Los Nueve Principios del Desempeño de la Sostenibilidad
Evangelios Apócrifos Felix y Yaneth.docx
1. Evangelios Apócrifos
Los evangelios apócrifos son textos, en su mayoría fragmentarios, que narran
hechos de la historia de Jesús y de las personas que lo rodeaban, pero que no han
sido aceptados como canónicos por el magisterio de la Iglesia. Estos textos fueron
producidos después de la época apostólica, es decir, en las décadas posteriores
a la predicación de los apóstoles y al nacimiento de las primeras comunidades
cristianas, probablemente por la necesidad de enriquecer las enseñanzas cristianas
con información y explicaciones adicionales.
Se cree que los apócrifos se escribieron a partir del siglo II d.C. y por lo tanto en un
momento muy posterior a la predicación de los apóstoles. En el caso de los
cánones, en cambio, los tres evangelios sinópticos están todos fechados en la
segunda mitad del siglo I y el evangelio de Juan, el más reciente, entre el 95 y el
110 d.C
En algunos casos, los evangelios apócrifos nacieron por influencia de otras
corrientes de pensamiento, como el gnosticismo, consideradas posiciones
heréticas que no están en línea con la enseñanza de la Iglesia.
Los apócrifos se clasifican en diferentes grupos:
Evangelios de la infancia: se centran en el período de la infancia de Jesús y
las figuras de María y José
Evangelios judeocristianos: se inspiran en el judaísmo tardío en la
interpretación de la vida de Jesús
Evangelios gnósticos: están influenciados por la corriente del gnosticismo
Evangelios de la Pasión: se centran en la Pasión de Cristo
Otros evangelios apócrifos, fragmentos, perdidos y homónimos
Algunos investigadores sugieren Los autores de los evangelios apócrifos
intentaron llenar con sus historias los huecos que dejaban los cuatro
evangelios aceptados por la Iglesia. Por ello abundan en datos sobre la vida
oculta de Jesús y transmiten detalles de sucesos recogidos por los evangelistas.
Por ejemplo, es en los apócrifos donde se dice que los Magos de Oriente eran reyes
y se llamaban Melchor, Gaspar y Baltasar. También el nombre de los ladrones
que son crucificados junto a Cristo: Gestas, el mal ladrón a la izquierda y Dimas , el
buen ladrón a la derecha del salvador.
Existen más de 50 evangelios apócrifos entre los que se pueden mencionar los
siguientes:
Los evangelios gnósticos:
o Evangelio de Tomás
o Evangelio de Marción
o Evangelio de María Magdalena
2. o Evangelio de Judas
o Evangelio apócrifo de Juan
o Evangelio de Valentín o Evangelio de la Verdad
o Evangelio griego de los egipcios
Los evangelios de la natividad:
o Protoevangelio de Santiago
o Evangelio del pseudo-Mateo
o Evangelio de la natividad de María
o Otros apócrifos
Los evangelios de la infancia:
o Evangelios de la infancia de Tomás
o Evangelio árabe de la infancia
o Historia de José el Carpintero
o Evangelio armenio de la infancia
Los evangelios de pasión y resurrección:
o Evangelio de Pedro (fragm. de Akhmim)
o Evangelio de Nicodemo, también llamado «Hechos de Pilatos» (Acta
Pilati) y Escritos complementarios
o Evangelio de Bartolomé
Otros evangelios apócrifos:
o Evangelio secreto de Marcos
o Evangelio del Pseudo-Santiago
o Evangelio cátaro del pseudo-Juan
o Evangelio de Bernabé
o Evangelio de Taciano
o Evangelio de los nazarenos
o Evangelio de Ammonio
o Evangelio de la Venganza del Salvador
o Evangelio de la muerte de Pilato
o Evangelio apócrifo de Galilea
Los evangelios apócrifos tocan principalmente temas relacionados con la vida
de Jesús y sus familiares o apóstoles. Por ejemplo:
La pasión de Cristo (Evangelio de Pedro).
La vida de María y José (Protoevangelio de Santiago).
La Natividad de la Virgen y sus padres Joaquín y Ana cuando estos eran
ancianos (Evangelio de Pseudo Tomás).
Los milagros de Jesús cuando era niño y la muerte de San José el padre de
Jesús (Evangelio de Pseudo Tomás).
Los Reyes magos (Apócrifos de árabes).
La muerte y asunción de la Virgen María (Libro del reposo).
3. A continuación algunos resúmenes de estos evangelios.
El Evangelio de María Magdalena: este texto apócrifo fue encontrado
incompleto y fue escrito en el siglo II d.C. En su historia María Magdalena
es la discípula preferida de Jesús. Este texto fue muy cuestionado por la
Iglesia cristiana y usado por algunos gnósticos para generar algunas teorías
sobre la descendencia de Jesús.
El Evangelio de Tomás: en 1945 fue descubierto en la Biblioteca de Nag
Hammadi este evangelio apócrifo. El texto contiene ciento catorce dichos
introducidos por la frase “Jesús dijo”. Estos dichos no siempre guardan
relación unos con otros. Actualmente existen muchas dudas acerca de su
fecha de elaboración de este libro. Algunos de los dichos del evangelio de
Tomás que se asemejan a los de los evangelios canónicos de Marcos,
Mateo, Lucas y Juan.
El Evangelio de Judas: el Evangelio de Judas ha sido datado entre los
años 220 y 340; y es considerado uno de los hallazgos de Nag Hammadi.
Este texto era utilizado por una secta gnóstica llamada los Cainitas y está
compuesto por tres obras escritas en doscientas cincuenta líneas, muy
distintas a los largos relatos de los evangelios canónicos. Las historias
presentes en este evangelio apócrifo son: El primer Apocalipsis de
Santiago, La Epístola a Felipe y un texto llamado Libro de Alógene.
Los que hablan del nacimiento de Jesús.
Protoevangelio de Santiago
Autor: Desconocido.
Fecha probable de composición: Quizá de mediados del siglo II. En cualquier
caso, anterior al siglo IV.
Lugar de composición: Desconocido.
Lengua original: Griego.
Fuentes: Unos 20 manuscritos medievales, del siglo XII en adelante.
Este apócrifo es uno de los más antiguos y origen de una tradición legendaria
recogida por otros apócrifos de la infancia de Jesús. Su presunto autor según el
texto sería Santiago, el «hermano del Señor», que lo habría escrito en el desierto,
pero la noticia es inverosímil. La repercusión de este apócrifo en las leyendas
populares cristianas e incluso en la teología fue enorme.
En este apócrifo podemos encontrar entre otras cosas que:
… los padres de María, llamados Ana y Joaquín, no podían tener hijos hasta
que un ángel les anunció el milagro…
4. 4:1 He aquí que un ángel del Señor se le presentó y le dijo: «Ana, Ana, el Señor ha
escuchado tu plegaria. Concebirás y darás a luz, y se hablará de tu descendencia
en toda la tierra». Dijo Ana: «Vive el Señor, mi Dios, si engendro varón o hembra lo
presentaré como ofrenda al Señor mi Dios, y estará prestándole servicio todos los
días de su vida». 2 Llegaron dos mensajeros diciéndole: «Joaquín, tu marido, viene
con sus rebaños». Pues un ángel del Señor bajó hasta él y le dijo: «Joaquín,
Joaquín, el Señor Dios ha escuchado tu plegaria. Baja de aquí, pues he aquí que
Ana, tu mujer, va a concebir en su vientre».
… José era ya anciano, viudo, y tenía hijos antes de casarse con María.
9:2 Respondió José: «Tengo hijos y soy anciano, mientras ella es una jovencita; no
vaya a convertirme en motivo de risa ante los hijos de Israel».
… que Jesús nació en una cueva:
18:1 Encontró allí una cueva y la introdujo en ella. Dejó junto a María a sus hijos, y
él salió a buscar una comadrona hebrea por la región de Belén.
Evangelio del Pseudo Mateo
Autor: Desconocido.
Fecha probable de composición: Base del relato anterior al 200. Texto actual del
siglo: VI.
Lugar de composición: Desconocido.
Lengua original: Griego.
Fuentes: Traducción latina, probablemente del siglo VI, conservada en un
manuscrito del siglo XIV.
Las leyendas de este evangelio tuvieron gran influencia en la tradición cristiana.
Obras de literatura, el arte en sus aspectos de la pintura y la escultura, libros de
devoción y hasta las reflexiones de grandes místicos fueron sensibles a ellas.
Este evangelio apócrifo menciona que José era anciano y tenía hijos antes
de desposarse con María…
8:4 Entonces todo el pueblo felicitaba al anciano diciendo: «Has logrado la felicidad
en tu ancianidad, porque Dios ha manifestado que eres el idóneo para recibir a
María». Pues los sacerdotes le decían: «Recíbela, porque de toda la tribu de Judá
tú eres el único elegido por Dios». Entonces José, postrándose con humildad,
comenzó a rogarles diciendo con vergüenza: «Soy anciano y ya tengo hijos, ¿por
qué me confiáis esta jovencita?».
… también afirma que María dio a luz en una cueva, entre prodigios y
señales…
5. 13:1 Sucedió que, pasado algún tiempo, un edicto publicado del César Augusto
ordenaba que todo el mundo fuera a empadronarse a su propia patria. Este
empadronamiento fue ejecutado por el gobernador de Siria Cirino. Se vio, pues,
José en la necesidad de trasladarse a Belén con María, porque procedía de allí, y
María era
de la tribu de Judá y de la casa y de la patria de David. Cuando José y María iban
por el camino que lleva a Belén, dijo María a José: «Veo a dos pueblos ante mí, a
uno que llora y a otro que se alegra». José le respondió: «Estate sentada, sujétate
bien en el jumento y no digas palabras inútiles». Entonces apareció ante ellos un
joven hermoso, vestido con espléndidas vestiduras, que dijo a José: «¿Por qué has
dicho que son superfluas las
palabras sobre los dos pueblos de que ha hablado María? Pues ha visto al pueblo
judío que lloraba, porque se ha apartado de su Dios, y ha visto al pueblo de los
gentiles alegrarse porque se ha acercado y se ha colocado cerca del Señor. Es lo
que prometió a nuestros padres Abrahán, Isaac y Jacob. Porque ha llegado el
tiempo en que por la descendencia de Abrahán serán benditas todas las gentes». 2
Dicho esto, el ángel mandó detenerse al jumento porque había llegado el momento
del parto. Y ordenó a María que bajara de la cabalgadura y entrara en una cueva
subterránea en la que nunca había habido luz, sino siempre tinieblas, porque no
entraba en absoluto la luz del día. Pero, al entrar María, empezó toda la cueva a
llenarse de resplandor, y como si dentro estuviese el sol, toda mostraba un fulgor
luminoso. Como si allí fuera el mediodía, una luz divina iluminaba la cueva. Y ni de
día ni de noche faltó la luz divina mientras estuvo dentro María. Fue allí donde dio
a luz un niño, a quien rodearon los ángeles en el momento de nacer, y una vez
nacido lo adoraron diciendo: «Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz a los
hombres del beneplácito divino».
… Jesús en el establo, el buey y el asno…
14:1 A los tres días del nacimiento del Señor, salió María de la cueva y entró en un
establo. Colocó al niño en un pesebre, y un buey y un asno lo adoraron. Entonces
se cumplió lo anunciado en la profecía de Isaías: «Conoció el buey a su dueño, y el
asno el pesebre de su señor» (Is 1, 3). Y es que los mismos animales, situados a
su lado, lo adoraban sin cesar. Así se cumplió lo dicho en la profecía de Habacuc:
«En medio de dos animales te darás a conocer». En aquel mismo lugar
permanecieron José y María con el niño durante tres días.
… los magos de oriente, después de dos años…
16:1 Pasados dos años, llegaron a Jerusalén unos magos de Oriente portando
grandes regalos. Preguntaron insistentemente a los judíos diciendo: «¿Dónde está
el rey que os ha nacido? Pues hemos visto su estrella en Oriente y venimos a
adorarlo».
16:2 Cuando los magos iban de camino, se les apareció la estrella, y como si les
hiciera de guía, así les precedía hasta que llegaron al lugar donde estaba el niño.
Los magos, al ver la estrella, se alegraron con un grandísimo gozo. Entraron en la
6. casa y hallaron al niño Jesús sentado en el regazo de su madre. Entonces abrieron
sus tesoros y obsequiaron a María y a José con grandes regalos. Luego cada uno
ofreció al Niño una moneda de oro. A continuación uno le ofreció oro, otro incienso
y el otro mirra. Y como estaban dispuestos a volver al rey Herodes, recibieron en
sueños un aviso de un ángel para que no lo hicieran. Pero ellos, después de adorar
gozosamente al niño, regresaron a su tierra por otro camino.
Libro sobre la natividad de María
Autor: Desconocido.
Fecha probable de composición: Siglo IX.
Lugar de composición: Desconocido.
Lengua original: Griego.
Fuentes: Traducción latina conservada en manuscritos medievales posteriores al
siglo X.
El apócrifo sobre la natividad de la Virgen María es un resumen del Pseudo Mateo,
atribuido durante mucho tiempo a san Jerónimo. La Patrología Latina de Migne lo
sigue incluyendo entre las obras de este. La carta presuntamente dirigida por san
Jerónimo a los obispos Cromacio y Heliodoro, que figura como prefacio del
Pseudo Mateo, explica la insistencia de esta atribución. La época probable de su
composición, el siglo IX, es muy ajena en contenido y forma a la de san Jerónimo.
Aunque este escrito se esfuerza por exaltar a María…
1:1 La bienaventurada y gloriosa siempre virgen María, descendiente de estirpe
regia y de la familia de David, nació en la ciudad de Nazaret y fue educada en
Jerusalén, en el templo del Señor. Su padre se llamaba Joaquín, y su madre, Ana.
Su familia paterna era de Galilea, de la ciudad de Nazaret, pero su linaje materno
era de Belén.
Libro sobre la infancia del Salvador
Autor: Desconocido.
Fecha probable de composición: Hacia el siglo IX.
Lugar de composición: Desconocido.
Lengua original: Latín, sobre materiales en lengua griega.
Fuentes: Manuscritos de los siglos XIII y XIV.
La notable semejanza entre este apócrifo y el Pseudo Mateo ha hecho surgir la
disputa sobre su relación y eventual prioridad, cuestión aún no resuelta. El estilo
dista mucho del ingenuo y simple de los evangelios apócrifos más antiguos. El autor
recoge los datos ya conocidos, los amplía y los reelabora hasta darles un carácter
elegante y distinguido. La presentación del nacimiento de Jesús ofrece detalles
nuevos que, en opinión de M. R. James, dependían del antiquísimo Evangelio de
Pedro, del siglo II. A este evangelio deben atribuirse, según algunos autores, ciertas
expresiones de carácter doceta [el docetismo negaba que Cristo tuviese un cuerpo
de carne, afirmaba que el cuerpo del Señor era una apariencia, pero no carne real],
7. como el hecho de que el recién nacido no tenía peso ninguno y de que el niño fuera
una especie de condensación de la luz. El autor refleja la reacción de la piedad
popular frente a la creencia en la divinidad del Jesús recién nacido. Todo lo material
es ajeno a la trascendencia de un ser de naturaleza divina. Esta realidad impone un
desarrollo de los hechos totalmente alejado de las costumbres humanas. Todo
queda más allá de la capacidad y la comprensión de la mente humana.
62. José se adelantó para llegar a la ciudad. Dejó a María con su hijo Simeón [hijo
de José], porque estaba encinta y caminaba más despacio… 63. Haciendo un
recorrido, vio un establo solitario y se dijo: «Debo detenerme en este lugar, porque
me parece albergue de peregrinos. Y aquí no tengo ni hospedaje ni posada donde
podamos descansar». E inspeccionándolo, dijo: «La habitación es pequeña, pero
idónea para unos pobres, especialmente porque está apartada del griterío de la
gente, como para no poder molestar a una mujer en trance de parto. Por lo tanto,
es necesario que descanse en este lugar con todos los míos».
65. Dijo entonces José a María: «Hijita mía, has sufrido muchas molestias por mi
causa. Entra, pues, y ocúpate de ti. Y tú, Simeón, trae agua y lava sus pies, dale
comida, y si tiene necesidad de alguna otra cosa, haz lo que su alma desea».
Simeón hizo lo que su padre le había mandado y la condujo a la gruta, que con la
entrada de María comenzó a tener luz solar, y se iluminó como si fuera mediodía.
Aquí comienza el relato de la comadrona (partera), y la influencia doceta en
el relato.
73. » Cuando se acercó la hora, apareció abiertamente el poder de Dios. La
doncella estaba mirando fijamente al cielo convertida en viña, pues ya estaba para
cumplirse el término de los bienes. Y en cuanto apareció la luz, adoró al que vio que
había alumbrado. El niño despedía resplandores a la manera del sol. Estaba
totalmente limpio, y era agradabilísimo de ver, pues solo él apareció como la paz
que apacigua el mundo entero. En la misma hora en que nació, se oyó la voz de
muchos seres invisibles que decían a la vez: “Amén”. La luz que había nacido se
multiplicó, y con la claridad de su resplandor oscureció la luz del sol. Aquella cueva
quedó repleta de una luz clara y de un perfume suavísimo. Ahora bien, esta luz
nació lo mismo que el rocío que desciende del cielo a la tierra. Pues su perfume
supera el de todos los ungüentos.
74. » Yo quedé estupefacta y llena de admiración; y el temor se apoderó de mí.
Pues tenía la mirada fija en el gran resplandor de la luz que había nacido. Pero
aquella luz fue poco a poco condensándose en sí misma y tomó la forma de un niño.
Y enseguida se hizo un niño como suelen ser los niños al nacer. Cobré valor, me
incliné, lo toqué y lo levanté en mis manos con gran temor. Me quedé aterrada
porque no tenía el peso propio de un recién nacido. Lo examiné y comprobé que no
había en él la más mínima mancha, sino que estaba totalmente limpio en su cuerpo
como ocurre con el rocío del Dios Altísimo. Era ligero de llevar y espléndido de ver.
Mientras estaba grandemente admirada porque no lloraba como suelen llorar los
8. recién nacidos, y mientras lo tenía en brazos con la mirada fija en su rostro, me
dedicó una gratísima sonrisa. Abrió los ojos y
los fijó en mí delicadamente. Al momento salió de sus ojos una gran luz como un
gran relámpago».
mientras de la infancia de Jesús hay muchos más evangelios apócrifos, "de la
Pasión hubo muchos menos"
El evangelio de Pedro es el texto apócrifo fundamental sobre la muerte de
Jesús, ya que hace un relato entero de la Pasión.
"Tiene grandes semejanzas con los canónicos, no está claro hasta qué punto
depende de los evangelios canónicos, muchas veces son tradiciones orales, que
recogen unos y otros y no hay una dependencia literaria inmediata", según dicen
algunos estudiosos.
Su texto fue descubierto en el siglo XIX, aunque ya se conocía su existencia por
las referencias al mismo.
Este evangelio introduce un cambio relevante con respecto a los canónicos:
culpabiliza mucho más a los judíos sobre la muerte de Jesús y prácticamente
disculpa a los romanos. En el se expresa que "El que envía a la muerte a Jesús no
es Pilato, sino Herodes, y, además, Herodes encarga a unos soldados judíos no
romanos que crucifiquen a Jesús".
Pero lo que hace más relevante a este evangelio es la narración de la resurrección
de Jesús.
"Narra la resurrección de Jesús, narra su salida del sepulcro, algo que los demás
evangelios no hacen. Los demás dicen que Jesús ha resucitado, pero el evangelio
de Pedro describe la salida"
El relato dice así:
Empero, en la noche tras la cual se abría el domingo, mientras los soldados en
facción montaban dos a dos la guardia, una gran voz se hizo oír en las alturas.
Y vieron los cielos abiertos, y que dos hombres resplandecientes de luz se
aproximaban al sepulcro.
Y la enorme piedra que se había colocado a su puerta se movió por sí misma,
poniéndose a un lado, y el sepulcro se abrió. Y los dos hombres penetraron en él.
Y, no bien hubieron visto esto, los soldados despertaron al centurión y a los
ancianos, porque ellos también hacían la guardia. Y, apenas los soldados
refirieron lo que habían presenciado, de nuevo vieron salir de la tumba a tres
hombres, y a dos de ellos sostener a uno, y a una cruz seguirlos.
Y la cabeza de los sostenedores llegaba hasta el cielo, mas la cabeza de aquel
que conducían pasaba más allá de todos los cielos.
9. Y oyeron una voz, que preguntaba en las alturas: ¿Has predicado a los que están
dormidos?
Y se escuchó venir de la cruz esta respuesta: Sí.
Hay un texto, el evangelio de Nicodemo, en el que se incluye el evangelio de
Bartolomé, que narra el descenso de Jesús a los infiernos.
En el texto, se incluye el testimonio de Leucio y Carino relatando el hecho:
Cuando estábamos con nuestros padres, colocados en el fondo de las tinieblas,
un brillo real nos iluminó de súbito, y nos vimos envueltos por un resplandor
dorado como el del sol.
Y, al contemplar esto, Adán, el padre de todo el género humano, estalló de gozo,
así como todos los patriarcas y todos los profetas, los cuales clamaron a una: Esta
luz es el autor mismo de la luz, que nos ha prometido transmitirnos una luz que no
tendrá ni desmayos ni término".
el profeta Isaías exclamó: Es la luz del Padre, el Hijo de Dios, como yo predije,
estando en tierras de vivos: en la tierra de Zabulón y en la tierra de Nephtalim.
Más allá del Jordán, el pueblo que estaba sentado en las tinieblas, vería una gran
luz, y esta luz brillaría sobre los que estaban en la región de la muerte. Y ahora ha
llegado, y ha brillado para nosotros, que en la muerte estábamos.
El infierno se entiende aquí "no como un sitio de castigo, sino como un sitio donde
estaban las almas esperando a que llegase el salvador".
En resumen Los Evangelios apócrifos aportan miradas distintas en torno a Jesús y
su prédica pero en algunos aspectos dan pie a cuestionar las bases del
cristianismo.
Bibliografía
https://historia.nationalgeographic.com.es/a/otra-vida-jesucristo-evangelios-
apocrifos_8743
https://www.holyart.es/blog/articulos-religiosos/evangelios-apocrifos-que-son-y-las-
diferencias-con-los-canonicos/
https://www.euston96.com/evangelios-apocrifos/
https://diariosdelaiglesia.wordpress.com/2019/12/22/los-evangelios-apocrifos-y-el-
nacimiento-de-jesus/
https://www.bbc.com/mundo/noticias-43512953
presentado por:
Yaneth Peñata