1. ¿Qué es un texto argumentativo?
El texto argumentativo es aquel que sirve para expresar opiniones, ideas y
posturas sobre un tema en particular, con el objetivo de persuadir al lector.
Para ello, se vale de diferentes tipos de argumentos, como argumentos
inductivos, deductivos, de autoridad, de probabilidad, de razonamiento lógico,
argumentos afectivos, entre otros.
Estos tipos de textos son ampliamente utilizados en el ámbito periodístico,
científico, judicial, filosófico y publicitario. A veces pueden combinar ciertas
características del texto expositivo para presentar temas de interés general de una
forma objetiva.
Los textos argumentativos también pueden emplearse en conversaciones,
exposiciones y debates para convencer a otros sobre nuestro punto de vista, o
sobre la verdad o falsedad de un asunto.
Características del texto argumentativo
Tiene una finalidad comunicativa, transmitir una postura u opinión que se apoya
en una serie de fundamentos que versan a su favor o en su contra.
El uso del texto argumentativo está muy extendido en el área académica, pues
permite establecer debates y discutir diferentes posturas sobre un tema de
investigación.
El texto argumentativo sirve para demostrar un hecho, convencer acerca de un
asunto o hacer cambiar de opinión al lector.
Su contenido se estructura en tres partes: introducción, argumentación
y conclusión.
Es recurrente el uso de conectores textuales que permiten enlazar la información
entre partes de forma coherente. Algunos ejemplos son: por tanto, en
consecuencia, sin embargo, etc.
Los argumentos en los que se apoya deben ser coherentes con las ideas que se
defienden en la tesis, es decir, con la postura que el autor toma acerca del tema.
Puede hacer uso de diferentes tipos de argumentos, como:
o Argumentos deductivos: una premisa general conduce a una conclusión
específica.
o Argumentos inductivos: la premisa surge de la experiencia y su conclusión es
una generalización.
o Argumentos abductivos: plantea una premisa e hipótesis que deben ser
explicadas.
o Razonamiento lógico: proposiciones verdaderas que conducen a conclusiones
verdaderas.
o Argumento de autoridad: afirmación sostenida por una persona especialista o
experta.
o Argumento de analogía: utiliza casos semejantes para argumentar.
o Argumento de probabilidad: se valen de datos estadísticos.
o Argumentos afectivos: recurren a los sentimientos para emocionar al lector.
Estructura del texto argumentativo
2. Introducción
En esta primera parte el autor presenta el tema y la tesis, la finalidad es captar la
atención del receptor. Debe ser un texto claro y coherente. La tesis debe dejar
clara la postura que el autor va a defender frente al tema.
Ejemplo de introducción:
Influencia de la lectura en el desarrollo cognitivo (tema).
Desde pequeños, nuestros padres y profesores persiguen el objetivo de
enseñarnos a leer, porque leer es la base de todo nuestro desarrollo y marcará
el camino de nuestra vida adulta.
¿Será que desde tan temprano estamos perfilando nuestro futuro?
Rotundamente sí.
Leer abre nuestro universo cognitivo y lo ilumina. La lectura es esencial para
el aprendizaje. (Tesis).
Desarrollo de los argumentos
Se presentan los argumentos que sirven para afirmar o refutar la tesis presentada.
Los argumentos se presentan por orden de importancia y se acompañan de
ejemplos para mejorar su comprensión, de esta manera, se busca persuadir al
receptor.
Ejemplo de argumentación:
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos
(OCDE), leer a diario favorece el rendimiento de los estudiantes. Y es durante la
etapa estudiantil cuando se debe cimentar un hábito de lectura sólido y
duradero.
La lectura, y por ende la comprensión lectora, precisan de una interpretación de
letras y símbolos para hallar la información del texto. De modo que favorece la
adquisición de vocabulario y ayuda a comprender la sintaxis.
Cuál es la estructura del texto argumentativo
Los textos argumentativos se escriben para expresar opiniones, demostrar teorías o
defender posturas acerca de un tema sobre el que existe un debate, pero también para
refutar puntos de vista que consideramos erróneos.
La estructura del texto argumentativo consta de tres partes: introducción, cuerpo
argumentativo y conclusión.
La introducción es la parte en la que se da a conocer el tema del que tratará el texto y
la tesis, es decir, la postura que el autor mantiene al respecto.
El cuerpo argumentativo es la parte del texto donde se exponen los argumentos
o razonamientos sobre los que se apoya la tesis.
La conclusión revisa las ideas más importantes y expone la opinión del autor con
la finalidad de generar un cambio en la opinión del lector.
Los tipos de textos argumentativos son:
3. Textos científicos: psicológicos, filosóficos, lingüísticos, teológicos, etc.
Textos legales: sentencia, recurso o apelación, etc.
Ensayo.
Textos periodísticos: editorial, cartas de los lectores, páginas de opinión.
Debates orales: foros de opinión.
Publicidad: comercial, propaganda política, etc.