2. Para que los datos de las tablas se
puedan seleccionar, encontrar y
procesar de forma rápida y eficaz, es
necesario que las tablas no se
encuentren aisladas unas de otras. Las
tablas tienen que estar relacionadas
con otras formando estructuras
relacionales.
3. Las relaciones pueden ser de tres tipos:
•1. De uno a uno.
•2. De uno a varios.
•3. De varios a varios.
•4. Indeterminada, indefinida o inconsistente.
4. Las relaciones son como las reglas que rigen el modo en que los
datos se conectan a la base de datos.
En una base de datos de procesamiento de pedidos normalizada,
por ejemplo, lo más probable es que tenga la información del
cliente en una tabla y la información del pedido en otra tabla.
¿Deseas asegurarte de que los clientes no se queden separados
de sus pedidos? Y no deseas que se cree un pedido que no tenga
un cliente válido conectado a él.
La ventana relaciones es el lugar donde debe ir para establecer
estas reglas de modo que se apliquen en toda la base de datos.
5. Antes de hablar de las relaciones hay que
entender lo que son los campos clave o llave. Son
campos clave los que intervienen en la relación.
Es clave principal un campo (o más de uno para
claves de campo múltiple) cuyo valor o valores
identifican de manera exclusiva cada registro de
una tabla. Una clave principal no puede permitir
valores Nulos o repetidos.
6. Las relaciones se clasifican en función del número de registros
que se relacionan entre ambas tablas.
Uno a uno: un registro de la primera tabla se puede relacionar
con un solo registro de la segunda.
Uno a varios: un registro de la primera tabla se puede
relacionar con varios registros de la segunda tabla.
Varios a varios: un registro de la segunda se puede relacionar
igualmente con varios registros de la primera.