La carne puede formar parte de una dieta equilibrada al aportar nutrientes esenciales como proteínas de alta calidad, minerales y vitaminas como el hierro y la B12. La carne se compone principalmente de agua, proteínas, grasas y minerales. Las principales fuentes de carne son el ganado vacuno, los cerdos, las aves de corral y en menor medida otros animales como ovejas, cabras y caza.