1. CULTURA MAYA (YUCATÁN)
GASTRONOMÍA
ALIMENTOS MAYAS PREHISPÁNICOS: maíz, frijol, chile, calabaza, cacao y miel,
epazote, la vainilla y el achiote para condimentar. Su dieta se complementa con
diferentes carnes de mamíferos salvajes y aves como patos o chachalacas,
armadillo, liebre, venado, manatí, tortugas, jabalíes, así como peces y mariscos.
Raíces como camote, jícama. Frutos como chayote, mamey, aguacate, chirimoya,
papaya, guanábana, chicozapote, changunga, zapotes, guayaba o pitahaya. Hojas
como la chaya, la cual me encanta, y vainas como ejote.
La miel y el cacao son otros de los alimentos del mundo maya prehispánico, así
como la carne de venado, la de iguana o de tortuga (en a actualidad está prohibido
cazar tortugas). El maya antiguo domesticó la abeja, y en la actualidad siguen
cultivando una de las mejores mieles del mundo. También pescaban y se
alimentaban del mar.
El achiote es una semilla que se usa como colorante alimenticio en varios platillos
yucatecos como la cochinita pibil, plato que es parte del mestizaje de la cocina
yucateca ya que el cerdo lo traen los españoles.
Un cultivo actual en el patio de una casa maya puede tener epazote, chile
habanero, naranja agria, jitomate, plátano, ruda, chaya y rábano, y los productos
se usan como alimento y medicina.
Platillos actuales de la gastronomía maya
Los productos básicos como frijol y tortillas se sirven en casi todas las comidas.
Hay complementos típicos gastronómicos como la cebolla morada, la naranja
agria también la usan mucho al cocinar, la calabaza en muchas ocasiones servida
como ha’ sikil p’ak’, ensaladas con base de lechuga, pepino y jitomate
acompañando platos típicos. La gastronomía yucateca es rica en dulces postres:
como curiosidad verás que muchos restaurantes de la costa son los vendedores
ambulantes quienes ofrecen los postres, llegan con su bandeja de postres a las
mesas.
LUGARES TURÍSTICOS
Palacio de Cantón, un espectacular edificio renacentista italiano, que alberga al
Museo Regional con piezas arqueológicas de la cultura maya.
Zona Arqueológica de Kabah, una ciudad que fue la segunda más importante del
noreste de la Península de Yucatán, conformando la Ruta Puuc.
2. Parque y Templo de Santa Ana, modesto barrio de artesanos y jornaleros durante
la época colonial. El Parque de Santa Ana tiene una gran historia colonial.
Museo de Historia Natural, que el Ayuntamiento inauguró en julio de 1987 y fue
reinaugurado en 1995. “El Museo de Historia Natural” se localiza junto al Parque
“El Centenario”.
Izamal, Pueblo mágico de Yucatán, alberga tres construcciones piramidales de la
época maya, así como el Convento más amplio de Latinoamérica donde Juan
Pablo II ofreció una misa en 1993.
Cuzamá, se encuentra localizada en los alrededores de Mérida, en donde el agua
es transparente en tres fantásticos cenotes.
Loltún, estas grutas ubicadas a 110 kilómetros al sur de la Ciudad de Mérida,
Yucatán. “Loltún” proviene de la lengua maya Lol “flor” y Tun “piedra”- “flor de
piedra”.
La Catedral San Idelfonso de estilo renacentista, donde se encuentra el “Cristo de
la Unidad”, obra del artista español Lapayese del Río.
Chichén Itzá es uno de los principales sitios arqueológicos de la Península de
Yucatán y nombrada como una de las siete maravillas del mundo. Su nombre
deriva de las palabras mayas (Chichén) Boca del Pozo; de los (Itzá) brujos del
agua. En ésta fantástica capital del mundo maya no se puede dejar de conocer,
“El Cenote Sagrado”, “El Castillo” (Pirámide de Kukulkán) y “El Caracol” o “El
Observatorio” un verdadero símbolo astronómico maya.
Reserva de la Biósfera Celestún, increíble reserva que se extiende por Yucatán y
Campeche, a 45 minutos de Mérida, reconocida internacionalmente por ser uno de
los Top 10 de los lugares turísticos de Mérida Yucatán y refugio invernal de
centenares de flamingos y otras especies de aves.
Mérida y las playas de Yucatán son actualmente uno de los destinos favoritos para
turistas, inversionistas y jubilados nacionales y extranjeros que buscan un lugar
tranquilo con buen clima, paradisiaco, destacándose por ser uno de los lugares
más seguros con la mejor calidad de vida a un costo accesible.
COMERCIO
Los pueblos se comunicaban por medio de comerciantes ambulantes que
recorrían los caminos a pie, o por medio de verdaderos comerciantes
profesionales que trasladaban las mercancías en canoas a lo largo de la costa y a
lo largo de los ríos. El oficio a que más inclinados estaban era el de mercaderes,
3. llevando sal, ropa y esclavos a tierra de Ulúa y Tabasco, trocándolo todo por
cacao y cuentas de piedra que eran su moneda. Los comerciantes sabían de las
rutas, veredas y caminos. Conocían los productos de mayor demanda, su valor y
las áreas productoras. Podían entrar a regiones restringidas en busca de materias
primas y objetos. Esta situación se les facilitaba por hablar varias lenguas
pertenecientes a los grupos con los cuales contrataban. Los comerciantes eran
hombres cultos, con conocimiento de las condiciones geográficas, económicas,
políticas y culturales.
ARTESANÍAS
En todo Yucatán se elaboran artículos de los más diversos materiales, diseños y
colores, que además de ser útiles, aportan belleza y elegancia a nuestro entorno:
joyería de filigrana en oro y plata; artefactos de carey, concha, caracol, madera y
piedra tallada; vasijas de barro; instrumentos musicales; tejidos de fibra de
henequén y de algodón; bordados, aplicaciones de encaje, calados, y punto de
cruz; ternos, guayaberas y hamacas; sombreros de paja y de palma del jipi;
petates de junco y bejuco; bolsas y zapatos de piel.
Existen otras ramas artesanales de incipiente generación que también nos dan
muestra del gran talento artesanal de Yucatán. Destacan la pintura popular,
juguetería, reciclado y la herrería, que formó parte de la grandeza de las
edificaciones antiguas. La elaboración de objetos de papel y hoja de elote son
actividades en pleno desarrollo.
ORFEBRERÍA
Los indígenas mayas, en el período prehispánico, no conocieron el arte magnífico
de labrar los metales preciosos, debido a la carencia de dichos productos en el
territorio. Como las demás artes manuales, la platería, la escultura y la entalladura,
fueron enseñadas por los conquistadores a la clase media, formándose expertos
escultores y decoradores. Luego estos discípulos extendieron su arte hasta la
confección de alhajas, perfeccionándose en el ramo de la filigrana. Esta rama de
la orfebrería comprende la fabricación de joyas por medio de finísimos filamentos
de oro y plata. El platero, con herramientas especiales, forja, labra, pule y engarza
preciosas esferitas de encaje metálico para la confección de rosarios, así como
collares, cadenas y arracadas que han dado fama a la región.
Se fabrican dos clases de rosarios: aquellos cuyas cuentas son esferas huecas
hechas de tejido de filigrana de oro, y los que se confeccionan con cuentas de
coral. Esta primorosa alhaja es la que adorna el cuello de la mestiza actual y es
uno de sus mejores atavíos.
4. Desde la época colonial se conoció en Yucatán la industria del conchero, que era
un artesano que trabajaba y pulía el carey, materia prima extraída del caparazón
de la tortuga de carey y lo transformaban en artículos de gran belleza.
Los actuales concheros, fabrican anillos, collares, aretes, brazaletes y medallones
con incrustaciones de oro y plata y esmaltes de variados colores.
Desde la época prehispánica, los materiales de origen marino estuvieron
presentes en la cultura maya, sobre todo en los pueblos más cercanos a las
costas. Conchas y caracoles de moluscos se usaron para elaborar objetos de
adorno, rituales y de uso cotidiano. Se confeccionaban collares, pulseras, orejeras,
pectorales e instrumentos musicales como las conocidas trompetas caracol.
Con la madre-perla, llamada también concha de nácar, confeccionan botones,
pastas para devocionarios, cuentas de rosarios, aretes y otros artísticos objetos.
Con unos pequeños caracoles de forma oval se fabrican rosarios, utilizándolos
como cuentas, engarzados en filigrana, así como aretes y adornos para alhajeros.
ALFARERÍA
La alfarería comienza su desarrollo en Yucatán durante el inicio de la cultura maya
alrededor de 1200 a.C. Su elaboración es mediante el modelado directo del barro
(una mezcla de agua, barro y arena especial llamada sac-cab “tierra blanca”) con
los dedos hasta lograr crear "mágicamente" cualquier forma deseada por el
artesano.
Para la elaboración de las piezas se emplea un torno o k’abal, que consiste en una
pequeña tabla rectangular sobre la que se coloca el barro asentada sobre un disco
que se controla con los pies, para hacerla girar. Después las piezas se dejan
secar, se pulen y se colorean antes de introducirlas para su cocción en un horno
de barro, piedras y leña. Originalmente se fabricaban objetos de uso cotidiano,
recipientes para comer, cocinar, para almacenar agua, etc. También se
elaboraban objetos ceremoniales y representaciones de dioses. Actualmente se
fabrican objetos decorativos, principalmente maceteros y jarrones. Algunos
alfareros producen objetos especiales para las fiestas sobre todo para las
celebraciones de los santos difuntos o Hanal Pixan. El lugar que destaca por su
producción en alfarería es Ticul.
Madera
En Yucatán, el tallado en madera es una actividad que se remonta a la época
prehispánica, pues los antiguos mayas trabajaban la madera para proveerse de
5. instrumentos de trabajo, musicales, objetos ceremoniales y mobiliario. Es posible
que con la llegada de los españoles la habilidad de los mayas para trabajar la
madera fuese aprovechada por algunos frailes para la elaboración de imágenes
religiosas y retablos de iglesias. Fueron los frailes quienes enseñaron a los
indígenas nuevos diseños y técnicas para un mejor desempeño del trabajo con
madera.
En nuestros días, podemos decir que el tallado de madera aún persiste, se realiza
de manera artesanal con fines comerciales en tres grandes áreas: el sur, el
poniente y el oriente de Yucatán. En el área sur se incluye la villa de Muna y
localidades aledañas a los sitios arqueológicos que comprenden la Ruta Puuc; en
el poniente está Dzityá que es comisaría de la ciudad de Mérida; y en el oriente,
se encuentra Pisté, Popolá, Cuncunul, Tixhualahtún y Chemáx. Se tallan aves y
mamíferos característicos de la zona, aunque también se elabora otro tipo de
animales como elefantes y tucanes.
La materia prima para esta actividad es la madera de cedro, ya sea éste rojo o
blanco, así como las raíces jóvenes del pich o guanacastle. Otra materia prima
importante es el guayacán y el chaká.
Henequén
Desde los tiempos prehispánicos el indio yucateco con la fibra extraíada del
henequén fabricaba y tejía una gran variedad de objetos de uso personal:
cordeles, sogas, bolsas o morrales y esteras para sus lechos. Hoy se emplea
también en una vasta gama de objetos, como telas, cestos, manteles, tapetes,
hamacas, sombreros para damas, bolsas de mano, pantuflas, cigarreras,
monederos, carpetas con motivos artísticos en preciosos colores y otros objetos
primorosamente raros y de paciente labor, muy estimados por los turistas
extranjeros.
Textil bordado
6. En Yucatán una de las más importantes artesanías del estado es el bordado. En la
época de la colonia se elaboraban mantas tejidas por las indígenas, que eran
confeccionadas utilizando la técnica del telar de cintura; sin embargo las cuotas
impuestas por parte de los conquistadores de sobre explotación hicieron que esta
técnica desapareciera, generando un mestizaje de técnicas, materiales,
decoración, destacándose el bordado entre otros elementos que dieron lugar al
surgimiento del tradicional hipil, el cual es una fusión entre la vestimenta utilizada
por las mujeres mayas y los ropajes impuestos por los españolas y que hoy en día
continúa siendo la vestimenta cotidiana de gran parte de la población yucateca.
El xokbil-chuy (hilo contado) o punto de cruz es una labor que no requiere gran
arte, sino paciencia, porque la bordadora va contando tres o cuatro hilos de la
trama de algodón y cose una pequeña cruz de hilo de color, y así, fijando hileras
de cruces, forma el dibujo. Se bordan guías de flores entre verdes hojas con los
que se adornan los escotes cuadrados de los hipiles y los bordes de todo el traje.
El calado o deshilado (xmanikté) consiste en tirar de algunos hilos de la trama del
lienzo, combinando dibujos de forma cuadrangular, hasta confeccionar artísticos
calados en la tela. Con esta labor parecida al encaje y armonizada con embutidos
y randas, se forman preciosas labores para hipiles, mantillas, tocas y tapetes. Se
fabrican también corporales y ornamentos para las iglesias.
Una prenda muy utilizada por los hombres, es la típica y elegante "guayabera", la
cual es confeccionada con diversos materiales, como lino, algodón, poliéster y
combinaciones de telas, sin embargo, las hechas de lino y algodón son las que
alcanzan mayor calidad. Hay variedad de diseños, como el tipo filipina, con cuatro
o dos bolsas alforzadas al frente, o bordadas.
Hacia fines del siglo XIX esta prenda era usada por los yucatecos de clase alta,
quienes la traían directamente desde Cuba donde se elaboraba; sin embargo, al
aumentar la demanda, un grupo de visionarios yucatecos decidió fabricarla aquí.
Hamacas
7. La hamaca es una red colgante entre dos muros que sirve para dormir. Los
antiguos mayas dormían en petates (poóp) que se colocaban sobre una cama de
palos o varas. Los conquistadores por primera vez encontraron hamacas en las
Antillas, y su uso y elaboración, por el tipo de clima del sureste, se fue
difundiendo; así, aunque la hamaca no sea originaria del estado de Yucatán, su
elaboración y uso ya tiene más de cuatro siglos, y es gracias a la destreza de los
artesanos de esta región que ha llegado a su mejor desarrollo y elaboración.
Los municipios en donde se elaboran la mayoría de las hamacas son Tixkokob,
Chumayel y Teabo. La elaboración de una hamaca es todo un arte, el cual se
transmite de generación en generación. Se urde la hamaca en un bastidor que
consta de dos largos palos de madera, cilíndricos y perpendiculares, colocados
paralelamente uno enfrente del otro, que se rodean en forma de madeja con el hilo
que se va a utilizar para el tejido, y con una aguja labrada en madera o hueso
comienza la tejedora a entrecruzar los hilos y poco a poco se va formando la
trama de malla característica.
Se elaboran hamacas de diferentes clases, entre ellas la de mecate corriente de
cordeles de henequén que usan los indios, la de hilo fino de henequén, que es la
hamaca estándar de Yucatán, y la de hilera de algodón o de lino, que es la más
fina.
Palma
La palma de huano crece prácticamente en todo Yucatán. Tradicionalmente se
usa para techar las casas mayas. Las hojas usadas para la fabricación de
artesanías tiene un elaborado proceso en el que una parte se tiene que realizar en
cuevas bajo la tierra para que la humedad que ahí prevalece permita la
ductibilidad del material. Se distingue Halachó en la elaboración de artesanía de
palma que da como resultado hermosos trabajos de cestería, finos sombreros,
sonajas, aviones y cualquier objeto que manifieste la creatividad y destreza de los
artesanos.
Bejuco
8. Aunque no existen evidencias materiales del bejuco en el tiempo anterior a la
Conquista, las fuentes etnobotánicas del siglo XVI aluden a bejucos para armar
construcciones y para cestería. Los cestos han sido tan indispensables para el
traslado y almacenamiento de diversos productos, que podemos imaginar que se
han tejido los bejucos al menos desde que se inicia la agricultura en el área, si no
es que en épocas anteriores. En Yucatán se siguen realizando diversos objetos de
bejuco, algunos para autoconsumo, pero también para la venta. Se realizan
principalmente en Ebtún y Kinchil.
Talabartería
El uso de pieles y cueros de animales para fabricar calzado o ropa, data en
Yucatán de la época prehispánica. También algunos códices se pintaban sobre
piel.
Cuando llegaron los españoles, trajeron distintas especies de animales con cuyas
pieles se elaboraba calzado, cinturones, bolsas y artículos para caballería como
las sillas de montar. La tradición prehispánica, que ya confeccionaba artículos de
otras pieles, se vio enriquecida con la introducción de ganado vacuno, caprino,
porcino y caballar. Además de otros objetos traídos por los españoles; introdujeron
herrajes y broches que generaron un importante oficio. La actividad constituía un
buen negocio para los españoles y criollos radicados en Yucatán, cuya producción
era exportada a Cuba y Europa; actualmente esta actividad tiene su mayor auge
en la zona de Valladolid aunque también en Hunucmá y Ticul.
Actualmente se fabrican de piel fina, siguiendo los modelos de los artefactos
extranjeros y del interior de la República, carteras, portafolios, billeteras, bolsas de
mano, monederos y cigarreras, estuches, zapatos y otras curiosidades de uso
personal. Esta actividad tiene su mayor auge en la zona de Valladolid aunque
también en Hunucmá y Ticul.
Piedra
9. El tallado en piedra es el arte de dar forma al elemento básico del paisaje de
nuestra tierra, la piedra. Se trabaja con cinceles martillos y pulidores de piedra
caliza para quitar los sobrantes y aproximarse a la forma deseada. La variedad es
bastante amplia: piezas para el uso doméstico, instrumentos de labranza, collares,
objetos que representan deidades y esculturas que forman parte de las
construcciones religiosas y de los palacios.
Actualmente, el tallado en piedra se realiza en varios poblados de Yucatán, como
Dzityá, Muna, Tixhualahtún, Halachó y Kankab.
Para la realización de las tallas se utilizan diferentes tipos de piedra como
conchuela y
piedra Rosa o cantera, entre otras.
Ubicación y límites
El cultura maya se extiende sobre un área de más de 350,000 km que comprende
buena parte del sureste mexicano (los estados de Yucatán, Campeche, Quintana
Roo, y porciones de Chiapas y Tabasco), Belice, el centro y norte de Guatemala y
la frontera noroccidental de Honduras.