1. CASO CLINICO: GLOMERULONEFRITIS POST INFECCIOSA
Acude a emergencia un niño de 13 años natural de Lima y procedente de San Juan de
Miraflores, con historia de edemas palpebral bilateral matutino, asociado a edemas de
miembros inferiores bilateral, también matutino, que disminuye durante la tarde. Asociado a
esto, nota orina turbia. Es llevado inicialmente a un centro de salud donde le dicen que tiene la
presión alta y sangre en la orina por lo que es traído a emergencia del hospital María
Auxiliadora.
Durante la evaluación inicial se encuentra a un paciente con fascie abotagada, una Presión
arterial de 135/90 mmhg. Se evidencia edemas palpebrales, en miembros inferiores y se
encuentran lesiones costrosas a nivel de antebrazo izquierdo. Al indagar sobre éstas lesiones,
la madre refiere que las tiene desde hace 3 semanas y que actualmente están sanando, ya que
hace 3 semanas estaban más grandes, mas “rojas”, dolían y tenían secreción melífera y que
habían remitido con el uso de Amoxicilina que había sido prescrito por el médico de la posta
de su barrio.
Usted le solicita exámenes auxiliares y le encuentra una creatinina de 0,8 mg/dl. Un examen de
orina con albúmina de ++ y hematíes de 20 – 30 por campo. Proteinuria de 24 horas de 1,2
gr/24 horas. Hemoglobina de 11,2 mg/dl y Tiene una ecografía renal reportada como de
tamaño y forma normal.
Por la presencia de síndrome nefrítico y el antecedente de lesiones sugestivas de infección
dérmica por estreptococo, usted plantea la posibilidad de una Glomerulonefritis post
infecciosa y procede a solicitar complemento 3, cuyo resultado reporta un valor de 30 mg/dl.
Un colega le increpa por éste examen y le sugiere solicitar una prueba de ASO, usted le replica
que la prueba de ASO solo le dirá si hay una infección por estreptococo y no si tiene una
glomerulonefritis post infecciosa por éste germen y aunque el diagnóstico definitivo es una
biopsia renal, la clínica sugestiva en una paciente de esa edad y el consumo de complemento
son suficientes de momento para plantear éste diagnóstico.
Para el manejo del mismo solo sugiere medidas generales como restricción hídrica y de sodio
así como uso de diuréticos de ASA para el manejo de edemas e hipertensión arterial, reposo
relativo y ya que la infección por estreptococo aparentemente está controlada no recomienda
antibióticos adicionales.
La madre le pregunta en cuanto tiempo estará bien su hijo y usted le explica que la patología
es generalmente benigna, con recuperación total en casi todos los casos, pero que los signos
pueden demorarán en desaparecer. Por ejemplo, el complemento puede desaparecer hasta
las 8 semanas, la proteinuria y la hematuria hasta los 6 meses. El seguimiento es muy
importante ya que si éstos signos no desaparecen en ese tiempo existe la posibilidad que otra
glomerulonefritis sea planteada, específicamente la Glomerulonefritis membranoproliferativa.