2. Índice:
• La Filosofía
• Orígenes de la filosofía
• Dogmatismo y anti-dogmatismo
• Actitud Filosófica
• Sociedad Posmoderna y moderna
3. La Filosofía:
La filosofía es un conocimiento, un saber, de los tantos que posee el hombre, que resulta de
una actividad que se llama filosofar. Hay algunos que sostienen que no se puede enseñar
filosofía, pero sí a filoso. El hombre comienza a filosofar cuando pierde todas las certezas que
tenía, cuando todo a su alrededor se tambalea y no tiene de dónde agarrarse para no caer. Esto
es así porque la filosofía pretende ser un saber sin supuestos; es decir, que no parte de nada
anterior a sí mismo. Todos los otros conocimientos del hombre parten de un conjunto de
supuestos que no se discuten. La filosofía, en cambio, pretender ser autónoma, no depender de
nada. Por lo tanto las preguntas que la filosofía se plantea, y que trata de responder, son las más
fundamentales para el hombre: ¿qué soy yo y qué es el mundo?
Hacer filosofía implica generarse preguntas llevándolas a su máxima expresión, llegando a
cuestionar una realidad a la que somos funcionales, desenmascarando todo aquello que se cree
verdadero. Para realizar esto se necesita vivirlo y experimentarlo, pudiendo de esta forma
descubrir que lo que se vive como obvio solo son supuestos.
La filosofía no se enseña, se vive.
4. Orígenes de la Filosofía:
Asombro Duda Situación Limite
Platón decía que el asombro es
el origen de la filosofía.
Aristóteles que la admiración
es lo que impulsa a los hombres
a filosofar. El filosofar es como
un despertar de la vinculación a
las necesidades de la vida. Este
despertar tiene lugar mirando
desinteresadamente a las cosas,
al cielo y al mundo preguntando
qué sea todo ello y de dónde
todo ello venga, preguntas cuya
respuesta no serviría para nada
útil, sino que resulta satisfactoria
por sí sola.
Una vez que he satisfecha mi
asombro y admiración con el
conocimiento de lo que existe,
pronto se anuncia la duda
(desconfianza radical ante todo
saber)
Hay dos tipos de dudas:
• Duda sistemática: negación
de la posibilidad de que
exista algún tipo de
conocimiento.
• Duda metódica: No se la
practica como duda misma,
sino como medio para
encontrar un conocimiento
cierto.
Son aquellas situaciones de
la que no podemos salir y
que no podemos alterar, son
las propias de nuestro ser-
hombre. Le fijan ciertas
fronteras mas allá de las
cuales no puedo ir,
manifiestan la finitud del
hombre.
La conciencia de esas
situaciones limites es
después del asombro y la
duda, el tercer origen de la
filosofía.
5. Dogmatismo:
• DOGMA: posición que se asienta por firme y cierta.
• Principio innegable en la ciencia.
• Se entiende que el conocimiento es posible , obvio y evidente.
• Basado en la certeza que nunca se cuestiona.
• Da por sentada la posibilidad del conocimiento.
• Confianza ciega en el conocimiento.
Estructura mental:
Existen verdades fundamentales.
Yo (dogmático) las conozco.
Esas verdades por ser lo que son, no exigen justificación racional y no pueden ser sujetas a criticas
racionales.
Todos tienen que aceptar esas verdades.
Quienes no las acepten estarán en el error, y el error no puede ser tolerado.
Ser filosofo y ser dogmático son propiedades incompatibles.
6. Antidogmatico:
Construye su propia verdad.
Da lugar a la duda sobre esa verdad.
Actitud critica racional respecto al conocimiento o búsqueda de
la verdad.
Se cuestiona lo que se conoce.
EL FILOSOFO ES ANTIDOGMATICO (propiedades compatibles).
Hacer filosofía, pensar y argumentar sobre ella, no solo leerla, desarrolla
nuestras capacidades de pensamiento critico y así nos equipa para muchos
desafíos de un mundo en rápida transformación.
7. Actitud Filosófica:
La actitud filosófica es la disposición humana superior de aceptación o valoración del conocimiento.
Parte de la propensión natural del hombre por conocer la realidad, con una particularidad analítica,
crítica, problematizadora, buscando el fundamento de los objetos, los hechos y las circunstancias que le
rodean, y asumiendo una posición totalizadora.
No se refiere a ciertas actitudes externas sino a la actitud disposición, a la actitud espiritual, a la
vivencia.
Si al filosofo se le concede e esplendido aislamiento que pide y necesita, esta ya satisfecho. Asiste al
festín de la vida de sus hermanos, pero desde afuera, mejor dicho, desde muy alto. La filosofía, en
abstracto, no existe. Como no existe el hombre, como no existe el animal. Existe lo singular lo concreto.
La "actitud filosófica" es una postura frente al mundo, al saber, a la sociedad y a sí mismo. Es la actitud
que asume quien busca " pensar en sí mismo"; es fomentar el gusto por el saber, por la
investigación, fomentar el asombro.
La actitud filosófica que todo ser humano debe tener consiste, mas que nada, en un sentido del orden.
A lo largo del pensamiento accidental se ha definido al filosofo como el hombre sabio y a la filosofía
como la sabiduría.
8. Características de la Actitud
filosófica:
• PROBLEMATIZADORA: El pensamiento filosófico es una manera peculiar de
abordar los problemas, más que de resolverlos. El valor de la filosofía no
reside en las respuestas que proporciona, sino en las preguntas que formula.
• UNIVERSALISTA E INTERDISCIPLINARIA: Trata de abarcar toda la realidad y
sirve para establecer uniones entre las distintas ciencias. El filósofo es un
intelectual de uso múltiple.
• CRITICA: Ataca los temas de raíz sin dar nada por supuesto. Intenta descubrir
errores, falacias y manipulaciones ideológicas. La filosofía persigue
la emancipación del género humano.
• CLARIFICADORA: La filosofía es una actividad consistente en el análisis
conceptual. Su objetivo es liberador, pues muchos errores conceptuales nos
atrapan sin que veamos la forma de salir de ellos.
• PRACTICA: Su interés es orientarnos en la vida por eso se dice que es un arte
de vivir y que, si no sirve para la vida, no sirve para nada.
9. El Posmodernismo:
La posmodernidad surge a partir del momento en que la humanidad empezó a tener conciencia de que ya no
era válido el proyecto moderno; está basada en el desencanto.
Los posmodernos tienen experiencia de un mundo duro que no aceptan, pero no tienen esperanza
de poder mejorarlo. Estos, convencidos de que no existen posibilidades de cambiar la sociedad, han decidido disfrutar
al menos del presente con una actitud despreocupada.
La posmodernidad es el tiempo del yo ("de él yo antes que el todos") y del intimismo. Tras la perdida de confianza
de los proyectos de transformación de la sociedad, solo cabe concentrar todas las fuerzas en la realización personal.
Hoy es posible vivir sin ideales lo importante es conseguir un trabajo adecuado conservarse joven, conservar la salud,
etc.
El símbolo de esta época ya no es Prometeo ni Sísifo, sino Narciso. Los grandes principios éticos y morales de la
modernidad no se mantienen con carácter Universal, se entra en un ética de la situación, "todo depende".
El hombre en la posmodernidad empezó a valorar más el sentimiento por encima de la razón. Los posmodernos
niegan las ideas de la modernidad sin analizarlas, ya que esto supondría tomar en serio la razón, rechazan con jovial
osadía los ideales propuestos por los modernistas.
Y dicen que el deseo de saber demasiado sólo puede traer males. Opinan que el "pensamiento débil" tiene dos
grandes ventajas:
Buscar el sentido único para la vida conlleva una apuesta demasiada alta (todo o nada).
Las grandes cosmovisiones son potencialmente totalitarias. Todo aquel que cree tener una gran idea trata de
ganar para ella a los demás y, cuando estos se resisten, recurrirá fácilmente a la implementación de la fuerza.
El individuo posmoderno obedece a lógicas múltiples y contradictorias entre sí. En lugar de un yo común lo que
aparece es una pluralidad de personajes.
Todo lo que en la modernidad se hallaba en tensión y conflicto convive ahora sin drama, pasión ni furor.
10. El modernismo:
Fue una corriente del " pensamiento" que se desarrolló en la Edad Media baja (siglos XVII y XVIII); inspirada y
fundamentada en el pensamiento de Descartes (racionalismo), sacando de allí sus ideas básicas. La modernidad se
caracterizó por la racionalización de la existencia tanto es así que llego a hablarse de la "La diosa razón".
Este pensamiento fue marcado por el surgimiento de grandes utopías sociales, políticas, económicas, culturales,
tecnológicas, industriales, etc.
Los ilustrados creyeron en la cercana victoria sobre la ignorancia y la servidumbre por medio de la ciencia; los
capitalistas confiaban en alcanzar la felicidad gracias a la racionalización de las estructuras sociales y el incremento de
la producción; los marxistas esperaban la emancipación del proletariado a través de la lucha de clases. En lo que todos
estaban de acuerdo (a pesar de las grandes diferencias ideológicas) era en que "se puede". Lo resaltable de éstas era la
búsqueda del bien común ("El todos antes que el Yo"), y la confianza que éstas tenían en la razón y en los
valores del "hombre".
El hombre modernista era un hombre comprometido con la humanidad, creía en ésta y en su avance. Creía en la razón
Universal y en que a través de ella se podía llegar a la pura verdad. El hombre modernista era un hombre enamorado
de la vida, con un proyecto claro e ideales firmes; los cuales no estaba dispuesto a canjear por bienes materiales.
El modernista es un hombre, básicamente optimista, no acepta el mundo en el cual le tocó vivir, pero tiene esperanza
de cambiarlo.
El hombre moderno convencido de que se puede cambiar la sociedad compromete su presente por un futuro mejor,
para él y para "todos".
Fue una época de grandes dictaduras y tiranías, posiblemente por el compromiso de los hombres con la sociedad.
El hombre moderno no tiene demasiadas posibilidades de conocer el mundo por lo tanto se maravilla, se cuestiona, a
sombra y motiva con la información proveniente de otras partes del mundo.