Las pequeñas y medianas empresas en España se encuentran diversos obstáculos a la hora de financiarse: los trámites burocráticos, las condiciones culturales y de educación, la situación política y económica. Aun teniendo un amplio abanico de fuentes de financiación como el ICO, el capital riesgo, incluyendo a familiares y amigos, pero siguen siendo de difícil acceso para algunas PYMES o lentos procesos como la financiación bancaria.
Otro factor que parece estar a favor es la inversión extranjera en España que ha incrementado en los últimos años, pero sigue siendo una opción poco factible para las PYMES.
El Mercado Alternativo Bursátil aparece en éste contexto como una nueva oportunidad para empresas de reducida capitalización que buscan expandirse, regulaciones a medida y unos costes y procesos adaptados a sus características.
Hay que tener en cuenta que estas empresas tienen una contratación, procesos de información y comunicación diferentes, por lo que la política de comunicación AdHoc es vital.
Este mercado cuenta con más de una veintena de empresas en España, y ofrece visibilidad, notoriedad, prestigio e imagen ante los inversores, clientes, proveedores, medios y opinión pública. Su normativa es más rigurosa y exigente, lo que hace que el MAB pueda ofrecer mayores garantías.
La ejemplaridad de mercados como AIM de Reino Unido donde cotizan más de mil compañías desde 1995 nos pueden ayudar a mejorar, para no sólo basarnos en los errores que vamos cometiendo. Si mercados así han podido sobrevivir y reinventarse con el paso de los años, MAB puede también ir madurando para ofrecer a nuestras PYMES una buena oportunidad de crecimiento.
Estos mercados tienen por obligación estar controlados por un asesor registrado y con cuentas auditadas entre dos y tres años.
Al futuro del MAB le favorecen acontecimientos como la aprobación de la Ley 5/2015 del 27 de abril que fomenta la financiación empresarial. Esta medida hace más accesible y flexible la financiación bancaria a pequeñas y medianas empresas. También busca avanzar en el desarrollo de medios alternativos de financiación, sentando las bases regulatorias para fortalecer fuentes de financiación corporativa directa o financiación no bancaria en España.
Un Mercado Alternativo Bursátil más transparente y exigente
1. 66 IURIS&LEX
9 OCTUBRE 2015
T odos sabemos que muchos son los obstácu-
los en España a la hora de que las pequeñas
y medianas empresas puedan financiarse: los trá-
mites burocráticos, los condicionantes culturales y
de educación, la situación política y económica.
Aun cuando tanto particulares como empresas
puedan contar, teóricamente, con un amplio aba-
nico de fuentes de financiación como el ICO o el
capital riesgo, sin excluir la de familiares y amigos.
Pero para una pyme, en la práctica, algunas son
complicadas o de difícil acceso o, casi, impensa-
bles. Y la tradicional fuente de financiación hasta
ahora, la de la banca, es todavía muy lenta y, por
su actitud restrictiva del crédito, difícil en la actua-
lidad.
Cierto es que la inversión extranjera ha vuelto a España y ha aumentado el crédito en algu-
nas ocasiones; sin embargo, existe un menor acceso a la financiación por parte de las pymes
en nuestro país, según la Comisión Europea.
En este contexto, el Mercado Alternativo Bursátil (MAB) se manifiesta como una oportunidad
importante para las empresas de reducida capitalización que buscan expandirse, contarcon una
regulación a medida diseñada específicamente para ellas y unos costes y procesos adaptados a
sus características.
Es necesario tener en cuenta que estas empresas tienen un régimen de contratación dife-
rente a las del Mercado Continuo, igual que los procesos de información y de comunicación han
de ser diferentes. Por ello, contar con una política de comunicación ad hoc de sus singularida-
des se hace imprescindible.
Este mercado, que cuenta en España con una veintena de empresas cotizando, les ofrece
notoriedad y visibilidad, prestigio e imagen de marca ante los inversores, clientes, proveedores,
medios de comunicación y opinión pública en general.
Hemos sido testigos de cómo el descalabro de Gowex hizo temblar el mercado y algunas em-
presas, además de esta, vieron suspendida su cotización: Neuron, Bodaclick y Zinkia, y en otras
compañías sus acciones se vieron notablemente perjudicadas.
Cierto es que la normativa ha de ser más rigurosa y exigente, sobre todo en materia de con-
trol e información a los inversores, y que el MAB tiene que aplicar mayores garantías para evi-
tar casos como los comentados.
Hay que aprender de los errores, pero nos deben de servir de ejemplos mercados como el
AIM de Reino Unido, con más de mil compañías cotizando desde 1995, o el NYSE Alternext
-Francia, Benelux y Portugal- con 170 empresas desde 2005.
Si ellos han subsistido, el MAB en España tiene que madurar y hacerse fuerte para poder
seguir ofreciendo a nuestras pymes -que suponen el 99 por ciento de las empresas españo-
las, generan el 80 por ciento del empleo y suponen el 65 por ciento del PIB- una buena opor-
tunidad para crecer.
En los tres mercados tienen que contar con el
control de un asesor registrado y con cuentas au-
ditadas entre dos o tres años.
El futuro del MAB tiene que estar muy ligado a
la evolución de la regulación en relación a los úl-
timos acontecimientos citados. Y en este sentido,
resulta determinante y muy favorable la aproba-
ción de la Ley 5/2015 de 27 de abril, de Fomen-
to de la Financiación Empresarial, que tiene
como objetivos principales hacer más accesible y
flexible la financiación bancaria a las pequeñas y
medianas empresas y avanzaren el desarrollo de
medios alternativos de financiación, sentando las
bases regulatorias para fortalecer fuentes de fi-
nanciación corporativa directa o financiación no
bancaria en España.
Otra de las novedades incluidas en el Plan de
Fomento de la Financiación Empresarial relativas al Mercado Alternativo Bursátil (MAB) son la
mejora en la supervisión -se amplía la obligación de comunicar a la CNMV cualquier incumpli-
miento legal que pudiera derivarse de la información de los emisores y se exige a la entidad rec-
tora que cada tres meses reporte a la CNMV- y la posibilidad de pasar al mercado continuo con
una capitalización de 500 millones de euros.
Además, con la reforma de la Ley de Auditoría se endurecen los controles de las empresas
de mayor tamaño del MAB, que pasarán a ser consideradas de interés público.
Creo que hay que hablar de la necesidad de un
mejor tratamiento fiscal a estas inversiones, ac-
tualmente muy discriminadas frente a las de otros
mercados financieros.
Sin duda, todas estas pautas, requisitos y mo-
dificaciones deberán de tenerse muy en cuenta
a la hora de comunicar cualquier aspecto de
estas empresas acorde con un mercado que
debe ser transparente y nítido pero tremenda-
mente exigente.
El inversor tiene derecho a depositar su dinero
en una sociedad cuyas cuentas sean claras y rigu-
rosas. Por ello, el reto del comunicador debe ser
mostrar lo mejor de estas sociedades, sus fortale-
zas y perspectivas de futuro, pero asentadas
sobre realidades.
Un Mercado Alternativo Bursátil
más transparente y exigente
El MAB se manifiesta como una oportunidad importante para
las empresas de reducida capitalización que buscan expandirse
La Ley de Auditoría endurece los controles de las empresas
de mayor tamaño, que pasan a ser de ‘interés público’
POR VICTORIA MAGRO Consultoria senior de Estudio de Comunicación
Todos sabemos que muchos son los obstáculos en España a la
hora de que las pymes puedan financiarse: los trámites buro-
cráticos, los condicionantes culturales yde educación, la
situación política yeconómica. Aun cuando tanto particulares
como empresas puedan contar, teóricamente, con un amplio
abanico de fuentes de financiación como el ICO o el capital
riesgo, sin excluirla de familiares yamigos. Pero para
una pyme, en la práctica, algunas son complicadas o de
difícil acceso o, casi, impensables. Yla tradicional fuente
de financiación hasta ahora, la de la banca, es todavía
muylenta y, porsu actitud restrictiva del crédito, difícil en
la actualidad.
Creo que hayque hablarde la necesidad de un mejortrata-
miento fiscal a estas inversiones, actualmente muy
discriminadas frente a las de otros mercados financieros.
Sin duda, todas estas pautas, requisitos ymodificaciones
deberán de tenerse muyen cuenta a la hora de comunicar
cualquieraspecto de estas empresas acorde con un mercado
que debe sertransparente ynítido pero tremendamente
exigente. El inversortiene derecho a depositarsu dinero
en una sociedad cuyas cuentas sean claras yrigurosas. Por
ello, el reto del comunicadordebe sermostrarlo mejorde
estas sociedades, sus fortalezas yperspectivas de futuro
pero asentadas sobre realidades.
[A fondo]
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