La matriz ambiental clasifica los suelos según sus características permanentes como el relieve, impedimentos físicos, materia orgánica y pH para hablar un mismo idioma en la zona y comparar manejos de cultivos. La matriz considera factores permanentes como el relieve, textura y contenido de materia orgánica y factores modificables como el nivel freático, cobertura y humedad del perfil para uniformar tecnologías aplicadas según el potencial de cada ambiente.