La hemofilia es un trastorno hereditario de la coagulación causado por una mutación genética que provoca ausencia o disminución de uno de los factores de la coagulación. Se transmite de madres portadoras a hijos y es la coagulopatía congénita más común que afecta a uno de cada 10,000 varones. El tratamiento consiste en reemplazar el factor de coagulación deficiente mediante la administración de concentrados del factor faltante.