1. Resurrección de Jesús Liliana Galicia Beatriz Blanco Luís Ángel Huarcaya
2. Este cuadro conocido también como Resurrección Kinnaird por haber formado parte de la colección de Lord Arthur Fitzgerald Kinnairdrthshire, es una pintura óleo sobre tabla atribuida al maestro del renacimiento italiano Rafael Sancio. Fue pintado entre 1499 y 1502. En esta obra se puede observar el dramatismo estílico y compositivo del autor, en oposición al poético que empleaba su maestro Pietro Perugino. Está hecha con gran racionalidad mediante una compleja e ideal geometrización que une todos los elementos de la escena y les confiere una peculiar animación rítmica, al hacer participar a todos sus personajes en una única «coreografía».
3. Cuadro de Perugino (1499).Presenta a Cristo levitando sobre un sarcófago adornado con delfines dorados; los guardianes, trazados con una singular mezcla de colores fuertes y brillantes, se contorsionan de espanto al presenciar el fenómeno sagrado, en marcado contraste con la presencia y la tranquilidad lineal del Mesías que se yergue en la parte central de la obra. Rafael utilizó el dibujo y la simetría para crear un ambiente complejo y ampliamente detallado, al tiempo que se esforzó en garantizar que todos los pormenores de la composición condujesen la mirada del espectador hacia la figura de Cristo. La composición y las figuras se ordenan en sucesivos planos horizontales, aspecto característico del Quattrocento. Sus personajes dulces y serenos en paisajes tranquilizadores se pusieron de moda e influyeron decisivamente en su discípulo.
4. Es una pintura privada, en óleo sobre tela, de 201 por 308 cm. Esta obra expresa el momento triunfal de la Resurrección de Cristo en la madrugada del Domingo. Nadie fue testigo ocular de este extraordinario acontecimiento. Cuando Jesús es puesto en el sepulcro pusieron guardias para custodiarlo temiendo que sus discípulos robaran el cuerpo y levantaran la impostura de que había resucitado. Cristo sale del sepulcro con una luz esplendente –la luz del amanecer-, el es el Sol de Justicia, porta en su mano derecha el signo de su victoria, la cruz, como un estandarte blanco, signo de la paz. En su sepulcro aparece dibujado un pez aludiendo a la señal de Jonás. El equilibrio de la obra se obtiene mediante la geometrización ideal de la composición: el rectángulo central de la tumba se expande en otro, que circunscribe a los cuatro soldados. La posición diagonal de la tapa del sarcófago, a su vez, traza varias líneas que vinculan los personajes, tanto en el sentido de la diagonal como en el horizontal. La animación rítmica de la imagen se obtiene con el gesto que realiza el soldado sentado en la parte inferior derecha, levantando la mano izquierda ante Cristo, como si la orquestación compositiva correspondiese a un único movimiento
5. Obra de Giotto di Bondone pintada entre 1302-05, se encuentra en la capilla de los Scrovegni se caracteriza por su material fresco y su estilo es del Renacimiento Italiano. Giotto figura un mismo espacio donde se desarrollan dos episodios de la vida de Cristo, tras su muerte. El paisaje da unidad a la secuencia temporal. Situados después del Lamento por el Cristo muerto, a la izquierda tiene lugar la Resurrección. Se presenta la tumba vacía, sobre la que se sientan dos ángeles que anuncian que Dios ha resucitado. Abajo, en el suelo y delante del frontal del sarcófago, los soldados duermen tranquilos ajenos a los acontecimientos. Sus posturas y gestos apacibles son de una calidad de gran realismo, que acerca el suceso milagroso al espectador. EL domingo de Pascua se le apareció Dios, hacia el cual se abalanzó incrédula María Magdalena. Jesús exhortó a la santa a que no la porque aún no había subido al cielo. Llama la atención el gesto arrodillado de la Magdalena, detenida por las palabras de Cristo, el cual muestra una posición confusa en sus pies, entre el deseo de abrazar a la santa y el exhorto lanzado.
6. Obra de Peter Paul Rubens en 1612, está en la Catedral de Amberes, es un Oleo sobre tabla y su estilo es Barroco Centroeuropeo En la izquierda contemplamos a San Juan Bautista, mientras que en la derecha se observa a una santa portando la palma del martirio, rodeada de las ruinas de un templo clásico y sobre un pedestal, como si de una estatua pictórica se tratara. En la tabla central encontramos el asunto principal, la resurrección de Cristo a los tres días de su muerte. La figura de Jesús se alza majestuosa y rodeada de un halo de luz mientras los soldados que custodiaban el sepulcro observan la escena, destacando sus gestos que van de la sorpresa al pánico. Los cuerpos de los soldados se presentan en forzadas posturas al tiempo que Cristo manifiesta serenidad y equilibrio, contraste simbólico muy admirado en el Barroco. El juego de luces y sombras presenta cierta dependencia de Caravaggio mientras que la potente musculatura de los diferentes personajes está inspirada en la estatuaria clásica y Miguel Ángel
7. Obra de Tiziano pintada entre 1452-44, está en el Palacio de Urbino, mide163 por 144 cm., es un Oleo sobre lienzo, su estilo es del Renacimiento Italiano. Al igual que la Ultima Cena, este lienzo formaba parte del estandarte procesional de la Cofradía del Corpus Christi de Urbino. Renuncia a la iluminación crepuscular para emplear una luz cálida que permite contemplar tanto a Cristo como a los soldados. Los soldados aparecen en posturas escorzadas, manifestando un apreciable contraste entre la quietud de Jesús y el forzado movimiento de los soldados. Los colores empleados son muy vivos, especialmente en los uniformes de los guardianes de la tumba. Estas tonalidades son aplicadas de manera rápida, anticipándose al estilo final denominado "impresionismo mágico".
8. Obra de Tintoretto, hecha entre1578-81, mide 529 por 485 cm está en la Scuola Grande di San Rocco de Venecia. El lienzo está protagonizado por la monumental figura de Cristo resucitado, portando la banderola en su mano izquierda, dejando ver su atlético cuerpo desnudo, a excepción del rojizo paño que le cubre la entrepierna. El escorzo de la figura queda reforzado por la disposición de los cuatro ángeles que levantan la losa de mármol que cerraba el sepulcro, dejando surgir una anaranjada luz sobrenatural. La zona inferior de la composición está ocupada por los soldados dormidos, quedando en la zona de penumbra. En la zona de la izquierda dos pías mujeres que discuten y se acercan a la tumba del Salvador completan la composición, iluminadas por una luz natural que destaca sus rojizas vestimentas.
9. Obra de Tiziano hecha entre 1520-22, se encuentra en la Iglesia de los Santos Nazario y Celso de Brescia, es un Oleo sobre tabla, su estilo es del Renacimiento Italiano. Tiziano utilizará la iluminación crepuscular como elemento unificador, bañando la misma luz todas las escenas. Será el arte helenístico la fuente más directa empleada por Tiziano para esta imagen al inspirarse en la recientemente descubierta escultura del Laoconte. La anatomía de Cristo está bañada por la potente luz mientras que los soldados de la parte baja de la composición quedan en penumbra, resaltando los brillos metálicos de sus armaduras. Estos contrastes lumínicos anticipan el estilo barroco que un siglo después impondrá Caravaggio.
10. Obra de Alberto Durero, pintada entre 1509-11, su material es la Xilografía Europea, su estilo corresponde a la Pintura Flamenca. El artista Alberto Durero realizó esta xilografía de pequeño tamaño para la llamada "Pequeña Pasión", que narra los últimos días de Jesucristo. La imagen que podemos contemplar nos muestra a Cristo resucitado de su sepulcro de piedra, mientras los soldados duermen plácidamente. Cristo está caracterizado como salvador y triunfador sobre la muerte. Lleva un manto de pliegues quebrados y un cetro con la cruz, el símbolo de su martirio. El halo que resplandece sobre su cabeza indica su naturaleza sobrehumana y encuentra un eco muy poético con el resplandor del sol al amanecer. El amanecer es la mejor imagen de la resurrección, entendida a un nivel universal, merced al sacrificio de Cristo.