La Web 2.0 representa la evolución de las aplicaciones tradicionales a aplicaciones enfocadas en el usuario final que generan colaboración y servicios. Se caracteriza por fomentar la interacción entre usuarios y aplicaciones dinámicas. Algunos ejemplos que marcan la diferencia entre la Web 1.0 y 2.0 son servicios como Google AdSense versus Doubleclick y Flickr versus Ofoto. Aunque no es una tecnología en sí, se apoya en tecnologías como wikis y tags que permiten nuevas formas de publicar y compartir contenido.