El documento describe la evolución del sistema de propiedad intelectual a nivel mundial y regional, incluyendo la creación de la OMC y el acuerdo ADPIC en 1996. Argumenta que los países en desarrollo deben implementar una agenda regional de propiedad intelectual para satisfacer sus necesidades propias, y utilizar las flexibilidades del acuerdo ADPIC para generar herramientas de desarrollo. También propone que los países trabajen juntos en iniciativas como acceso a medicamentos y protección de conocimientos tradicionales para lograr mayores beneficios.