cuadernillo de lectoescritura para niños de básica
El hambre en el mundo: causas, consecuencias y soluciones
1. EL HAMBRE EN EL MUNDO
La desnutrición es un estado patológico provocado por la falta de ingesta o absorción de alimentos o por
estados de exceso de gasto metabólico. Puede ser primaria que también puede ser llamada desnutrición leve, o
desnutrición secundaria, la cual si llega a estar muy grave puede llegar a ser una patología como
el cáncer o tuberculosis.
Los tipos de desnutrición que puede adquirir los niños que lucen sanos y en su peso ideal pero a través de un
examen de laboratorio (orina y sangre) se revela su estado de desnutrición.
La desnutrición ha llegado a ser un problema determinante para las economías de los países en desarrollo.
Debido a que el capital humano estaría en condiciones infrahumanas, se dice esto porque la producción mundial
de alimentos es mayor al número de habitantes, entendiendo por esto que se estaría destinando los recursos
agrícolas a otro tipo de actividades como la producción de biocombustibles, etc. O que algunos países permitan
la exportación de alimentos sin antes abastecer su mercado interno. Por otro lado, debemos tomar en cuenta la
destrucción de los suelos, desde la revolución verde se ha ido produciendo a mayor escala generando
monocultivos que hoy demuestran su insostenibilidad productiva. Además de los efectos negativos del cambio
climático sobre la producción mundial de alimentos.
De acuerdo a la Declaración de Roma sobre la Seguridad Alimentaria Mundial, jefes de Estado y de Gobierno de
los países miembros de la FAO reafirmaron el derecho de toda persona a tener acceso a alimentos sanos y
nutritivos, en consonancia con el derecho a una alimentación apropiada y con el derecho fundamental de toda
persona a no padecer hambre. Entonces, cualquier ser humano tiene el derecho de reclamar por una
alimentación que le permita contribuir con la sociedad, derecho que actualmente se ve minimizado debido a
que en muchos países no se toma conciencia en la importancia de la seguridad alimentaria como pilar
fundamental de la base productiva de su economía.
Existen muchas organizaciones que trabajan con el objetivo de luchar contra el hambre en el mundo, como por
ejemplo PMA (Programa Mundial de Alimentos de la ONU), la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la
Alimentación y la Agricultura), IFPRI (International Food Policy Research Institute) y muchas más que además de
brindar asistencia alimentaria a millones de personas también trabajan con gobiernos para diseñar programas o
planes de erradicación del hambre.
Hoy nos enfrentamos a un aumento mundial de los precios de los alimentos amenazando la seguridad
alimentaria en el mundo, la FAO realizó un análisis en cuanto a este fenómeno económico publicando un índice
de precios de los alimentos, respecto al mismo se demuestra lo siguiente:
2. La parte de imagen con el identificador de relación rId9 no se encontró en el archiv o.
» El índice de precios de los alimentos de la FAO se situó en 234 puntos en promedio en junio de
2011, un 1 % más que en mayo y un 39 % más que en junio de 2010. El índice alcanzó su máximo
histórico (238 puntos) en febrero. El incremento del valor del índice en junio se debió en gran
parte a la fuerte subida de los precios internacionales del azúcar. Los precios internacionales de los
productos lácteos aumentaron ligeramente en junio, mientras que los precios de la carne se
mantuvieron estables. Por lo que hace a los cereales principales, los precios del trigo fueron los
que más disminuyeron, mientras que los del arroz se incrementaron. Entre los aceites y las grasas,
los precios del aceite de soja no sufrieron variaciones pero los del aceite de palma se redujeron.
» El índice de precios de los cereales de la FAO se situó en 259 puntos en promedio en junio, esto
es, un 1 % menos que en mayo pero un 71 % más que en junio de 2010. La mejora de las
condiciones meteorológicas en Europa y el anuncio del levantamiento de la prohibición de las
exportaciones de la Federación de Rusia (a partir de julio) deprimieron los precios del trigo. Sin
embargo, los mercados de maíz resultaron fortalecidos por la restricción de los suministros de la
última cosecha (2010) y la persistencia de condiciones húmedas en los Estados Unidos de América.
Los precios del arroz subieron en general en junio, a consecuencia de la fuerte demanda de
importaciones y la incertidumbre sobre los precios de exportación de Tailandia, el mayor
exportador de arroz del mundo.
» El índice de precios de los aceites y grasas de la FAO se situó en 257 puntos en promedio en
junio, lo que representa un ligerísimo descenso respecto a mayo. La persistente incertidumbre
sobre la producción y la expectativa de que aumente la demanda mundial de importaciones
sostuvieron los precios del aceite de soja. En cambio, los precios del aceite de palma siguieron
descendiendo, a consecuencia de la mejora de las perspectivas en relación con los suministros y la
amplia disponibilidad de exportaciones del Asia sudoriental.
» El índice de precios de los productos lácteos de la FAO se situó en 232 puntos en promedio en
junio, prácticamente igual que en mayo, cuando se situó en 231 puntos. Ello fue resultado de las
disparidades en la evolución de los precios, ya que los precios de la leche descremada en polvo y la
caseína subieron un 5 %, los de la leche entera en polvo disminuyeron un 3 % y los de la
3. mantequilla y el queso, en fin, permanecieron estables.
» El índice de precios de la carne de la FAO se situó en 180 puntos en promedio, lo que representa
un ligerísimo aumento respecto a mayo. Los precios de la carne de ave experimentaron un
incremento del 3 %, con lo que establecieron un nuevo récord, mientras que los de la carne
porcina descendieron ligeramente. Los precios de la carne bovina y ovina sufrieron aumentos
modestos, desde los niveles ya altos en que se encontraban.
» El índice de precios del azúcar de la FAO se situó en 359 puntos en promedio en junio, un 14 %
más que en mayo y tan solo un 15 % por debajo de su récord de enero. La fortaleza de los precios
es resultado del dinamismo de la demanda a corto plazo unido a la restricción de la disponibilidad
de exportaciones, especialmente en el Brasil, el mayor productor mundial de azúcar, donde se
prevé que la producción caerá por debajo del nivel del año pasado.
4. Caso Bolivia:
Bolivia (Estado Plurinacional de)
Población Total 9.4 millones
Número de personas subnutridas2.5 millones
La prevalencia de la subnutrición 27 %
Consumo diario de energía 2090kcal
De acuerdo con el informe realizado por el Instituto de Boliviano de Economia y Agricultura,
Bolivia se encontraria en el penúltimo lugar en latinoamérica, Cerca del 23% de la población
boliviana está subnutrida, la prevalencia del bajo peso para la edad en menores de cinco años es
de 4,3 %; la Tasa de mortalidad en menores de cinco años es de 5,4 %, todos indies muy altos que
dscubren el gran problema aun sin resolver.
La seguridad alimentaria global se encuentra bajo presión. A pesar de que los líderes mundiales
adoptaron, con el primero de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, la tarea de reducir a la
mitad la proporción de personas que sufren hambre en el mundo entre 1990 y 2015, no estamos
nada cerca de cumplir con dicha meta. El porcentaje de personas subnutridas cayó de un 20 por
ciento en 1990–1992 a un 16 por ciento en 2004–2006. No obstante en años recientes el número
de personas que padecen hambre ha ido, de hecho, en aumento. En 2009, el número de personas
subnutridas superó los mil millones a consecuencia de la crisis de los precios de los alimentos y en
medio de la recesión mundial. Estimaciones más recientes del Programa de Naciones Unidas para
la Agricultura y la Alimentación, FAO, sugieren que el número habría caído a 925 millones en
2010. Dentro de este sector de la población hay un grupo especialmente vulnerable: las niñas y
niños pequeños. La subnutrición sufrida durante los dos primeros años de vida puede poner en
riesgo la propia vida del niño y la niña, así como comprometer su desarrollo físico, motor y
cognitivo. Para aquellos que sobreviven, la subnutrición en los dos primeros años suele acarrear
daños irreversibles a largo plazo. Resulta por lo tanto de particular importancia que
emprendamos una acción conjunta para combatir el hambre, especialmente entre los infantes.
Esta es la temática central en que hace énfasis el Índice Global del Hambre 2010, publicado de
forma conjunta por el Instituto Internacional de Investigación sobre Políticas Alimentarias (IFPRI),
Concern Worldwide, y Welthungerhilfe.
El 2010 es el quinto año en que el Instituto Internacional de Investigación sobre Políticas
Alimentarias ha estimado el Índice Global del Hambre (IGH) y analizado este indicador
multidimensional del hambre mundial. Esta serie de informes registra la situación del hambre a
nivel global y también país por país, centrando la atención de los países y regiones en aquellos
aspectos donde la acción es más urgente. De esta forma, estos informes brindan apoyo a los
esfuerzos de promoción, diseño y gestión de políticas a nivel nacional e internacional.
En nuestro país los factores más importantes que en la actualidad causan la baja rentabilidad y
competitividad del agro son el débil y casi inexistente sistema de innovación e investigación
agrícola, pocas estrategias macroeconómicas para el agro, mala política de precios, débil
5. articulación de la oferta de los mercados, proyectos mal ejecutados, mala estrategia en los
mercados intangibles y las intervenciones no responden al tamaño de los problemas.
Promover la investigación agrícola, mejorar la educación rural debería ser el centro del plan
de desarrollo, pues estas medidas son más efectivas que subvencionar fertilizantes u otros i
nsumos. El reto está en el incentivo a la muy necesaria la inversión privada, para que de esta
manera se puedan adoptar medidas expansivas en el uso de la tecnología utilizada en nuestra tan
rudimentaria agricultura; pero que a su vez no se comprometa la variedad productiva del país,
debido a que generalmente la agroindustria busca producir a gran escala generando monocultivos
que terminan destruyendo los suelos y disminuyendo la variedad de alimentos a disposición de los
habitantes, además de la búsqueda de maximizar sus beneficios exportando la mayor cantidad
producida posible sin tomar en cuenta el abastecimiento del mercado interno.