obra está inspirada en un patriótico propósito de reforma en el sentido
reformador del despotismo ilustrado. Educado en las ideas de la Ilustración, Cadalso verá
en el cultivo de la ciencia y de la virtud el recurso más eficaz para hacer salir al país del
marasmo en que se encuentra. Hay que aceptar el trabajo, la cultura y las virtudes sociales,
16. aceptando el ejemplo de otras naciones más progresivas. Hay que evitar “un patriotismo
mal entendido que en lugar de ser virtud viene a ser un defecto ridículo y muchas veces
perjudicial a la misma patria”.
En este ensayo de interpretación de la realidad española, Cadalso finge una
correspondencia entre dos amigos marroquíes, uno se encuentra en España y el otro en
Marruecos, al que cuenta lo que ve en España, por supuesto desde el relativismo de la
diferencia de culturas. Cadalso aprovecha para dar su visión crítica sobre el carácter
español, la política del momento y la historia de España, todo con notable gracia e ironía:
Estas cartas tratan del carácter nacional, cual lo es en el día y cual lo ha sido.
Esta obra pertenece al género de literatura epistolar, muy de moda en la Europa del siglo
XVIII, junto con la tradición de los libros de viajes. El modelo lo proporcionó Montesquieu,
con sus Cartas Persas (1721). Cadalso consideraba esta obra una novela epistolar. Otros
críticos ven en ellala continuación de la prosa satírico-didáctica de un Cervantes o Quevedo.
Son noventa cartas escritas por un marroquí, su antiguo maestro y su amigo español. El
estilo de cada uno de estos personajes y sus opiniones los caracteriza. Estas cartas dan una
visión crítica de la realidad española de su tiempo: historia de España, costumbres,
educación, el lujo, la fama póstuma, la ambición de los políticos, la corrupción de la
administración, el atraso de las ciencias, la inutilidad de la clase noble.
A fines del XIX. Las Cartas marruecas adquirieron nueva vigencia cuando se agudizaron las
polémicas sobre España y su regeneración. Han atraído la atención de numerosos
investigadores.
Noches lúgubres (1789-1790, recopiladas en 1792 y 1798)
Elegía en prosa. Pequeña obra póstuma de inspiración prerromántica, ligada al luctuoso
episodio de lamuerte de laactriz María IgnaciaIbáñez, con laque tuvo amores apasionados
y la que parece ser murió en sus brazos. Se cuenta cuando su amada María Ignacia fue
sepultada en la iglesia de San Sebastián, Cadalso no salía de este templo, y dio en la manía
de querer desenterrar a su adorada para llevársela. Para librarlo de tal locura lo desterró el
conde de Aranda a Salamanca.
17. La obra se halla dividida en varias “noches”, en las que se desarrolla, en forma dialogada, el
episodio que se le atribuía al propio autor: Tediato intenta, con ayuda del sepulturero
Lorenzo, desterrar a su amada, pero la intervención del Juez le impide conseguir su
propósito.
El tema central de Noches lúgubres es la noche y todo lo que sugiere en su aspecto lúgubre:
féretros, cementerios, desesperanza y melancolía. El tono tétrico y pesimista del diálogo de
Tediato y el sepulturero, eco en cierto modo de la filosofía moral del siglo XVIII español,
hacen de la obra un curioso precedente del Romanticismo español.
En esta obra Cadalso hace gala de una nueva sensibilidad que se empezaba a manifestar en
la Europa prerromántica: el gusto por exhibir los sentimientos personales de dolor,
melancolía o angustia. La obra pertenece al género sepulcral, de moda en Europa a
mediados del siglo XVIII y caracterizado por el interés por lo macabro, la necrofilia, lo
cadavérico, la escenografía de tormentas, luces y sombras. Cadalso escribió esta obra a
imitación de las Night Thoughts (1742-1745) del poeta inglés Edward Young (1683-1765),
traducidas al español como Las Noches, Pensamientos nocturnos. Las Noches lúgubres fue
una obra muy popular entre los románticos españoles aquienes atraían los temas macabros
y nocturnos.
“Se han recalcado las fuentes extranjeras y los puntos de intersección con Young, Pope,
Gray, Thomson, James Hervey y Sebastien Mercier, entre otros, a la par que las fuentes
clásicas. En realidad, pese a que se la ha interpretado como obra autobiográfica, se inspira
en un romance popular y en el tema de la difunda pleiteada. El tono lastimero y el paisaje
espiritual subjetivo marcan el tránsito del sentimentalismo neoclásico al primer
romanticismo, pero la obra dista mucho de ser plenamente romántica. [...] Estas
lamentaciones subjetivas le sirven a Cadalso de punto de apoyo para levantarse contra los
vicios de la sociedad de su tiempo y reclamar justicia. Nadie se conduele, porque en la
sociedad sólo impera el afán de lucro: el salario será el único medio para conseguir ayuda.
El dinero corrompe, porque invierte el orden de la naturaleza, engendra pasiones y
multiplica delitos.” (Blanco Aguinaga, et. a.: Historia social de la literatura española)
Epístola dedicada a Hortelio o Poesías inéditas (1792)
18. Gaspar Melchor de Jovellanos (1744-1811)
VIDA
Gaspar Melchor de Jovellanos (1744-1811), bautizado como BaltasarMelchor Gaspar María
de Jove Llanos y Ramírez, nació en Gijón (Asturias), hijo de una familia hidalga de larga
ascendencia. Su niñez se desarrolló en un ambiente de inquietud intelectual.
En 1757 comenzó sus estudios de filosofía en la universidad de Oviedo, donde conoció al
Padre Feijoo, que contaba entonces ochenta y cuatro años. Estudió derecho civil y canónico
en las de Ávila y Alcalá, donde entró en contacto con el espíritu de la Ilustración y del
reformismo ilustrado.
Comenzó los estudios eclesiásticosen el seminario y la universidad de Ávila, donde se formó
su espíritu de humanista con la lectura de los clásicos y el aprendizaje del latín. Iba para
sacerdote, pero cambió su vocación por la de jurista.
En 1767 fue nombrado por Carlos III alcalde del crimen de la Audiencia de Sevilla.
En 1778 fue nombrado alcaldede casaycorte en Madrid, y dos años después fue designado
miembro del Consejo de Órdenes Militares. Más tarde ingresó en la Junta de Comercio y
Moneda y en la Sociedad Económica Matritense, para las que realizó sus famosos
Informes...
El temor a la extensión de las ideas de la Revolución Francesa, tras la muerte de Carlos III,
creó en España un ambiente hostil. En 1790 Jovellanos fue enviado a Asturias en un
destierro encubierto. En 1797 fue rehabilitado por Manuel Godoy y nombrado ministro de
Gracia y Justicia. En 1801 volvió a ser desterrado al castillo de Bellver en Mallorca a causa
de sus ataques al favorito y a la Inquisición.
19. Rompió, por patriotismo, con todos sus amigos afrancesados,entre ellos Cabarrús y Leando
Fernández de Moratín.
Fue liberado en vísperas del alzamiento del 2 de mayo de 1808 y formó parte de la Junta
Central del Reino, que dirigió la heroica resistencia española contra Napoleón.
Huyendo de los franceses,que habían ocupado Gijón, serefugió en Puerto de Vegade Navia
(Asturias) donde murió de pulmonía.
OBRAS
Jovellanos cultivó varios géneros literarios (como poesía y teatro) pero sus escritos
principales fueron ensayos de economía, política, agricultura, filosofía, costumbres; desde
el espíritu reformador del Despotismo ilustrado. No se consideraba poeta; se veía como
hombre de Estado y jurisconsulto. La poesía era para él puro pasatiempo; pero a los que se
confesaban poetas les exigía orientación social y pedagógica (ver A sus amigos de
Salamanca).
Jovellanos impulsó todo tipo de reformas en el ámbito nacional, siendo un ilustrado clave
de la época. Fue, como Cadalso, un atento observador de la España de su tiempo, pero en
vez de limitarse como éste a comentar irónica o gravemente los motivos de la decadencia
y a apuntar remedios en forma teórica e imprecisa, dedicó toda su vida a estudiar y resolver
en la práctica los problemas del momento. A este fin escribió multitud de informes sobre
cuestiones económicas, pedagógicas,políticas,etc., que le convierten en elmayor polígrafo
del siglo XVIII. Todos sus proyectos se inspiran en las ideas fundamentales de la Ilustración:
el progreso material y espiritual del pueblo, el humanitarismo filantrópico; pero su
admiración por la cultura europea no está reñida con un gran amor a España. Europeísmo,
sí, pero respeto a las tradiciones españolas cuando éstas encarnan algún alto valor del
espíritu. Jovellanos abominó siempre de los afrancesados.