Cómo programar la adquisición de un hábito, que aspectos debemos tener en cuenta y la importancia de mantener la coherencia entre las familias y la escuela.
2. Qué debemos hacer
• Establecer unos objetivos:
elegir las conductas que
queremos que se conviertan
en hábitos.
• Programar las actividades y
todo lo que ello implica.
3. Diferencia entre el primer ciclo y segundo ciclo
• Primer ciclo (0-3):
- Inicio del aprendizaje de rutinas y hábitos.
- El educador/a debe actuar en los primeros
intentos, luego actuará de
guía/acompañante.
• Segundo ciclo (3-6):
- Etapa de consolidación de los hábitos
introducidos en el primer ciclo.
4. Cómo lo vamos a hacer
• Decidiremos qué momentos del día están
destinados a actividades relacionadas con
la adquisición de hábitos.
• Alternar periodos de actividad-descanso y
actividad lúdica-adquisición de hábitos.
• Programación estable y pautada
diariamente para reforzar el automatismo.
5. Qué debemos tener en cuenta (estrategias
educativas)
• Preparación: valorar las capacidades, la estructura del entorno y el
material.
• Aprendizaje:
- Se enseña el hábito para que aprendan por imitación.
- Se pueden detectar posibles puntos débiles para poderlos corregir.
• Automatización:
- Repetición rutinaria.
- Perfeccionamiento.
- Importante motivar.
• Consolidación:
- Ha adquirido total autonomía en la actividad.
- Sabe cómo y cuándo hacerlo.
6. Relación familia escuela. Evaluación
• La relación familia-escuela es fundamental para
la adquisición de hábitos.
• Unos hábitos se inician en la escuela y otros en
casa pero es fundamental mantener la
coherencia.
• Los métodos y estrategias debe estar pactados
por ambas partes.
• Deben decidir cómo y cuándo se inician las
rutinas.
• La comunicación puede darse mediante
reuniones, entrevistas, notas informativas…
7. Relación familia escuela. Evaluación
• La relación familia-escuela es fundamental para
la adquisición de hábitos.
• Unos hábitos se inician en la escuela y otros en
casa pero es fundamental mantener la
coherencia.
• Los métodos y estrategias debe estar pactados
por ambas partes.
• Deben decidir cómo y cuándo se inician las
rutinas.
• La comunicación puede darse mediante
reuniones, entrevistas, notas informativas…