ACERTIJO DE LA BANDERA OLÍMPICA CON ECUACIONES DE LA CIRCUNFERENCIA. Por JAVI...
pena de muerte
1. MÉTODOS DE EJECUCIÓN
• Decapitación
electrocución
• Ahorcamiento
• Inyección letal
• Armas de fuego
EJECUCIÓN DE PERSONAS QUE ERAN MENORES
DE EDAD EN EL MOMENTO DEL DELITO
Hay países que siguen condenando a muerte y ejecutando a personas
que eran menores de 18 años en el momento del delito, a pesar de que
el derecho internacional de los derechos humanos prohíbe la aplicación
de la pena de muerte en tales casos. El número de esas ejecuciones es
reducido en comparación con el total de ejecuciones anuales registradas
por Amnistía Internacional,
pero su importancia va más allá de las cifras, y pone en cuestión el
compromiso de los Estados ejecutores de respetar el derecho
internacional.
Desde 1990, Amnistía Internacional ha documentado en 10 países al
menos 152 ejecuciones de personas menores de 18 años en el momento
del delito: Arabia Saudí, China, Estados Unidos de América, Irán, Nigeria,
Pakistán, República Democrática del Congo, Sudán, Sudán del Sur y
Yemen.
Varios de estos países han cambiado ya sus leyes para excluir esta
práctica. En Irán, las ejecuciones de personas menores de 18 años en el
momento del delito duplican con creces la suma de esas ejecuciones en
los restantes nueve países. En el momento de redactar estas líneas, esa
cifra ascendía en Irán a al menos 102 ejecuciones desde 1990.
¿DÓNDE TIENEN LUGAR LA MAYORÍA DE LAS
EJECUCIONES?
2. En 2020, la mayoría de las ejecuciones de las que se tuvo noticia se
produjeron en China, Irán, Egipto, Irak y Arabia Saudí, por ese orden.
China sigue siendo el mayor ejecutor del mundo, aunque se desconoce
la verdadera magnitud del empleo de la pena de muerte en ese país, ya
que los datos correspondientes están clasificados como secreto de
Estado. En la cifra global de 2020 de al menos 483 ejecuciones, no se
incluyen los miles de ellas que, según se cree, tuvieron lugar en China.
Excluyendo a China, el 88% de todas las ejecuciones que se dieron a
conocer tuvieron lugar en tan sólo cuatro países: Irán, Egipto, Irak y
Arabia Saudí.
EJECUCIONES POR AÑO
En 2020, Amnistía Internacional registró al menos 483 ejecuciones
repartidas en 18 países, lo que supuso un descenso del 26% con
respecto al año 2019, en el que se registraron al menos 657 ejecuciones.
Se trata del número más bajo de ejecuciones registradas por Amnistía
Internacional en al menos una década.
CONDENAS A MUERTE POR AÑO
Amnistía Internacional registró al menos 1.477 condenas a muerte en 54
países en 2020, lo que supuso un descenso del 36% con respecto a las
2.307 de 2019. Se tenía constancia de que al finalizar 2020 había en
todo el mundo al menos 28.567 personas condenadas a muerte.
¿QUÉ HACE AMNISTÍA INTERNACIONAL PARA
LOGRAR LA ABOLICIÓN DE LA PENA DE
MUERTE?
Amnistía Internacional lleva 40 años haciendo campaña en todo el
mundo por la abolición de la pena de muerte.
Amnistía hace un seguimiento del uso que los Estados hacen de esta
forma, la más extrema, de castigo cruel, inhumano y degradante con el
fin de señalar públicamente a los países que siguen aplicándolo y hacer
3. que rindan cuentas por ello. Anualmente, publicamos un informe con
las cifras correspondientes y las tendencias de cada país. El último,
titulado Condenas a muerte y ejecuciones 2020, fue publicado en abril de
2021.
El trabajo de la organización en contra de la pena de muerte adopta
múltiples formas, entre ellas, proyectos específicos basados en trabajo
de incidencia y de campaña en las regiones de África, Asia y Oceanía,
América y Europa y Asia Central; el refuerzo de normas nacionales e
internacionales en contra del uso de la pena capital, respaldando, por
ejemplo, la adopción por parte de la Asamblea General de la ONU de
resoluciones sobre una moratoria de la pena de muerte; y ejercer presión
en relación con casos de personas que se enfrentan a una ejecución
inminente. También respaldamos las acciones y el trabajo del
movimiento abolicionista a escala nacional, regional y global.
Cuando Amnistía Internacional comenzó ese trabajo en 1977, sólo 16
países habían abolido totalmente la pena de muerte. Hoy día la cifra
asciende a 108, más de la mitad de los países del mundo. El número de
países abolicionistas en la ley o en la práctica es superior a dos tercios
del total.
Mapa interactivo: la pena de muerte en el
mundo
4. La pena de muerte puede evitar
crímenes, puede disuadir a
asesinos en potencia, puede
salvar
Argumento a favor de la pena de muerte:
La pena de muerte puede evitar crímenes, puede disuadir a asesinos
en potencia, puede salvar vidas. Debido a que, a partir de la
aplicación del castigo a uno, los próximos criminales, que
generalmente no creen que serán descubiertos y castigados, sabrán la
consecuencia de su accionar,
pudiendo perder su propia vida, siendo castigados por el gobierno; y
de esta manera lo pensaran
dos veces antes de cometerlo.
Utilizar la pena de muerte en casos justificativos, es una manera de
proteger la vida de los ciudadanos, ya que así quedaría totalmente
garantizada la seguridad de ellos. Debido a que es una
forma de no correr el riesgo de que el criminal vuelva a cometer su
delito, y brindando así,
tranquilidad, no sólo a las victimas afectadas, quienes mientras el
agresor siga con vida están con el alma en un hilo porque puede
regresar, sino también al resto de la población quienes están
expuestas a otro ataque.
¿Además, es justo que con los impuestos que uno paga tenga que
mantener a asesinos, violadores, delincuentes...? Ya que estos
estando vivos requieren de algunos servicios, como alimentación,
revisión médica, vestimenta, personal para su control, los cuales
todos los ciudadanos deben pagar.
5. A favor de la pena de muerte
La pena de muerte es la única pena posible o la más eficaz para impedir
determinados delitos.
- La pena de muerte previene nuevos delitos, sobretodo cuando es
comúnmente conocida su aplicabilidad y se publicita su aplicación efectiva.
- Evita que los criminales ejecutados puedan estar nuevamente en situación
de cometer más delitos, por ejemplo, fugándosede la prisión.
- La pena capital es más barata que mantener encerrado de por vida al
criminal condenado a costa de la sociedad víctima de sus crímenes.