2. DEFINICIÓN
Enfermedad reumática de causa desconocida, se caracteriza
por autoanticuerpos dirigidos frente a antígenos propios, lo
que provoca una lesión inflamatoria de muchos órganos diana.
16. DIAGNOSTICO
Deben cumplirse:
• Al menos 4 criterios (al menos uno clínico y otro
inmunológico)
• Nefritis lúpica como único criterio en presencia de ANAS
ó anti DNA de doble cadena.
17.
18. DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
Fiebre de origen desconocido
Artritis reumatoide juvenil
Glomerulonefritis postestreptocócica aguda
Fiebre reumática aguda
Endocarditis infecciosa
20. TRATAMIENTO
No farmacológico
Protección
solar
Hábitos de vida
saludable
Nutrición
adecuada
Suplementos
de calcio y
vitamina D
Ejercicio y
reposo
equilibrados
Seguimiento Vacunas
Evitar
embarazo no
deseado
TRATAMIENTO
No farmacológico
22. LUPUS NEONATAL
Transferencia de
anticuerpos anti-
Ro y anti-La en
semana 12 a 16
BAV 3er grado,
lesiones cutáneas,
hepatitis,
trombocitopenia,
neutropenia,
afectaciones
pulmonares y
neurológicas.
Las lesiones
cutáneas
aparecen tras la
exposición a la luz
alrededor de la
6ta semana
Tratamiento de
apoyo, mayoría de
manifestaciones
resuelven
Hinweis der Redaktion
una enfermedad reumática de causa desconocida, se caracteriza por autoanticuerpos dirigidos frente a antígenos propios, lo que provoca una lesión inflamatoria de
muchos órganos diana como las articulaciones, los riñones, las células hematopoyéticas y el sistema nervioso central.
La causa y mecanismos del lupus siguen siendo desconocidos.
Muchos factores, incluidos la predisposición génica, las hormonas
y el ambiente, contribuyen a la alteración inmunitaria del lupus. La característica
principal del lupus es la producción de autoanticuerpos
frente a muchos antígenos propios, sobre todo anticuerpos antinucleares
La exposición a los rayos ultravioletas presentes
en la luz solar exacerba las manifestaciones lúpicas, quizá por
una lesión de las células cutáneas, lo que provoca la liberación de material
nuclear, como el ADN, que forma complejos con los anticuerpos
contra el ADN circulantes.
Se encuentran depósitos fibrinoides debidos a cambios en las fibras
de colágeno y la sustancia de fondo en las paredes vasculares de los órganos
afectados. El parénquima puede contener cuerpos de hematoxilina,
que probablemente son núcleos celulares degenerados. A veces
también se encuentran nódulos y gránulos reumatoides en los tejidos
afectados.
Los niños con lupus acuden con manifestaciones diversas y a menudo graves (tabla 157-1). Los niños suelen debutar con fiebre, astenia, alteraciones sanguíneas, artralgias o artritis, erupción cutánea y enfermedad renal. Los síntomas pueden ser intermitentes o persistentes.
Con frecuencia hay manifestaciones cutáneas. La erupción malar o en mariposa característica afecta al puente nasal y varía desde un rubor eritematoso hasta una epidermis engrosada o placas descamativas (fig. 157-1
La erupción cutánea puede ser sensible a la luz y extenderse a todas las áreas expuestas al sol. Aparecen alteraciones mucosas desde un eritema vasculítico hasta úlceras, sobre todo en las mucosas palatina y nasal (fig. 157-2). Las lesiones discoides son inusuales en la infancia y son más frecuentes como manifestación del lupus que del lupus eritematoso discoide (LED). Sólo el 2-3% de los LED se producen en la infancia. Otras manifestaciones cutáneas el
fenómeno de Raynaud.
se incluyen artralgias, artritis, tendinitis y miositis. La artritis deformante es inusual, aunque la artritis en la mano puede dar lugar a una lesión ligamentosa y a unas articulaciones muy laxas. La osteonecrosis es frecuente y se considera secundaria a la vasculopatía o al tratamiento corticoide.
afectan tanto al sistema nervioso central como al periférico. Muchos pacientes con lupus experimentan pérdidas de memoria u otras disfunciones cognitivas en el curso de su enfermedad. Las manifestaciones neuropsiquiátricas pueden den ser graves y los pacientes pueden cumplir criterios diagnósticos de psicosis. La RM y la TC pueden ser normales aunque la TC por emisión de fotón único puede ser anormal. Puede haber trombosis venosas o arteriales , indicativas de un síndrome de anticuerpos antifosfolipídicos, en el encéfalo o cualquier órgano y asociarse a abortos recidivantes, lividez reticular, trombocitopenia y fenómeno de Raynaud. La presencia de anticoagulante lúpico y resistencia adquirida a la proteína C activada puede asociarse a episodios de trombosis.
La serositis puede afectar a las superficies pleural, pericárdica y
peritoneal. A menudo hay hepatoesplenomegalia y linfadenopatía.
Otras manifestaciones gastrointestinales, casi siempre debidas a la
vasculitis, son dolor, diarrea, melena, infarto, enfermedad inflamatoria
intestinal y hepatitis. La serositis puede imitar un abdomen agudo.
La afectación cardíaca puede afectar a todos los tejidos cardíacos con
manifestaciones que incluyen el engrosamiento valvular y la endocarditis
verrugosa (enfermedad de Libman-Sacks), la cardiomegalia, las
anomalías de la conducción, la insuficiencia cardíaca y la vasculitis y
la trombosis arterial coronaria. Las manifestaciones pulmonares son la
hemorragia pulmonar aguda, los infiltrados pulmonares (a veces con
sobreinfección) y la fibrosis crónica. La afectación cardiopulmonar
temprana es a menudo silente y puede detectarse mediante un ecocardiograma
y unas pruebas de función pulmonar anuales con capacidad
de difusión.
os Anticuerpos antinucleares (ANA) son autoanticuerpos que tienen como blanco el contenido del núcleo celular.1 La concentración de anticuerpos antinucleares está significativamente aumentada en aquellos pacientes con enfermedades autoinmunes. El test de ANA, mide el patrón y la cantidad de autoanticuerpos, resultando positivo en el caso de que los títulos se encuentren aumentados en comparación con la población general. En general, los ANA se encuentran presentes en bajas concentraciones en la mayor parte de la población, pero existe alrededor de un 5% de la población (principalmente en mujeres), en que su concentración se encuentra significativamente aumentada y la mitad de éstos llegan a desarrollar alguna enfermedad autoinmune.
Las principales causas de muerte en los pacientes
con lupus son en la actualidad la infección, la nefritis, la afectación del
sistema nervioso central, la hemorragia pulmonar y el infarto de miocardio,
que puede deberse a la administración continua de corticoides
en el marco de una enfermedad por inmunocomplejos. La nefritis lúpica
está presente en la mayoría de los niños con lupus; los niños con una
nefritis clínica muestran signos de progresión en los 2 años siguientes
al inicio de los síntomas. Pueden surgir la leucopenia, la anemia o la
trombocitopenia persistentes.
El lupus en los recién nacidos se debe a la transferencia de autoanticuerpos
IgG, habitualmente anti-Ro/SSA o anti-La/SSB, entre las semanas
12.ª y 16.ª de gestación. Sólo un pequeño porcentaje de la descendencia
de las madres con autoanticuerpos frente a Ro o La presenta
la enfermedad. Los factores maternos o fetales deben tener un papel
añadido. Los síntomas suelen derivar de un solo órgano, aunque pueden
afectarse múltiples órganos con bloqueo cardíaco congénito, lesiones
cutáneas, hepatitis, trombocitopenia, neutropenia y afectaciones pulmonar
y neurológica. Las lesiones cutáneas aparecen tras la exposición
a la luz ultravioleta alrededor de la 6.ª semana de vida y duran 3-4 meses.
La erupción es más frecuente en la cara y el cuero cabelludo, y el
25% de las erupciones cutáneas cicatriza. El tratamiento es de apoyo.
La mayoría de las manifestaciones se resuelven, aunque el bloqueo cardíaco
congénito es permanente y a menudo requiere un marcapasos
cardíaco, bien en el nacimiento o, cuando es grave, antes de éste. Puede
ser eficaz el tratamiento con corticosteroides de la madre embarazada en
cuanto se detecta un bloqueo cardíaco antes del nacimiento y el del niño
tras el nacimiento. Incluso los hijos de madres asintomáticas con lupus
pueden tener un intervalo PR ligeramente prolongado. La miocardiopatía
es una secuela grave y poco frecuente que a veces requiere un trasplante
de corazón.