La cabeza de Medusa es un cuadro de Caravaggio de 1597 que muestra la cabeza recién cortada de Medusa con serpientes por cabellos y sangre brotando del cuello. Fue pintada en lienzo y luego pegada sobre tabla de álamo en forma de tondo. El cuadro fue encargado por el Cardenal Francesco María de Monte y luego obsequiado al Duque Ferdinando I de Toscana.