Este documento presenta una introducción al libro de los Salmos de la Biblia. Explica que los Salmos fueron escritos por varios autores a lo largo de mil años y contienen diferentes géneros como lamentos, alabanzas y himnos. También resume brevemente algunos de los Salmos más conocidos como el Salmo 23, el Salmo 51 de arrepentimiento de David, y el Salmo 91 que habla de la protección de Dios.
Disciplinas espirituales en el Ministerio de Alabanza.pptx
P19 Estudio Panorámico de la Biblia: Salmos
1. S
A
L
M
O
S
ESTUDIO PANORÁMICO DE LA BIBLIA
Un estudio de los 39 libros del
Antiguo Testamento y 27 libros del
Nuevo Testamento en 66 semanas
S A L M O S
2. LOS LIBROS DE LA BIBLIA
Génesis
Éxodo
Levítico
Números
Deuteronomio
Josué
Jueces
Rut
1 Samuel
2 Samuel
1 Reyes
2 Reyes
1 Crónicas
Esdras
2 Crónicas
Nehemías
Ester
Job
Salmos
3. 2. Los Libros Históricos: 12 libros
3. Los Poéticos: 5 libros
EL A.T. SE DIVIDE EN:
1. El Pentateuco: 5 libros
4. Los Profetas Mayores: 5 libros
5. Los Profetas Menores: 12 libros
4. 1. Job
LOS LIBROS POÉTICOS
2. Salmos
3. Proverbios
4. Eclesiastés
5. Cantar de los Cantares
5. NOMBRE DEL LIBRO
Hebreo: Tehilim – que significa:
“Himnos o Alabanzas”
Versión LXX: Psalmoi – que significa:
“Oda o Canción”
Del idioma griego deriva el nombre
Salmos que usamos hoy en castellano.
“Hablen entre ustedes con salmos, him-
nos y cánticos espirituales; canten y ala-
ben al Señor con el corazón” (Ef 5:19).
6. AUTOR: Varios. Se mencionan por nombre
a nueve autores distintos. También hay
salmos que son anónimos.
ESTILO: Poesía Lírica Hebrea. Conformada
por 3 estructuras distintas: Acróstico,
Quiásmico o por Estrofas.
FECHA: Los salmos fueron escritos duran-
te un periodo de mil años, desde Moisés
hasta Esdras (1400 - 400 a.C.). Fueron
escritos durante el mismo periodo de tiem-
po que tomó escribir todo el AT.
EL LIBRO DE LOS SALMOS
7. Nos podemos identificar fácilmente con los
salmos pues expresan sentimientos y emo-
ciones que todos experimentamos.
Los salmos se organizan de distintas maneras
EL LIBRO DE LOS SALMOS
PROPÓSITO: Mostrarnos los cánticos, poe-
mas y oraciones de una comunidad que a-
dora. Comparten sus experiencias, senti-
mientos, luchas, esperanzas, triunfos, du-
das, fracasos, gratitud, arrepentimiento, el
clamor por la injusticia, calamidades y las
miserias que los afectan.
8. De acuerdo a su género:
EL LIBRO DE LOS SALMOS
Alabanza
Confianza
Himnos
Acción de Gracias Sabiduría
Lamentos
Reales
9. De acuerdo a su autor:
EL LIBRO DE LOS SALMOS
Asaf
Salomón
Zacarías
Anónimo
Hemán
Coré
David
Etán
Moisés
Hageo
10. De acuerdo a su estructura poética:
EL LIBRO DE LOS SALMOS
Acróstico
Quiásmico
por Estrofas
11. De acuerdo al libro:
EL LIBRO DE LOS SALMOS
Libro I
Libro II
Libro IIILibro IV
Libro V
12. GÉNERO:
Lamento 59
Alabanza 41
Himnos 17
Reales 10
Sabiduría 9
A. Gracias 9
Confianza 6
AUTORES:
David 86
Anónimo 51
Asaf 12
H. Coré 12
Hageo 3
Zacarías 3
Salomón 2
Moisés 1
Hemán 1
Etán 1
EL LIBRO DE LOS SALMOS
LIBRO:
Libro I 41
Libro II 31
Libro III 17
Libro IV 17
Libro V 44
ESTRUCTURA:
Por Estrofas 96
Quiásmico 49
Acróstico 9
13. El salmo 118 es el capítulo central de toda
la Biblia.
El Salmo 117, anterior al 118, es el capítulo
mas corto de la Biblia, tiene 2 versículos.
EL LIBRO DE LOS SALMOS
Curiosidades del Libro de los Salmos
El Salmo 119, posterior al 118, es el capítu-
lo mas largo de la Biblia, tiene 176 vers.
El versículo central de toda la Biblia es el
118:8, “Mejor es esperar en el Señor que
esperar en el hombre”.
14. Jesús dividía al AT en tres secciones: la
Ley, los Profetas, y los Salmos.
“Luego les dijo: Lo que ha pasado conmigo
es lo mismo que les anuncié cuando aún
estaba con ustedes: que era necesario que
se cumpliera todo lo que está escrito acer-
ca de mí (1) en la ley de Moisés, (2) en los
profetas y (3) en los salmos” (Lc 24:44).
EL LIBRO DE LOS SALMOS
Más de la cuarta parte de los textos del AT
citados en el NT provienen de los salmos.
16. Si dedicara 30 según-
dos a cada salmo nos
tomaría 75 minutos.
Obviamente no hay
manera de poder estu-
diar cada uno de los
150 salmos en una so-
la enseñanza.
ANTECEDENTES
Echaremos un vistazo sólo a los salmos
más representativos y más amados por los
creyentes a lo largo de la historia.
17. “Bienaventurado el varón que
no anduvo en consejo de
malos…” (v.1).
Salmo 1: Deléitate en la Pala-
bra. Bienaventurados los que
obtiene entendimiento para la
vida de la Palabra de Dios.
(1- 41) EL PRIMER LIBRO
Salmo 2: Es el primero de los salmos mesiá-
nicos. Habla del reinado universal de Jesús.
Salmo 18: Es un salmo de acción de gracias,
David agradece a Dios por librarlo.
18. Salmo 19: La maravilla y la gloria de la crea-
ción, y el poder de la Palabra de Dios.
“Te amo, oh Jehová, fortaleza
mía. Jehová, roca mía y castillo
mío, y mi libertador; Dios mío,
fortaleza mía, en él confiaré; mi
escudo, y la fuerza de mi salva-
ción, mi alto refugio” (18:1-2).
“Los cielos cuentan la gloria de Dios, y el
firmamento anuncia la obra de sus manos”
(19:1).
(1- 41) EL PRIMER LIBRO
19. “Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has
desamparado?” (v.1a)
Salmo 22: Escrito mil años
antes de Jesús, se le co-
noce como el salmo de la
crucifixión.
“Todos los que me ven me escarnecen; es-
tiran la boca, menean la cabeza, diciendo:
Se encomendó a Jehová; líbrele él; sálvele,
puesto que en él se complacía”.
(1- 41) EL PRIMER LIBRO
(v.7-8)
20. “Repartieron entre sí mis vesti-
dos, y sobre mi ropa echaron
suertes” (v.18)
“Horadaron mis manos y mis
pies” (v.16b)
Salmo 23: Es uno de los capítulos más que-
ridos de la literatura universal. David lo com-
puso cuando era un joven pastor de ovejas.
(1- 41) EL PRIMER LIBRO
“El Señor es mi pastor; nada me faltará. En
lugares de delicados pastos me hará
descansar” (v.1-2)
21. Es estos mismos campos de Be-
lén donde David escribió este
salmo, mil años después, un coro da ángeles
anunciaría el nacimiento del Salvador.
“Aunque ande en valle de som-
bra de muerte, no temeré mal
alguno, porque tú estarás con-
migo” (v.4a)
Salmo 25: Es una oración pidiendo dirección,
perdón y protección de Dios.
(1- 41) EL PRIMER LIBRO
“Dios mío en ti confío, no sea yo
avergonzado” (v.2a)
22. “En tu mano encomiendo mi espíritu” (v.5a)
Salmo 31: Es una declaración
de confianza. Aunque David
estuvo en constante peligro
siempre confió en Dios.
Salmo 34: Habla de la protección de Dios.
(1- 41) EL PRIMER LIBRO
“Bendeciré al Señor en todo tiempo; su
alabanza estará siempre en mi boca” (v.1)
“Este pobre clamó, y el Señor lo oyó y lo
libró de todas sus angustias” (v.6)
23. “Ustedes, sus fieles, teman al Señor, pues a
quienes le temen nunca les falta nada” (34:9)
“El ángel del Señor acampa
alrededor de los que le temen
y los defiende. Gustad, y ved
que es bueno el Señor; dicho-
so el hombre que confía en él”
Salmo 37: David habla de cómo vivimos en
medio de una sociedad corrupta y mala.
(1- 41) EL PRIMER LIBRO
“Confía en el Señor, y haz el bien... Deléitate
asimismo en el Señor, y él te concederá las
peticiones de tu corazón” (v.3a, 4).
(34:7-8).
24. Salmo 42: Describe el de-
seo del salmista de adorar
al Señor.
“Encomienda al Señor tu
camino, y confía en él; y él
hará” (37:5).
“Como el ciervo brama por las corrientes de
las aguas, así clama por ti, oh Dios, el alma
mía. Mi alma tiene sed de Dios, del Dios
vivo; ¿Cuándo vendré, y me presentaré
delante de Dios?” (v.1-2).
(42- 72) EL SEGUNDO LIBRO
25. Salmo 46: Este es un salmo de seguridad.
“¿Por qué te abates, oh alma mía,
y te turbas dentro de mí. Espera en
Dios; porque aún he de alabarle,
Salvación mía y Dios mío” (42:5)
“Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro
pronto auxilio en las tribulaciones. Por tanto,
no temeremos, aunque la tierra sea removi-
da” (v.7-8)
(42- 72) EL SEGUNDO LIBRO
“Estén quietos, y conozcan que yo
soy Dios; seré exaltado entre las naciones y
enaltecido en la tierra” (v.10)
26. “Ten piedad de mí, oh Dios, con-
forme a tu misericordia; conforme
a la multitud de tus piedades bo-
rra mis rebeliones. Lávame más y más de
mi maldad, y límpiame de mi pecado” (v.1-2)
Salmo 51: Escrito después que
David pecó con Betsabé y fue ex-
hortado por el profeta Natán.
(42- 72) EL SEGUNDO LIBRO
“Contra ti, contra ti solo he pecado, y he he-
cho lo malo delante de tus ojos” (v.4a)
“Purifícame... lávame, y seré más blanco
que la nieve” (v.7)
27. Salmo 61: Es un himno de confianza en Dios.
“Crea en mí, oh Dios, un corazón
limpio, y renueva un espíritu recto
dentro de mí. No me eches de
delante de ti, y no quites de mí tu
santo Espíritu” (51:10-11)
“Oye, oh Dios, mi clamor; a mi oración atien-
de. Desde el cabo de la tierra clamaré a ti,
cuando mi corazón desmayare. Llévame a
la roca que es más alta que yo, porque tú
has sido mi refugio, y torre fuerte delante del
enemigo” (v.1-3)
(42- 72) EL SEGUNDO LIBRO
28. “Dios, Dios mío eres tú; de ma-
drugada te buscaré; mi alma
tiene sed de ti, mi carne te anhela, en tierra
seca y árida donde no hay aguas” (v.1).
Salmo 63: En Dios encontra-
mos la satisfacción del alma.
(42- 72) EL SEGUNDO LIBRO
“Tu misericordia es mejor que la vida; por
eso mis labios te alaban. ¡Yo te bendeciré
mientras tenga vida, y en tu nombre levanta-
ré mis manos!” (v.3-4, RVC).
“Mi alma está apegada a ti; tu mano dere-
cha me brinda apoyo” (v.8, RVC).
29. “En cuanto a mí, casi se des-
lizaron mis pies; poco faltó para que mis
pasos resbalaran. Y es que tuve envidia de
los arrogantes, al ver cómo prosperaban
esos malvados” (v.2-3).
Salmo 73: Habla del tema de
la prosperidad de los malva-
dos. Consideren su final.
(73- 89) EL TERCER LIBRO
“Bien puede verse que estos impíos se ha-
cen ricos sin que nada les preocupe. ¡Ah!,
pero de nada me ha servido mantener mi
corazón y mis manos sin pecado” (v.12-13).
30. “¿A quién tengo en los cielos? ¡Sólo a ti! ¡Sin
ti, no quiero nada aquí en la tierra! Aunque
mi cuerpo y mi corazón desfallecen, tú, Dios
mío, eres la roca de mi corazón, ¡eres la he-
rencia que… me ha tocado!” (73:25-26).
“Sólo cuando entré en el san-
tuario de Dios, pude compren-
der en lo que ellos van a termi-
nar” (73:17).
(73- 89) EL TERCER LIBRO
“En cuanto a mí, ¡qué bueno es estar cerca
de ti! ¡En ti, Señor, he puesto mi esperanza
para proclamar todas tus obras!” (73:28).
31. “Tú, Señor, eres bondadoso y
sabes perdonar; ¡grande es tu
misericordia para los que te invocan! Señor,
escucha mi oración y atiende a la voz de mis
súplicas. Cuando me encuentro angustiado,
te llamo porque tú me respondes” (v.25-26).
Salmo 86: Una oración pidien-
do la misericordia de Dios.
(73- 89) EL TERCER LIBRO
“Enséñame, Señor, tu camino, para que an-
de en tu verdad. Dale firmeza a mi corazón,
para temer tu nombre. Dios mío, te alabaré
con todo el corazón” (v.11-12).
32. “El que habita al abrigo del Altísimo morará
bajo la sombra del Omnipotente. Diré yo a
Jehová: Esperanza mía, y castillo mío; mi
Dios, en quien confiaré. Él te librará del lazo
del cazador, de la peste destructora. Con
sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas
estarás seguro” (v.1-4).
Salmo 91: Es uno de los sal-
mos más queridos de todos los
tiempos: ¡Seguros en Dios!
(90-106) EL CUARTO LIBRO
“No te sobrevendrá mal, ni plaga tocará tu
morada” (v.10).
33. “Cantad alegres a Dios, habitantes de toda
la tierra. Servid a Jehová con alegría; venid
ante su presencia con regocijo. Reconoced
que Jehová es Dios; Él nos hizo, y no noso-
tros a nosotros mismos; pueblo suyo somos,
y ovejas de su prado” (v.1-4).
Salmo 100: Alaben a Dios,
su amor y fidelidad perma-
nece para siempre.
(90-106) EL CUARTO LIBRO
Salmo 103: Uno de los salmos más ama-
dos, nos habla de la misericordia de Dios.
34. Él es quien perdona todas tus
iniquidades, el que sana todas tus dolencias
el que rescata del hoyo tu vida, el que te co-
rona de favores y misericordias (103:1-4).
“Bendice, alma mía, a Jeho-
vá, y bendiga todo mi ser su
santo nombre… y no olvides
ninguno de sus beneficios.
(90-106) EL CUARTO LIBRO
“Misericordioso y clemente es Jehová;
lento para la ira, y grande en miseri-
cordia” (v.8).
35. El salmo 115, está dirigido en contra de la a-
doración de imágenes o idolatría.
Salmo 113-118: son llamados
los “Salmos Hallel” eran ala-
banzas que se cantaban en
familia durante las fiestas.
(107-150) EL QUINTO LIBRO
Salmo 119: es un salmo acróstico compues-
to de 22 estrofas de 8 versículos cada una.
“¿Con qué limpiará el joven su camino?
Con guardar tu palabra” (119:9).
“Lámpara es a mis pies tu palabra, y
lumbrera a mi camino” (119:105).
36. Destacan el 121 y 126.
Salmo 120-134: son los
llamados salmos ascen-
dentes o de los peregri-
nos, que cantaban al su-
bir hacia Jerusalén.
(107-150) EL QUINTO LIBRO
“Alzaré mis ojos a los montes ¿De dónde
vendrá mi socorro?” (121:1).
“Los que sembraron con lágrimas, con regocijo
segarán. Irá andando y llorando el que lleva la
preciosa semilla; mas volverá a venir con rego-
cijo, trayendo sus gavillas” (126:5-6).
37. Salmo 137: es un salmo
imprecatorio o de vengan-
za de los judiós en el exi-
lio babilónico.
(107-150) EL QUINTO LIBRO
“Junto a los ríos de Babilo-
nia, allí nos sentábamos, y
aun llorábamos, acordándo-
nos de Sion. Sobre los sau-
ces en medio de ella colga-
mos nuestras arpas. Y los
que nos habían llevado cau-
tivos nos pedían que cantá-
semos” (v.1-3a).
38. Salmos 144 -150: son salmos de alabanza,
llamados también “salmos aleluyas”. El libro
termina con un gozoso incremento de ala-
banzas y aleluyas al Señor.
Salmo 139: nos habla de
la omnisciencia y omnipre-
sencia de Dios, y de como
Dios nos formaba desde
que estábamos en el vien-
tre de nuestras madres.
(107-150) EL QUINTO LIBRO
“¡Que todo lo que respira alabe al Señor!
¡Aleluya! (Sal 150:6).
39. Demasiadas veces leemos los salmos,
pero nunca los ponemos en acción.
Los salmos son maravillosas canciones
de alabanzas, anímate a usarlos.
Una cosa es leer sobre la alabanza; y
otra cosa es ofrecérsela personalmente
a Dios.
CONCLUSIÓN
Si los salmos no te mueven a participar
en la alabanza, nada lo hará, así que
aprovéchalos.
40. Existen muchos libros devocionales
excelentes, pero, ¿has considerado que
Dios ya nos ha dado un libro devocional?
Al leer los salmos, hazlo en voz alta.
Úsalos como alabanza personalizada,
como una plataforma de lanzamiento
para tus propias oraciones.
CONCLUSIÓN
Lo incluyó en nuestras Biblias. Todo lo
que necesitamos hacer es tomarlo, leer-
lo, y hacer que nuestros corazones se
vuelvan al Señor en alabanza.