1. LOS NIÑOS NECESITAN DE LA NATURALEZA
Para crecer de manera armoniosa, estar sanos y
adquirir auténtica conciencia ecológica, hace
falta que los niños puedan jugar y vivir en
contacto con la naturaleza.
Un mundo por descubrir
Adultos y niños están en la naturaleza de manera
diferente. Para los primeros, en general, la
naturaleza es el fondo visual de las actividades que
están realizando en ella. Para los niños, no es sólo
un marco, es una fuente de estímulos y un territorio
a descubrir. Les ofrece una experiencia sensorial completa e insustituible a través
del tacto, el olor, los sonidos y las imágenes, que impactan sobre su imaginación y
sus emociones.
Los niños conservan una tendencia biológica, instintiva, a establecer un vínculo
con el mundo natural, donde encuentran una serie de cualidades únicas y que no
se hallan en otros entornos.