1. TALLER EN AGRICULTURA SUSTENTABLE
MANEJO ORGÁNICO DE SUELO, LOMBRICULTURA, LOS BIOPREPARADOS,
PRODUCCION Y ADICIÓN DE EXTRACTOS HÚMICOS.
Organiza Inia Macro zona Norte
Convenio Profo Pica
Organiza INIA INTIHUASI
Relator Luis Leris Garay (INIA )
Dirigido Agricultores PROFO PICA
Coordina Nicolás Suarez
PICA MARTES 10 Y MIERCOLES 11 DE AGOSTO 2021
2. INTRODUCCIÓN
Actualmente, existe en el mundo una tendencia a la producción y consumo de productos
alimenticios obtenidos de manera “limpia”, es decir sin el uso (o en una mínima
proporción) de insecticidas, biocida, fertilizantes sintéticos, etc.
La producción orgánica de productos alimenticios es una alternativa que beneficia tanto a
productores como a consumidores, los primeros se ven beneficiados porque en sus
predios se reduce considerablemente la contaminación del suelo, del agua y del aire, lo
que alarga considerablemente la vida económica de los mismos y la rentabilidad de la
propiedad. Los consumidores se ven beneficiados en el sentido que tienen la seguridad
de consumir un producto 100% natural, libre de químicos, saludables y de alto valor
nutritivo.
La producción orgánica posee un mercado cada vez más creciente. Para ingresar a estos
mercados, especialmente a los países desarrollados, los productores deben lograr el sello
verde en sus cultivos; esta certificación la proporcionan empresas que se dedican a
evaluar anualmente si la producción se ajusta o cumple las normas establecidas respecto
a la producción orgánica, a cambio de esto, el productor que accede a estos mercados
obtiene mejores precios por su producción, lo que justifica la inversión realizada para
establecer y mantener un cultivo orgánico.
Las ventajas que tiene el uso de materia orgánica en la producción agrícola son
innumerables, pudiendo describirse las siguientes:
• La materia orgánica promueve el mejoramiento de la fertilidad física, química y
biológica del suelo.
• Favorece un adecuado balance entre oxígeno y agua disponible en el suelo.
• Una mayor actividad biológica incrementa la biodiversidad, favoreciendo la sanidad
del suelo.
• Sus beneficios serían más evidentes desde la zona central hacia el norte.
• Su efecto puede ser muy positivo en suelos pobres en carbono y manejados en
riego por goteo.
• La aplicación de abono orgánico debe ser previamente analizada, de acuerdo a
cada caso en particular. Considerando el tipo de cultivo, tipo de suelo, método de
riego, etc.
• Los diferentes tipos de estiércol mejoran las propiedades físicas del suelo.
• El contenido de fibra del estiércol es el factor que induce el mejoramiento sobre el
agregado de partículas del suelo, densidad aparente y mejora la conductividad
hidráulica.
• El incremento significativo de capacidad de retención de humedad está relacionado
con la capacidad de retención de humedad de los componentes orgánicos.
3. SUELO Y MATERIA ORGÁNICA
Se sabe que la práctica de la agricultura en su forma convencional favorece la pérdida
sostenida del carbono del suelo, es decir, de la materia orgánica, especialmente en lo que
se refiere a las prácticas de manejo y a los distintos procesos erosivos el suelo.
Una forma de aumentar la fertilidad y la sustentabilidad del sistema productivo, es la
aplicación de enmiendas orgánicas al suelo, las que deben ser constantes y programadas
para que sean exitosas, ya que las aplicaciones esporádicas mejoran muy levemente el
suelo. Es importante saber que de la cantidad de materia orgánica que ingresa a un
suelo, dos tercios se pierden por respiración de la biomasa microbiana, que son los
organismos encargados de la incorporación real de la materia orgánica al suelo.
ORIGEN DE LA MATERIA ORGÁNICA
Muchas investigaciones han demostrado efectos beneficiosos con la aplicación de la
materia orgánica al suelo, especialmente relacionadas con las características químicas,
físicas y biológicas del mismo.
Los materiales orgánicos procedentes de plantas, animales y microorganismos muertos o
sus deyecciones forman en su origen, la materia orgánica del suelo; además se agrega la
materia orgánica incorporada al suelo por la actividad humana: restos de cosechas o
enmiendas orgánicas de distintas procedencias y en diversos estados de descomposición.
Todo lo anterior origina lo que conocemos como materia orgánica propiamente dicha, que
consiste en un material termodinámicamente inestable, ligado a los ciclos del carbono,
nitrógeno, del fósforo y del azufre, a la reducción del hierro y el manganeso en el suelo y a
otros muchos procesos y que puede llegar a estabilizarse en función de los parámetros
ambientales (temperatura, pH, humedad, contenido iónico, poblaciones de
microorganismos, etc.).
En el suelo coinciden los materiales orgánicos frescos, las sustancias en proceso de
descomposición (hidratos de carbono, etc.) y los productos resultantes del proceso de
humificación. Todos ellos forman la materia orgánica del suelo.
4. MOVIMIENTO DE LA MATERIA ORGANICA EN EL SUELO
Cuando se dice "la materia orgánica de un suelo" nos estamos refiriendo al humus que
contiene.
¿Qué es el humus? Para entenderlo, un ejemplo. Cuando cae una hoja al suelo esa hoja
es inmediatamente atacada por hongos y bacterias e inician su descomposición. El
resultado es:
• Un porcentaje de la hoja se convierte en nutrientes minerales (nitrógeno, fósforo,
potasio, etc.) que pueden ser tomados directamente por las raíces.
• Y otra parte de esa hoja se transforma en humus. Lo mismo ocurre con cualquier otra
materia orgánica que adicionemos al suelo, por ejemplo, el estiércol, compost, etc.. Son
atacados por los microorganismos y hay producción de humus por un lado y producción
de nutrientes minerales para las plantas por otro.
Por dar un número y recalcar el tema anterior. Si esa hoja pesa 2 gramos, puede ser que
se convierta en humus 0,1 gramos y el resto en minerales.
Con los años, ese humus nuevo formado, también se transformará en minerales, pero
mucho más lentamente. Terminará por desaparecer como humus, pero después de más
de 3 años.
El humus es una sustancia muy especial y beneficiosa para el suelo y la planta. Tiene las
siguientes cualidades que aporta diversos beneficios:
a. Agrega las partículas y esponja el suelo, mejorando por tanto su estructura.
b. Retiene agua y minerales y así no se lavan y pierden en profundidad; igual que hace la
arcilla.
c. Aporta nutrientes minerales lentamente para las plantas a medida que se descompone
(nitrógeno, fósforo, potasio, magnesio, etc.).
d. El humus tiene otros beneficios menos estudiados pero muy interesantes. Produce
activadores del crecimiento que las plantas pueden absorber y favorece la nutrición y
resistencia: vitaminas, reguladores de crecimiento (auxinas, giberelinas, citoquinicas) y
sustancias con propiedades de antibióticos.
Las raíces, indudablemente, se desarrollan mejor en un suelo rico en humus que en uno
pobre en esta sustancia nutritiva.
5. DETERMINACIÓN DE LA CANTIDAD DE HUMOS DEL SUELO
Tomando en la mano un poco de tierra, por la estructura que tiene y el color, se puede ver
más o menos si es rica en materia orgánica o no. El método más preciso es llevar una
muestra de suelo a analizar a un laboratorio. Le dirán el valor exacto. Por ejemplo: este
suelo tiene un 1,7% de materia orgánica. Quiere decir que por cada 100 kilos de tierra,
hay 1,7 kilos es humus (repito que decir materia orgánica es decir humus).
La mayoría de los suelos cultivados tienen entre un 1 y un 3% de humus. La arena de la
playa es muy pobre en humus, no llega al 1%. En el extremo opuesto, el suelo de un
bosque, puede ser muy rico y superar el 5% de humus.
Cuando se realiza un análisis de suelo, uno de los datos que siempre se determina es el
de la materia orgánica (humus). Si el valor es bajo será recomendable hacer un plan de
mejora para aumentarla, por ejemplo, mediante la aplicación de guano durante varios
años seguidos. Aproximadamente el 10% de la cantidad de guano incorporada se
convierte en humus. Si aplica 10 kilos de guano al suelo, obtiene 1 kilo de humus.
Aumentar el nivel de materia orgánica de un suelo exige tiempo, se hace poco a poco, de
la noche a la mañana no se puede pasar de un 1% de humus al 2%; esto se consigue a lo
largo de una serie de años.
Las características estructurales se refieren a la capacidad de retención de agua,
aireación, drenaje y compactación del suelo. Un sustrato con características físicas o
estructurales adecuadas a los requerimientos de las plantas favorecerá el desarrollo
radicular de las mismas, logrando una agricultura más sustentable y un entorno más
embellecido y dinámico.
PRINCIPALES ENMIENDAS ORGANICAS USADAS EN EL SUELO
Tierra de Hoja de Litre:
Sustrato que aporta materia orgánica al suelo, mejora sus características de textura y
aireación. Puede ser usada para la siembra de prados, macizos, jardín, maceteros,
plantación de ornamentales, etc. Puede ser usada sola o mezclada con Turba y Arena:
mezcle en forma uniforme una parte de Tierra de Litre, una parte de Arena de Lampa y
una parte de Humus.
Tierra de Hoja Reforzada:
Es tierra de hoja especialmente seleccionada, reforzada con Turba, lo que mejora la
capacidad de retención de agua. Se recomienda para ser usado en forma directa en
trasplantes, almácigos y para renovación de suelos en plantaciones frutales.
6. Tierra Ácida:
Sustrato especialmente elaborado para cumplir con las necesidades de las plantas de flor,
ornamentales y frutales que requieren suelos ácidos. Ha sido preparada con la mejor
Tierra de Hoja mezclada con productos que aumentan la acidez del suelo
equilibradamente.
Tierra Biológica Compost:
El compost es un producto natural obtenido del proceso de la descomposición de residuos
orgánicos. Mejora las características físico – químicas y la estructura del suelo. Aporta
materia orgánica y nutriente. Su uso es ideal en frutales, para la siembra de hortalizas, y
ornamentales en general.
Arena de tranques y canales:
Material inerte seleccionado a través de procesos de limpieza y purificación que ayuda a
mejorar las condiciones físicas del suelo, mejorando así la aireación, drenaje (mejora
infiltración) y crecimiento de las raíces. Puede ser utilizada solo o mezclada con diferentes
tipos de enmiendas orgánicas. Permite un adecuado crecimiento de las raíces, además
de mejorar en forma importante la absorción de los diversos nutrientes del suelo.
Humus de Lombriz:
Abono biológico que proviene de la actividad de lombrices sobre material vegetal de
desecho. Aporta materia orgánica, nutrientes (nitrógeno, fósforo, potasio y micro
elementos en forma natural). Mejora la retención de humedad, la aireación y cohesión de
las partículas del suelo, mejorando su estructura. Además, favorece la actividad biológica
y protege a las plantas de los hongos y las bacterias perjudiciales. El humus puede ser
aplicado en toda época del año. No es fototóxico para los vegetales, por lo cual puede
aumentar las dosis recomendadas.
Guano desinfectado:
Abono natural esterilizado, por lo que está libre de malezas, insectos y enfermedades.
Aporta materia orgánica y elementos minerales como, nitrógeno amoniacal, fósforo, de
potasio, magnesio y elementos menores al suelo. Favorece la aireación y retención de
humedad, mejorando sus características físico – químicas. Además, estimula la actividad
biológica de diversos organismos y microorganismos, los cuales descomponen la materia
orgánica y contribuyen al proceso de liberación y retención de nutrientes.
Idealmente compostar el guano (de cabra) durante 3 a 4 meses antes de aplicar. Evitar
su uso en plantas nuevas. En vides se puede aplicar fresco en invierno.
Turba:
Material vegetal que aumenta principalmente la retención de agua y aireación del suelo,
contiene una gran cantidad de materia orgánica. No requiere ser desinfectada ya que, por
su pureza, no contiene insectos y/o agentes patógenos. La turba es ideal para hortalizas,
almácigos, frutales y chacras
7. COMPOSTAJE Y LOMBRICULTURA: APORTE ECOLOGICO, NATURAL Y SIN
COSTO.
Considerando que en la actualidad el recurso hídrico es escaso y que cualquier práctica
de manejo que se mejore irá en directo beneficio del cultivo, es que a continuación se
analiza la factibilidad de mejorar el suelo con materia orgánica, como una forma de
optimizar el uso del agua entre otras variables beneficiosas.
En el capítulo anterior se presentaron algunas formas de enmiendas orgánicas, acá
desarrollaremos dos de esas enmiendas: el compostaje y la lombricultura.
EL COMPOSTAJE
El compostaje es el proceso biológico aeróbico, mediante el cual los microorganismos
actúan sobre la materia rápidamente biodegradable (restos de cosecha, excrementos de
animales y residuos urbanos) y se puede definir como el resultado de un proceso de
humificación de la materia orgánica, bajo condiciones controladas y en ausencia de suelo.
El compost es un nutriente para el suelo que mejora la estructura y ayuda a reducir la
erosión y mejora a la absorción de agua y nutrientes por parte de las plantas.
Mejora las propiedades físicas del suelo. La materia orgánica favorece la estabilidad de
la estructura de los agregados del suelo agrícola, reduce la densidad aparente,
aumenta la porosidad y permeabilidad, y aumenta su capacidad de retención de agua
en el suelo. Se obtienen suelos más esponjosos y con mayor retención de agua.
Mejora las propiedades químicas. Aumenta el contenido en macronutrientes N, P,K, y
micronutrientes, la capacidad de intercambio catiónico (C.I.C.) y es fuente y almacén
de nutrientes para los cultivos.
Mejora la actividad biológica del suelo. Actúa como soporte y alimento de los
microorganismos ya que viven a expensas del humus y contribuyen a su
mineralización.
La población microbiana es un indicador de la fertilidad del suelo.
Para la elaboración del compost se puede emplear cualquier materia orgánica, con la
condición de que no se encuentre contaminada. Generalmente estas materias primas
proceden de:
Restos de cosechas. Pueden emplearse para hacer compost o como acolchado. Los
restos vegetales jóvenes como hojas, frutos, tubérculos, etc, son ricos en nitrógeno y
pobres en carbono. Los restos vegetales más adultos como troncos, ramas, tallos, etc
son menos ricos en nitrógeno.
Abonos verdes, siegas de césped, malas hierbas, etc.
Los restos de poda de los frutales. Es preciso triturarlas antes de su incorporación al
compost, ya que con trozos grandes el tiempo de descomposición se alarga.
Hojas. Pueden tardar de 6 meses a dos años en descomponerse, por lo que se
recomienda mezclarlas en pequeñas cantidades con otros materiales.
8. Desechos caseros. Se refiere a todos aquellos restos orgánicos procedentes de las
cocinas como pueden ser restos de fruta y hortalizas, restos de animales de
mataderos, etc.
Guano animal. Destaca el estiércol de vaca, aunque hay otros de gran interés como
caprino, estiércol de caballo, de oveja etc...
Complementos minerales. Son necesarios para corregir las carencias de ciertas tierras.
Destacan las enmiendas calizas y magnésicas, los fosfatos naturales, las rocas ricas
en potasio y oligoelementos y las rocas silíceas trituradas en polvo.
Plantas marinas. Anualmente se recogen en las playas grandes cantidades de
fanerógamas marinas como Posidonia oceánica, que pueden emplearse como materia
prima para la fabricación de compost ya que son compuestos ricos en N, P, C,
oligoelementos y biocompuestos cuyo aprovechamiento en agricultura como fertilizante
verde puede ser de gran interés.
Algas. También pueden emplearse numerosas especies de algas marinas, ricas en
agentes antibacterianos y anti fúngicos y fertilizantes para la fabricación de compost.
El proceso de compostaje se basa en la actividad de microorganismos que viven en el
entorno, son los responsables de la descomposición de la materia orgánica. Para que
estos microorganismos puedan vivir y desarrollar la actividad de compostaje se necesitan
unas condiciones óptimas de temperatura, humedad y oxigenación, además de otros
factores.
Los factores más importantes son:
Temperatura. Se consideran óptimas las temperaturas de 35 a 55ºC para conseguir
la eliminación de patógenos, parásitos y semillas de malas hierbas. A temperaturas
muy altas, muchos microorganismos beneficiosos para el proceso mueren y otros no
actúan al estar encapsulados.
.
Humedad. En el proceso de compostaje es importante que la humedad alcance unos
niveles óptimos del 40-60 %. Si el contenido en humedad es mayor, el agua ocupará
todos los poros y por lo tanto el proceso se volvería anaeróbico, es decir se produciría
una putrefacción de la materia orgánica. Si la humedad es excesivamente baja se
disminuye la actividad de los microorganismos y el proceso es más lento. El contenido
de humedad dependerá de las materias primas empleadas. Para materiales fibrosos o
residuos forestales gruesos la humedad máxima permisible es del 75-85 % mientras
que, para material vegetal fresco, ésta oscila entre 50-60%.
pH. Influye en el proceso debido a su acción sobre microorganismos. En general los
hongos toleran un margen de pH entre 5-8, mientras que las bacterias tienen menor
capacidad de tolerancia ( pH= 6-7,5 )
Oxígeno. El compostaje es un proceso aeróbico, por lo que la presencia de oxígeno
es esencial. La concentración de oxígeno dependerá del tipo de material, textura,
humedad, frecuencia de volteo y de la presencia o ausencia de aireación forzada.
Relación C/N equilibrada. El carbono y el nitrógeno son los dos constituyentes
básicos de la materia orgánica. Por ello para obtener un compost de buena calidad es
importante que exista una relación equilibrada entre ambos elementos. Teóricamente
una relación C/N de 25-35 es la adecuada, pero ésta variará en función de las materias
9. primas que conforman el compost. Si la relación C/N es muy elevada, disminuye la
actividad biológica. Una relación C/N muy baja afecta al proceso de compostaje,
perdiendo el exceso de nitrógeno en forma de amoniaco. Es importante realizar una
mezcla adecuada de los distintos residuos con diferentes relaciones C/N para obtener
un compost equilibrado. Los materiales orgánicos ricos en carbono y pobres en
nitrógeno son la paja de cebada, trigo, avena, el heno seco, las hojas, las ramas, la
turba y el aserrín. Los pobres en carbono y ricos en nitrógeno son los vegetales
jóvenes, las deyecciones de animales y los residuos de matadero.
COMO PRODUCIR COMPOST
Compostaje en montón: Es la técnica más conocida y se basa en la construcción de un
montón formado por las diferentes materias primas, y en el que es importante:
Realizar una mezcla correcta, es decir, los materiales deben estar bien mezclados y
homogeneizados, por lo que se recomienda una trituración previa de los restos de
cosecha leñosos, ya que la rapidez de formación del compost es inversamente
proporcional al tamaño de los materiales.
Es importante que la relación C/N esté equilibrada, ya que una relación elevada retrasa la
velocidad de humificación y un exceso de N ocasiona fermentaciones no deseables. La
mezcla debe ser rica en celulosa, lignina (restos de poda, pajas y hojas muertas) y en
azúcares (hierba verde, restos de hortalizas y orujos de frutas). El nitrógeno será aportado
por el estiércol, el purín, las leguminosas verdes y los restos de animales de mataderos.
Mezclaremos de manera tan homogénea como sea posibles materiales pobres y ricos en
nitrógeno, y materiales secos y húmedos.
Formar el montón con las proporciones convenientes: es decir, el montón debe tener
el suficiente volumen para conseguir un adecuado equilibrio entre humedad y aireación y
deber estar en contacto directo con el suelo. Para ello se intercalarán entre los materiales
vegetales algunas capas de suelo fértil.
La ubicación del montón dependerá de las condiciones climáticas de cada lugar y del
momento del año en que se elabore. En climas fríos y húmedos conviene situarlo al sol y
al abrigo del viento, protegiéndolo de la lluvia con una lámina de plástico o similar que
permita la oxigenación. En zonas más calurosas conviene situarlo a la sombra durante los
meses de verano.
Se recomienda la construcción de montones alargados, de sección triangular o
trapezoidal, con una altura de 1,5 metros, con una anchura de base no superior a su
altura. Es importante intercalar cada 20-30 cm de altura una fina capa de de 2-3 cm de
espesor de compost maduro o de estiércol para la facilitar la colonización del montón por
parte de los microorganismos.
Manejo adecuado del montón: una vez formado el montón es importante realizar un
manejo adecuado del mismo, ya que de él dependerá la calidad final del compost. El
montón debe airearse frecuentemente para favorecer la actividad de la oxidasa por parte
de los microorganismos descomponedores. El volteo de la pila es la forma más rápida y
económica de garantizar la presencia de oxígeno en el proceso de compostaje, además
10. de homogeneizar la mezcla e intentar que todas las zonas de la pila tengan una
temperatura uniforme. La humedad debe mantenerse entre el 40 y 60%.
Si el montón está muy apelmazado, tiene demasiada agua o la mezcla no es la adecuada
se pueden producir fermentaciones indeseables que dan lugar a sustancias tóxicas para
las plantas. En general, un mantillo bien elaborado tiene un olor característico.
El manejo del montón dependerá de la estación del año, del clima y de las condiciones del
lugar. Normalmente se voltea cuando han transcurrido entre 4 y 8 semanas, repitiendo la
operación dos o tres veces cada 15 días. Así, transcurridos unos 2-3 meses obtendremos
un compost joven pero que puede emplearse semienterrado.
A continuación, se presenta la formación de cada capa de material para el montón.
Capa1: Suelo falso
En la superficie más baja se coloca una capa de ramas -normalmente de arbustos, no
muy gruesas- de unos 25 cm, las que se distribuyen de manera enmarañada para que el
fondo de la pila se transforme en una cámara de aire. De esta forma, se facilita el proceso
aerobio u oxigenación de los residuos y se evita su pudrición.
Capa 2: Guano
Sobre la cama de ramas se agrega una capa de guano. Si se usará guano puro, entonces
la capa es de 15 cm, si va mezclado con paja, entonces es de unos 20 a 25 cm. En todo
caso, el mejor guano son las heces de los caballos por su textura pastosa y semiseca.
Capa 3: Material verde
Sobre el guano, viene una capa de todo lo que es material verde: pasto que se corta,
hojas, verduras y otros residuos “frescos”.
Capa 4: Materia seca
La capa de materia fresca se debe tapar con unos 10 cm de material seco como paja,
hojas y ramitas. También se puede agregar un poco de tierra de almácigo que ya tiene
algo de población microbiana que acelera la descomposición. Una vez lista la pila, el
proceso se puede volver a repetir, excluyendo la capa de ramas inicial, hasta llegar a una
altura de 1.5 m.
A tener en cuenta
ducha).
no perder
calor.
coger un puñado de material y apretarlo con la mano, éste deberá permanecer compacto.
Si se desmenuza significa que está demasiado seco, y si se desprenden gotas de agua
que está muy húmedo.
11. Problemas y soluciones
A continuación, una lista de posibles problemas que se pueden presentar y algunas
soluciones recomendadas.
Problema Causa Solución
Olores
desagradables
Falta de oxígeno Voltear con el removedor
Compost húmedo y
oloroso
Excesiva agua
Demasiado material verde
(por ej. hierba)
Voltear favoreciendo la aireación.
Reducir la cantidad de material verde.
Añadir material seco (hojas secas,
serrín, paja)
Compost muy seco Evaporación del agua por
altas temperaturas
Regar hasta humedecer
Vectores, moscas Las larvas se alimentan de
la vegetación.
Los adultos son atraídos
por los restos de cocina
Evitar el uso de plaguicidas.
Cubrir la masa con tierra, papel, compost
viejo u hojas secas.
Enterrar los restos de cocina.
No usar restos cocidos.
La masa no se
calienta lo suficiente
La mezcla no es adecuada.
Falta material verde.
Bajas temperaturas
ambientales.
Añadir materiales ricos en nitrógeno, ej.
hierba, cortes recientes de pasto o restos de
vegetales y frutas.
Cubrir con plástico viejo o paja.
El proceso se
ralentiza en invierno
Los microorganismos se
activan con el calor.
Añadir activadores que aportan calor
(hierba, las ortigas, las algas marinas, la
orina, el estiércol de caballo,
Compostaje en silos. Esta técnica se emplea en la fabricación de compost poco
voluminosos. Los materiales se introducen en un silo vertical de unos 2 o 3 metros de
altura, redondo o cuadrado, cuyos lados están calados para permitir la aireación. El silo se
carga por la parte superior y el compost ya elaborado de descarga por una abertura que
existe debajo del silo. Si la cantidad de material es pequeña, el silo puede funcionar de
forma continua: se retira el compost maduro a la vez que se recarga el silo por la parte
superior.
Compostaje en superficie. Consiste en esparcir sobre el terreno una delgada capa de
material orgánico finamente dividido, dejándolo descomponerse y penetrar poco a poco
en el suelo. Este material sufre una descomposición aerobia y asegura la cobertura y
protección del suelo, sin embargo las pérdidas de N son mayores, pero son compensadas
por la fijación de nitrógeno atmosférico.
APLICACIONES DEL COMPOST.
Según la época en la que se aporta a la tierra y el cultivo, pueden encontrase dos tipos de
compost:
Compost maduro. Es aquel que está muy descompuesto y puede utilizarse para
cualquier tipo de cultivo, pero para cantidades iguales tiene un valor fertilizante menos
elevado que el compost joven. Se emplea en aquellos cultivos que no soportan materia
orgánica fresca o poco descompuesta, como los semilleros.
Compost joven. Está poco descompuesto y se emplea en el abonado de plantas que
soportan bien este tipo de compost (patata, maíz, tomate, pepino o calabaza).
12. LOMBRICULTURA Y PRODUCCIÓN DE HUMUS
La lombricultura es criar de forma masiva, sistemática y controlada de lombrices, las que
a través de procesos metabólicos producen el humus, el cual es considerado el mejor
abono orgánico que existe. Este es básicamente el conjunto de excrementos o heces de
las lombrices, que a diferencia de otros, tiene la misma apariencia y olor a tierra negra
fresca. Es un sustrato de gran uniformidad, contenido nutricional y excelente estructura
física, porosidad, aireación, drenaje y capacidad de retención de la humedad. Al igual que
en la producción de compost, la de humus tampoco genera desperdicios, malos olores o
atracción de organismos indeseables y tampoco equipos caros ni conocimientos
profundos. Este tipo de lombrices crecen y se reproducen rápidamente, se alimentan de
materia orgánica alanzando altas densidades.
Las Lombrices
La especie más usada, y con la que se trabaja es la “Lombriz Roja” o “Californiana”, se
caracteriza por su adaptabilidad, tolerancia a los factores ambientales, potencial
reproductor y capacidad de apiñamiento.
Algunas de las características propias de esta especie son:
Es de color rojo oscuro.
Respira por medio de su piel.
Mide entre 6 y 8 cm, aunque hay algunos ejemplares que pueden llegar a medir 12 cm
de largo y entre 3 y 5 mm de diámetro.
Según las dietas puede alcanzar un peso entre 0.8 y 1.4 g.
No soporta la luz solar, si se le expone muere en pocos minutos.
Viven aproximadamente 4.5 años y pueden llegar a producir 1.300 lombrices al año.
Ellas avanzan excavando en el terreno a medida que comen y van depositando sus
eyecciones, es por lejos el mejor fertilizante que existe en la naturaleza, cuya eficacia es
muy superior a cualquier fertilizante artificial. De hecho, contienen 5 veces más nitrógeno,
7 veces más fósforo, 5 veces más potasio y 2 veces más calcio.
Las lombrices tienden a comer y desarrollarse cerca de la superficie, por ello se trabaja
en camas que son largas y poco profundas (20 cm aproximadamente). Si el recipiente
donde se cultiva es más bien profundo, se tiende a tener menos poblaciones y se
compacta el sustrato, dando lugar a poblaciones anaeróbicas, indeseables y generadoras
de malos olores. Idealmente se busca producirlo en un lugar fresco en el cual la
temperatura no oscile mayormente y exista disponibilidad de agua. La temperatura ideal
es 18° y 21°C, aunque la especie puede sobrevivir hasta los 42°C. 10 La producción de
humus requiere de condiciones un poco diferentes a las del compost, ya que las lombrices
requieren de una humedad del 80%, ph neutro (7 – 7,5) y de un sustrato rico en nutrientes
o compostado.
Preparación del Sustrato
Lo primero que hay que preparar es el sustrato; se puede utilizar compost ya maduro o
preparar uno nuevo. Si es así, hay que quitar la capa de ramas que separan la materia
orgánica del suelo. Dado que esto significa que habrá menos oxígeno, es necesario
voltear una vez por semana para que el aire penetre continuamente en la pila.
Antes de sembrar las lombrices, se realiza lo que se conoce como “Prueba de las 50
Lombrices” (PL50) que consiste colocar una base de 15 cm2 de sustrato y 50 de ellas en
13. un cajón y se cubren con una capa ligera de sustrato. Las lombrices se meten entre medio
del sustrato y comienzan a alimentarse. Al cabo de 24 horas, contamos cuántas hay, si el
número es entre 47 y 50, la prueba es positiva, si la cantidad es menor, entonces hay
problemas ya sea con el sustrato, la humedad, el Ph o la temperatura.
Producción del humus
Se usan cajones de 10 m de largo por 1.2 m de ancho, los que pueden construirse
usando tablas de madera o ladrillos. Adentro se colocan 15 cm de sustrato previamente
probado y se depositan las lombrices, luego se riega para brindarle la humedad
adecuada. Para saber si cuenta con el nivel óptimo de humedad, podemos tomar un
puñado de sustrato y lo apretamos con fuerza, si está bien debieran salir un máximo de 8
gotas de agua, si se obtienen más es porque nos pasamos en la cantidad y se puede
dejar de regar hasta que esté en su nivel adecuado.
Las lombrices se hundirán de manera natural en la tierra y empezarán a alimentarse.
Como dijimos anteriormente el proceso de volteo se realiza una vez por semana, hasta
que sea imposible distinguir los diferentes materiales que componen el sustrato.
A medida que vayan comiendo el volumen de sustrato irá bajando, por lo tanto, hay que ir
rellenando por capas de nuevo sustrato. El 80% de lo que una lombriz excreta es humus,
que es a su vez el sustrato ideal para la proliferación de microorganismos útiles, a su vez
el humus contiene nitratos y fosfatos directamente asimilables por las plantas.
El humus no se pudre, ni se fermenta, su apariencia es de color café oscuro y es inodora.
De acuerdo a los análisis químicos tiene hasta un 5% de nitrógeno, un 5% de fósforo, otro
5% de potasio, un 4% de calcio, es decir, 4 veces más nitrógeno, 25 veces más fósforo,
dos veces y media más potasio que el estiércol de vaca. Su carga bacteriana de 2 billones
por gramo y un pH entre 7 y 7,5. Su elevada solubilización se debe a su carga enzimática
y bacteriana, lo cual lo hace rápidamente asimilable por las plantas, propiciando un
aumento de porte, protección contra enfermedades y cambios bruscos de humedad y
temperatura durante su trasplante.
Cosecha del Humus
Una forma de verificar que el humus esté listo es escarbar la superficie, si no hay
lombrices, esto significa que ellas emigraron hacia el fondo buscando comida. El humus
tiene una textura más esponjosa que el sustrato inicial y es de un color entre negro y
grisáceo.
Por lo general, se deja que el lecho crezca para cosechar el humus, esto se hace
agregando más sustrato, pero en forma de “lomo de toro”, y posteriormente regando hasta
alcanzar el porcentaje de humedad requerido. En 24 horas, las lombrices subirán en
busca de este alimento. Este proceso es posible repetirlo hasta alcanzar un metro de
altura.
El proceso de cosecha es sencillo, se divide el lecho en dos partes y se deja unos 3 días
a las lombrices sin alimento y luego se les pone el alimento en la mitad del lecho. Ellas
irán rápidamente en su búsqueda, de hecho, el 50% de las lombrices llegará solo en unas
horas. No obstante, quedarán los capullos y las pequeñas lombricitas por eso es mejor
esperar un tiempo a que todas puedan llegar hasta allá, entre 24 y 48 horas.
Sin lombrices en la mitad del lecho, se procede a harnear el humus, se seca y se coloca
en sacos para su uso y su venta. Luego se repite el procedimiento a fin de obligar a las
lombrices a trasladarse esta vez a la otra mitad de la compostera, y se cosecha el humus
del otro lado. Es recomendable, dependiendo de la cantidad de lombrices que se
manejen, dividir la población entre 1 y 3 veces al año.
14. PREPARACION Y ADICION DE EXTRACTO HUMICO A TRAVES DEL RIEGO.
Dado que la mayoría de los suelos de la provincia son pobres en materia orgánica. Para
favorecer la vida en el suelo, lograr una buena aireación y favorecer el desarrollo
radicular, se recomienda la preparación de extracto húmico utilizando los siguientes
elementos y materiales:
PREPARACIÓN
Agua……………………………………………………. 1000 lts
Guano origen Animal………………………………….. 150 kg
Hidróxido de Potasio…………………………………. 25 a 30 kg.
APLICACIÓN EXTRACTO HUMICO
Tambor abonador…………………………………….. 200 lt.
Extracto Húmico………………………………………. 20 lt.
Ácido Fosfórico………………………………………….0, 2 lt.
Superficie………………………………………………. 1 ha
Preparación: Agregar agua hasta la mitad del estanque, agregar el guano, luego el
Hidróxido de Potasio, completar con agua hasta alcanzar los 1000 lt., durante 10 a 12
días agitar 3 a 4 veces por día, una vez diluido el guano filtrar y almacenar en bidones o
tambores plásticos.
Una vez preparado el Extracto Húmico, aplicar en cada riego en dosis de 20 litros por
hectáreas, inyectado a través del sistema de riego, procurando no aplicar en la última
media hora del riego, para que el producto alcance a salir de las tuberías. Procediendo a
realizar la aplicación del extracto húmico la siguiente forma
Agregar agua hasta la mitad del tambor abonador, agregar en forma suave y constante el
ácido fosfórico, agitar y posteriormente adicional el agua restante y los 20 lt, de extracto
húmico, agitar bien y proceder a inyectar a través del sistema de riego.
15. EFECTOS DE LAS ENMIENDAS ORGÁNICAS SOBRE LA PRODUCTIVIDAD DEL
SUELO
Efectos Físicos Efectos Químico Efectos Biológicos
Mejoramiento de la estructura
del suelo.
Aumento de la aireación del
suelo.
Disminución de impedancia
mecánica para el crecimiento
de raíces.
Mejoramiento de la retención
de humedad aprovechable.
Mejoramiento del balance
oxígeno/agua en el suelo.
Incremento del régimen
térmico del suelo.
Incremento de la Capacidad
de intercambio catiónico, CIC.
Controla acidez y basicidad
por mejoramiento del poder
tampón.
Permite la formación de
quelatos y complejos que
favorecen disponibilidad de
micro nutriente.
Frente a la adición de
contaminantes actúa como
depurador del medio.
Proporciona energía y
nutrientes para la microflora
del suelo.
Promueve un incremento y
biodiversidad de la biomasa
microbiana.
Posee efectos antibióticos
sobre patógenos. (Hongos,
bacterias, nemátodos)
La mayor actividad biológica
en el suelo favorece la
biodegradación de
compuestos orgánicos
exudados a nivel rizoférico.
Mejora el flujo de nutrientes
del ciclo orgánico, como N, S,
P y B.
PREPARADOS ORGANICOS CASERO PARA COMBATIR PLAGAS Y
ENFERMEDADES
Basándose en la jardinería orgánica, es posible confeccionar diferentes preparados en
forma casera para erradicar enfermedades y plagas de las orquídeas:
Purín de ortigas: Se hace dejando reposar en medio litro de agua dos o tres puñados de
ortigas, durante cuatro o cinco días. Luego se hace una disolución de una parte del purín
con diez partes de agua y se aplica. Este purín de ortigas combate pulgones, y el té de
hojas de ortigas se utiliza como fertilizante por su alto contenido en Nitrógeno.
Infusión de ajo: Se hace dejando remojar dientes de ajo durante 24 horas, luego la
preparación se cocina durante veinte minutos a fuego lento, se deja enfriar y se aplica. Se
utiliza para ahuyentar pulgones. Para combatir las hormigas, se aconseja regar durante
varios días con esta solución en agua tibia los lugares frecuentados por las hormigas.
Infusión de cáscara de cebolla: Se separan las cáscaras de dos o tres cebollas a las
que se les agrega un litro de agua caliente. Se deja reposar durante 24 horas y se aplica
para ahuyentar pulgones y controlar hongos.
Infusión de tabaco: Juntar varias colillas de cigarrillos sin ceniza y verter sobre ellas un
litro de agua. Dejar que salga la nicotina y se mezcle con el agua. Filtrar al día siguiente y
aplicar. Se usa para combatir pulgones y cochinillas pasándola por hojas afectadas con
un algodón embebido en el agua de nicotina. También se puede agregar una cucharada
sopera de jabon blanco rallado. Este preparado también combate la araña roja.
16. Polvo de hornear: Se mezcla una cucharada de polvo de hornear con un litro de agua y
se agrega ralladura de jabón blanco. Este preparado sirve para combatir pulgones,
cochinillas y oídio. El tratamiento se realiza durante tres meses, repitiéndolo cada siete
días. A la preparación se le pueden agregar 60 grs. de tabaco con dos cucharadas de
jabón blanco y usarlo como preventivo.
Alcohol de ajo: Se colocan seis dientes de ajo en la licuadora con medio litro de alcohol
fino y medio litro de agua. Licuar tres minutos. Colarlo a través de una tela y envasar en
una botella tapada la cual se coloca en el refrigerador, pues el frío potencia el efecto de
insecticida del ajo. Para usarlo como curativo contra pulgones y hormigas, pulverizar las
plantas y sustrato. Hay que realizar varias aplicaciones. También a esta preparación se le
puede agregar ralladura de jabón blanco.
Control orgánico de plagas
Aquí se detallan algunos tratamientos para determinadas plagas, con elementos al
alcance de todos los productores.
Babosas, caracoles y bichos bolita: Estas plagas se eliminan con cerveza. Se debe
enterrar a ras del suelo tapas de frasco de café o latas cortadas por la mitad llenas de
cerveza. Los caracoles, las babosas y los bichos bolita, atraídos por el fuerte olor, caen en
la cerveza. También se pueden usar hojas de repollo esparcidas en el lugar donde
habitan estos insectos. Se coloca la hoja de repollo con un ladrillo encima, y se levanta
diariamente para ir eliminando los animales.
Hormigas: Para controlar hormigas, machacar y macerar durante quince días frutos del
paraíso. El resultado es un fermento que, aplicado al suelo, es repelente de hormigas. Se
debe mantener alejado de los niños. También se puede mezclar pimienta blanca y agua
en partes iguales, y pulverizar la mezcla o pintar los troncos de las plantas. Otra solución
es hacer una infusión de 300 grs. de hojas frescas de lavanda con un litro de agua.
También se puede realizar un purín de hojas de roble y pulverizar sobre las plantas
atacadas.
Gusanos, orugas cortadoras y mosca blanca: Para controlarlas, se pican 90 grs. de ajo
más dos cucharadas de aceite mineral y se deja reposar durante 24 horas. Luego se
agrega medio litro de agua y ralladura de jabón blanco. Se mezcla bien y se aplica.