2. ¿Que es?
La criptozoología (del griego κρυπτος cryptos, 'oculto', ζωος
zoos, 'animal' y λογος logos, 'estudio'; literalmente: 'el
estudio de los animales ocultos') es la disciplina que realiza
el estudio y búsqueda de hipotéticos animales actuales
denominados "críptidos"; que según sus partidarios,
postulan que estarían quedando fuera de los catálogos de
zoología contemporánea. Su objetivo es la búsqueda de
supuestos animales considerados extintos o desconocidos
para la ciencia, pero presentes en la mitología y el folclore.
La criptozoología ha recibido muy poca atención por la
comunidad científica y los escépticos,1 2 quienes la
consideran una pseudociencia.
4. Extraño Ser en Zapala
Un extraño ser fue hallado por una familia de Zapala, Argentina. Se trata de una especie
de esfera maciza del tamaño de un huevo que tiene un tentáculo o filamento moviéndose
a mucha velocidad. “Tiene la forma de una pelota de golf que larga unas hebras que se
mueven rápido”, comentó Carlos Catalán, la persona que lo encontró.
Este hombre, retirado del Ejército, explicó que se encontró con este objeto cuando salió
para ver a qué le ladraban sus dos perros. “Me acerqué y ví que eso se movía solo. Me
llamó al atención, entonces la moví con una pala y seguía comportándose igual,
moviendo esas hebras. Después la agarró mi perra, la mordió como si fuera una pelota y
la soltó, y siguió igual moviéndose”.
Entonces Carlos decidió llamar a su hijo Mauricio, quien filmó el video y luego lo subió a
las redes sociales Facebook y Youtube. “Después le pegamos con el filo de la pala para
ver si se rompía o algo. Se abolló, le salió un líquido y se quedó ahí sin moverse”.
Posteriormente el hombre tiró el objeto en la vereda de su casa. “En un momento me
comuniqué con mi hijo Diego. Él me dijo que lo llevara a algún lado para ver de qué se
trataba. Lo metimos en un frasco y ni en una veterinaria ni en Bromatología de la
municipalidad nos supieron decir qué es”. Finalmente decidieron enviar el frasco con el
extraño ser a Neuquén. Allí Diego lo acercó a la Universidad Nacional del Comahue, en
donde sin poder dar una respuesta clara decidieron enviarlo a Bariloche para ser
analizado por biólogos.
5. Los Rhinogrades o Snouters
Todo comenzó en 1941 cuando el sueco Einar Pettersson-Skämtkvis
escapó del ejército nipón que le tenía retenido como prisionero de
guerra. El destino quiso que Einar no fuera recapturado y así logró
nadar lo suficiente como para dejar atrás a sus captores. No obstante la
casualidad hizo que las corrientes marinas condujeran a Einar a un
misterioso y hasta entonces desconocido archipiélago en algún lugar
del Océano Pacífico.
Allí, Einar descubriría un oasis zoológico en el que el mismísimo
Charles Darwin habría caído presa del asombro. Y es que, en aquel
archipiélago, los mecanismos genéticos de la evolución habían tomado
unos cauces excéntricamente distintos al del resto de seres vivos que
se conocen, tal vez debido al aislamiento geográfico. Fue así que Einar
se encontró con un extraño abanico de especies de mamíferos que
habían desarrollado sus apéndices nasales de un modo inimaginable
que les había permitido adaptarse a los diversos entornos de la isla y
cumplir multitud de funciones según la necesidad.
6. Seres como ratones que volaban con las orejas y se apoyaban con
una fusión entre pata y nariz, pequeños roedores que recordaban a
los pulpos porque se desplazaban sobre varias narices parecidas a
tentáculos… Aquellas fueron sólo algunas de las fascinantes
criaturas que poblaban el archipiélago que posteriormente sería
bautizado como Hi-yi-yi o Hi-IAY islands.
Años después los misteriosos seres serían conocidos como snouters
o rhinogrades; ya que, pese al descubrimiento de Einar, no hubo un
estudio científico sobre las criaturas hasta 1957, año en que el
naturalista alemán Harald Stümpke se decidió a investigar a
aquellas narigudas criaturas y elaboró así su gran monografía “Bau
und Leben der Rhinogradentia” (Forma y vida de los Rhinogrades).
7. Nuevas especies en Ecuador
Un equipo de científicos estadounidenses y ecuatorianos ha descubierto en la
costa de Ecuador un nuevo y extraño ecosistema de gran valor por su
diversidad biológica. La expedición fue llevada a cabo por la organización
Reptile & Amphibian Ecology International. La mayor parte de los animales se
localizaron en el Cerro Pata de Pájaro, una pequeña montaña situada a pocos
minutos del Océano Pacífico rodeada por un bosque tropical y enclavada en
un bosque tropical nuboso. En esta zona habitan entre 14 y 30 especies que no
se dan en ningún otro lugar conocido. "Obviamente, estamos muy
preocupados ante la posibilidad de que estas especies desaparezcan tan pronto
como, o incluso antes, sean formalmente catalagodas por los científicos",
afirma el líder de la expedición, el dr. Paul S. Hamilton.
Y es que esta zona está amenazada por múltiples fenómenos: desde la
deforestación para que pueda pastar el ganado a la tala de árboles y la caza.
Asimismo, los expertos en cambio climático predicen que muchos de estos
bosques, junto con los animales que dependen de ellos, podrían desaparecer
debido al calentamiento global si no se toman medidas para evitarlo.
"La buena noticia es que los animales aún están vivos por lo que todavía
tenemos tiempo para salvarlos de la extinción", afirma el Dr. Kerry Kriger,
director de la organización de protección de ranas 'Save the Frogs': "Hay que
pasar a la acción para evitar que ocurra".