2. • Dios, te doy gracias por este día. Sé
que aún no he logrado todo lo que
esperas de mí y si esa es la razón por la
cual me bañas en el rocío fresco de un
nuevo día, estoy muy agradecido. Estoy
preparado, al fin, para hacer que tú te
sientas orgulloso de mí.
3. • Olvidaré del ayer con todos sus problemas
y pruebas; agravios y contratiempos;
angustias y frustraciones. El pasado ya es
un sueño del cual no puedo retomar ni una
palabra, ni borrar ningún acto indebido.
Resuelvo, sin embargo, que si he
perjudicado a cualquier persona por mi
desconsideración, no dejaré que pase éste
día sin rectificarlo, y nada de lo que haga
hoy será de mayor importancia.
4. • No me preocuparé por el futuro. Mi
éxito y felicidad no depende de
esforzarme a ver lo que acecha
débilmente por el horizonte, sino hacer
éste día lo que tengo dentro de mi
poder.
5. • Atesoraré el día de hoy porque es lo
único que tengo. Sé bien que sus horas
que se deslizan apresuradamente no
pueden ser almacenadas o guardadas
como un grano precioso para su uso
futuro.
6. • Viviré como hacen todos los buenos
actores cuando están en el
escenario— sólo en el momento. No
puedo desempeñarme al máximo hoy
lamentando mis “horrores” del acto
previo o preocupándome por la
escena que viene.
7. • Abrazaré las tareas difíciles de hoy,
me quitaré el saco y levantaré polvo
en el mundo. Sé que entre más
ocupado esté, menos dolor soy apto
de sufrir, más sabrosa será mi
comida, más dulce mi sueño, y más
satisfecho me sentiré con mi lugar en
el mundo.
8. • Me liberaré hoy de la esclavitud del
reloj y del calendario. Mientras que
planificaré este día para conservar mis
pasos y mi energía, comenzaré a
medir mi vida en hechos, no en años;
en pensamientos, no en temporadas;
en sentimientos, no en figuras sobre
una superficie.
9. • Estaré atento a lo poco que se
requiere para que éste sea un día
feliz. Jamás perseguiré la felicidad
porque no es una meta, sino un
resultado, y no hay felicidad en
obtener o tener, sólo en dar.
10. • Huiré de ningún peligro que encuentre
hoy porque estoy seguro que no hay
nada que me pueda ocurrir que no
estoy preparado para manejar con tu
apoyo. Como una piedra preciosa que
se pule con la fricción, tengo la
certeza de que mi valor aumentará por
la adversidad de hoy, y si cierras una
puerta siempre me abres otra.
11. • Viviré este día como si fuera navidad y
seré un repartidor de regalos y
entregaré a mis enemigos, el regalo
del perdón; a mis oponentes, la
tolerancia; a mis amigos, una sonrisa;
a mis hijos, un buen ejemplo, y cada
regalo será envuelto en un amor
incondicional.
12. • Desperdiciaré ni un precioso segundo
hoy en rabia, odio, celos o egoísmo.
Sé que las semillas que siembro serán
cosechadas porque cada acción, bien
o mal, tiene una reacción igual. Sólo
sembraré buenas semillas el día de
hoy.
13. • Trataré al día como si fuera un violín
que no tiene precio. Uno sacará
armonía de él, y otro disonancia, pero
ninguno puede culpar al
instrumento. La vida es igual, y si lo
juego bien, me brindará belleza; pero
si lo juego mal, producirá fealdad.
14. • Me condicionaré para ver a cada
problema que encuentre hoy como si
fuera no más que una piedra en el
zapato. Me acuerdo del dolor tan
intenso que casi no podía caminar y
recuerdo mi sorpresa cuando me quité
el zapato y encontré sólo un grano de
arena.
15. • Trabajaré convencido que nada
grande se ha hecho sin
entusiasmo. Para lograr cualquier
cosa que sea digna de hacer, no
puedo quedarme atrás temblando y
pensando en el frío y el peligro, sino
lanzarme por dentro con brío y hacer
lo mejor que pueda.
16. • Me presentaré al mundo con metas
establecidas para el día de hoy, pero
serán las que son alcanzables, no
aquellas inciertas e imposibles
declaradas por aquellos que hacen
como oficio el fracaso. Sé que
siempre se pruebas con poco para ver
lo que haría con mucho.
17. • Jamás ocultaré mis talentos. Si me
quedo en silencio, seré olvidado; si no
avanzo retrocedo; si doy la espalda a
cualquier desafío hoy, mi auto-estima
será cicatrizada para siempre; y si dejo
de crecer aunque sea un poquito, me
empequeñeceré. Rechazo la posición
estacionaria porque siempre es el
comienzo del fin.
18. • Mantendré una sonrisa en la cara y en
el corazón el día de hoy hasta cuando
me duela. Sé que el mundo es un
espejo y me da el reflejo de mi propio
alma y, ahora comprendo el secreto
para cambiar la actitud de los demás
es primero cambiando la mía.
19. • Daré la espalda a cualquier tentación
hoy que me podría obligar a
deshonrar la palabra o disminuir mi
opinión de mi mismo. Tengo la
certeza que lo único que tenga más
valor que mi vida es mi honor.
20. • Trabaré con todo mi esfuerzo hoy
contento al saber que la vida no
consiste en quedarme en el pasado
pensando, o ansiarme por lo que viene
en el futuro. Es asombroso contemplar
el gran número de pasos dolorosos
tomados para llegar a una verdad tan
antigua, tan obvia y tan frecuentemente
expresada. Por lo que ofrece, poco o
mucho, mi vida es ahora.
21. • Tomaré una pausa cuando sienta
lástima por mi mismo hoy y recordaré
que este el único día que tengo. Lo
que podría significar mi parte en el
gran todo, tal vez no lo entienda, pero
estoy aquí para jugarlo y este es el
momento.
22. • Contaré este día como si fuera una
vida separada y recordaré que
aquellos que tienen menos
arrepentimiento son aquellos que
toman a cada momento como venga y
por todo lo que valga.
23. • Este es mi día…
Estas son mis semillas…
¡Gracias Dios mío por este precioso
jardín de tiempo!