2. definición
Los acúfenos o tinnitus se definen como la
percepción auditiva en ausencia de estímulo
acústico externo debido a un estado de
excitación o inhibición alterado del sistema
auditivo que desencadena una actividad anómala
y espontánea de dicho sistema. Los tinnitus se
diferencian de los acúfenos objetivos o
somatosonidos, que se producen cuando la
sensación sonora es real y, en ocasiones, puede
ser oída por otras personas.
3. Tipos de percepción acústica
anómalos
Alucinaciones auditivas: suelen presentarse en individuos de edad avanzada,
pacientes psiquiátricos o alcohólicos, en forma de voces repetitivas o piezas
musicales; organización del contenido del ruido percibido
Hiperacusias: aumento de la sensibilidad a la intensidad de sonidos que
habitualmente no resultan molestos, habitualmente asociado a una audición normal
Paracusias: alteración de la percepción de volumen, tono, timbre u otras cualidades
del sonido, que suelen atribuirse a alteraciones auditivas periféricas
Diploacusias: alteración de la percepción auditiva, percibiendo un solo estímulo
auditivo dos veces, normalmente causado por alteraciones periféricas de la audición
Distereoacusias: alteración del análisis espacial de los sonidos, asociado a una
dificultad para localizar la dirección del sonido; debido a alteraciones del
procesamiento de la intensidad del sonido, que pueden además estar asociadas a
alteraciones vestibulares.
Acúfenos objetivos o somatosonidos: cuando la sensación sonora puede ser
oída por otras personas, bien sea fisiológico o patológico
4. epidemiología
El acúfeno afecta en algún momento de la
vida al 35% de la población general; sin
embargo, el acúfeno persistente se presenta
en menos del 3% de la población.
Los acúfenos son más frecuentes entre los 45
y los 75 años, sin diferencia por sexos.
5. etiopatogenia
• Las que se originan en el oído externo o medio, que
son las más fáciles de diagnosticar y las que tienen
mayor probabilidad de solución.
• Las que provienen del oído interno y vías auditivas,
que son las más frecuentes y a menudo cronifican.
Entre ellas cabe descartar, como causas evitables, las
drogas y los fármacos ototóxicos.
• Los somatosonidos, producidos por alteraciones
vasculares a nivel cervical o del oído (que pueden
generar un ruido auscultable), por disfunción de la
articulación temporomandibular (chasquido y
crepitación palpable) o mioclonías de la musculatura
periestafilina, masticatoria u osicular (más dificilmente
objetivables).
• Causas raras, algunas de ellas potencialmente
graves.
6. etiopatogenia
Oído externo :• Tapones • Cuerpos extraños •
Otitis externas • Neoplasias • Alteraciones del conducto auditivo externo
Oído medio :• Otitis medias • Alteraciones
vasculares • Alteraciones del tímpano de la musculatura y del oído medio periestafilina
Oído interno :• Presbiacusia • Ototóxicos
• Traumatismo • Laberintitis acústico • Otosclerosis coclear
• Enfermedad de Ménière
Vías auditivas:• Isquemia vías auditivas
• Neurinoma del acústico • Tóxicos y drogas
• Esclerosis múltiple • Traumatismos • Anomalías vasculares
Otras :• Ansiedad y depresión • Disfunción de la
ATM• Hipertensión arterial • Diabetes mellitus •
Arteriosclerosis • Mioclonías masticatorias
• Alteraciones tiroideas • Déficits vitamínicos
7. Diagnóstico-tipología
Anamnesis: Es importante realizar una anamnesis
meticulosa de su forma de presentación para tratar de
orientar su etiopatogenia:
• Acúfenos unilaterales: debemos descartar neurinoma
del acústico o accidente cerebrovascular.
• Acúfenos de tono agudo: suelen asociarse a pérdida
auditiva en frecuencias altas causada por presbiacusia
o traumatismo acústico.
• Acúfenos de tono grave: pueden asociarse a pérdida
auditiva en frecuencias bajas, como la que presentan
los pacientes con patología del oído medio y en la
enfermedad de Ménière.
• Acúfenos pulsátiles: aunque suelen ser banales,
deben descartarse alteraciones vasculares.
8. Diagnóstico: intensidad
Grado I: sólo se percibe en silencio
(habitualmente por la noche).
Grado II: se oye todo el día, pero la actividad
cotidiana atenúa su percepción.
Grado III: se percibe intensamente todo el
día, independientemente de la actividad.
9. Diagnóstico resumen
La historia clínica debería de incluir las
características del acúfeno (unilateralidad, si
es pulsátil, inicio, agravantes), si existe
hipoacusia asociada uni o bilateral,
antecedentes exposición crónica a ruido o
tratamientos ototóxicos, vértigo o
desequilibrio asociados, síntomas de
depresión y/o ansiedad, o trastornos
cognitivos.
El examen físico incluye estudio otológico,
neurológico, cervical y auscultación cardiaca
y carotídea.
10. Diagnóstico .Pruebas complementarias
- Otoscopia: exploración obligada que permite diagnosticar la gran mayoría de causas
originadas en el oído externo y medio.
- Pruebas audiológicas: audiometría, potenciales evocados auditivos del tronco cerebral,
otoemisiones acústicas. Aportan información sobre la sensibilidad auditiva. El estudio conjunto de
las pruebas audiológicas indicará si la lesión es endococlear (oído interno) o retrococlear (vías
auditivas centrales).
- Tomografía computarizada: se utiliza en el diagnóstico de la patología del oído medio e
interno (otosclerosis coclear, fracturas del peñasco, malformaciones congénitas) y tumores
cerebrales y del cavum. No resulta útil en casos de enfermedad de Ménière, ototoxicidad,
esclerosis múltiple y otras patologías degenerativas del sistema nervioso central y enfermedades
autoinmunitarias.
- Resonancia magnética: es una prueba diagnóstica radiológica de primera línea en caso de
acúfenos subjetivos crónicos asociados a hipoacusia neurosensorial, cuando las pruebas clí-
nicas o audiológicas sugieren la presencia de una lesión retrococlear. Básicamente su objetivo es
descartar el neurinoma del acústico y la patología central.
-Acufenometría: prueba audiométrica en la que presentando diferentes sonidos al paciente se
pretende identificar la intensidad y frecuencia del acúfeno. Al conocerlo se puede colocar una
especie de audífono en el oído que genera un ruido para enmascarar el acúfeno (tratamiento de
inhibición acústica).
Ante un acúfeno persistente y sobre todo unilateral en el que la
otoscopia resulta normal, es imprescindible realizar una audiometría aun
en ausencia de hipoacusia subjetiva. Si en ésta se halla una asimetría
neurosensorial, es necesario practicar una resonancia magnética craneal
para excluir patología central.
11. tratamiento
Cuando los acúfenos son consecuencia de una
enfermedad concreta bien definida, debemos
dirigir el tratamiento a su causa subyacente. En
muchas ocasiones, el tratamiento de la
enfermedad de base, si bien no elimina el
acúfeno por completo, suele reducir su
intensidad, paliando las molestias que éste
ocasiona: falta de concentración, interferencia en
la conciliación del sueño y alteración del
descanso nocturno, depresión y ansiedad, etc.
La evitación de la exposición al ruido es la
medida que ha demostrado mayor eficacia en la
prevención del acúfeno (grado rec A).
12. Trat sintomático
(grado de recomendación B)
Psicoterapia terapia cognitivo conductual
Reentrenamiento auditivo acelerar los procesos
de habituación a una señal acústica, eliminando la
reacción que provoca, reduciendo la percepción
de la misma
Enmascaramiento
Acupuntura,,,,
13. Trat farmacológico
Antidepresivos: amitriptilina, nortriptilina(B)
Análogos del GABA: benzodiazepinas,
gabapentina, baclofeno(B)
Antagonistas del calcio: nimodipino , flunaricina
Antiepilépticos:carbamazepina,lamotrigina,
ácido valproico
Antagonistas selectivos del receptor del
glutamato: caroverina(antiespasmolítico)
Análogos de prostaglandinas: misoprostol
Lidocaina nasal
Antioxidantes: audiovit(magnesio, melatonina,
gingo biloba)
14. bibliografía
New trends in tinnitus management.
Fioretti A, Eibenstein A, Fusetti M.
Open Neurol J. 2011 Mar 22;5:12-7. doi:
10.2174/1874205X01105010012.
Actitud diagnóstico-terapéutica con los acúfenos
Ángela Callejo Castillo
Josefina Girons Bonells AMF 2009;5(5):262-264
.Costa C, Amor JC. Acúfenos. AMF 2006;2(5):289-93.
Hinweis der Redaktion
Cuando valoramos a un paciente con acúfenos resulta de
suma importancia tener presente dos aspectos: en primer
lugar, que el acúfeno es un síntoma (bien sea polisintomático
o aislado) que puede provocar una grave distorsión en el área
emocional del paciente, y en segundo lugar que casi siempre
suele ser banal, pero también puede corresponder a patología
grave, principalmente originada en el área de la vía auditiva.
Si el médico de atención primaria, siguiendo el esquema
diagnóstico, no halla la causa del acúfeno, está justificada la
consulta al otorrinolaringólogo.
“El objetivo es devolver la normalidad a la vía auditiva, suprimiendo la molestia y consiguiendo la habituación al acúfeno, y demostrar que se produce un porcentaje elevado de mejoría en todos los pacientes que siguen el tratamiento, tanto de los que llegan al alta médica, como de aquellos que no continúan la terapia hasta alcanzar la habituación total al acúfeno”.