Las ciudades surgieron hace unos 10,000 años con el desarrollo de la agricultura, lo que permitió la acumulación de excedentes y la sedentarización. Las primeras ciudades aparecieron en las cuencas de los ríos Tigris y Éufrates. A lo largo de la historia, las ciudades han ido evolucionando en su forma y función, desde las primeras ciudades-estado de la antigua Mesopotamia hasta las grandes metrópolis industriales del siglo XIX y las ciudades contemporáneas
1. INSTITUTO UNIVERSITARIO POLITECNICO SANTIAGO MARIÑO
NUCLEO PORLAMAR
CARRERA ARQUITECTURA
URBANISMO
LA CIUDAD Y SUS
ORIGENES
BACHILLER ALBANY GODOY
CI 19561069
2. LA CIUDAD Y SUS ORIGENES
Una ciudad es un espacio urbano con alta densidad de poblacion, en la que predomina el comercio, la industria y los servicios. Se
diferencia de otras entidades urbanas por diversos criterios, entre los que se incluyen poblacion, densidad poblacional o estatu
legal, aunque su distinción varía entre países. La población de una ciudad puede variar entre unas pocas centenas de habitantes
hasta decenas de millones de habitantes. Las ciudades son las áreas más densamente pobladas del mundo.
La ciudad surgió en el momento en que el hombre abandona su estado de cazador- recolector y descubre la agricultura. Esta
actividad favoreció la existencia de unos excedentes que permitieron la sedentarización. Asimismo, el control de la producción de la
tierra sentó las bases de la jerarquía social de los primeros establecimientos fijos. La paulatina concentración de pequeñas aldeas
dio origen a las primeras ciudades, que aparecieron en los valles de los ríos de la media luna fértil de Asia Menor.
Las ciudades tienen su origen, según data de estudios arqueológicos, unos 10.000 años antes de la era cristiana, siendo las ciudades
más antiguas, hasta la fecha, Catal Huyuk, en Turquía (9.000 A.E.C.) y Jericó, en Palestina (7.000 A.E.C).
Conclusiones recientes de la Arqueología, permiten calcular que alerted del año 4.300 A.E.C., empezaron a configurarse
asentamientos de mayor tamaño, con unas estructuras de adobe en forma de rampas y terrazas, llamadas zigurat, que reunían las
funciones de fortaleza y templo.
Al igual que los túmulos, las tumbas, los megalitos y las pirámides repartidas por todo el mundo, los zigurats atestiguan la presencia
de jefaturas avanzadas capaces de organizar un sistema social con una sólida estructura religiosa y unos modos y relaciones de
producción, en un territorio perfectamente delimitado y modificado por la acción del hombre.
3. LA CIUDAD EN LA
EDAD ANTIGUA
Las ciudades del mundo antiguo respondían a una concepción simbólica
del espacio, propia del pensamiento mágico y del pensamiento religioso El
ordenamiento del espacio debía ser coherente con la cosmogonia y la
orientación astrologica de cada cultura.
En Sumeria se trata de “ciudades-estado”, regidas por valores de tipo
religioso y militar, donde se aprecia un orden arquitectónico geométrico y
una diferenciación por ciudades destacaban los
grandes templos y palacios orientados hacia la salida del sol.
En Mesopotamia, por su parte, las ciudades son pequeñas y amuralladas,
tenían un trazado irregular, el cual se fue haciendo reticular con el pasar
del tiempo. Se construían alrededor del templo, las casas tenían un patio y
alrededor de éste se localizaban las habitaciones, eran casas cerradas
debido al clima y a la defensa. Las construcciones son de barro cocido y
adobe, por lo que quedan pocos restos.
4. LA CIUDAD EN
LA EDAD MEDIA
La ciudad medieval aparece como lugar cerrado dentro del paisaje agrícola y forestal,
sirviendo de fortaleza defensiva y refugio de los habitantes y campesinos del entorno, a
la vez que constituye el mercado del área de influencia. Estas ciudades se desarrollaron
con la expansión agrícola iniciada en el siglo XII que generó prosperidad económica y
favoreció los intercambios comerciales que se realizaban en núcleos urbanos ya
existentes, aunque despoblados desde el fin del Imperio Romano.
Las ciudades medievales estaban rodeadas de altas murallas para su protección y
algunas contaban con una fortaleza construida dentro del recinto de la ciudad conocida
como ciudadela. En sus puertas se cobraban los impuestos sobre las mercancías que
entraban en la ciudad.
5. LA CIUDAD EN LA EDAD MODERNA
El urbanismo renacentista se refiere a los proyectos
de planeamiento urbano desarrollados durante
el Renacimiento. El auge del pensamiento racional
durante este periodo determinó un resurgir de las
concepciones aristotélicas y platónicas sobre la ciudad. Se
trata ahora de una ciudad señorial donde los hombres se
dedican a cultivar las artes y las letras, en la que vuelve a
resurgir el ágora como centro público donde compartir los
conocimientos. Una ciudad donde el arte urbano adquiere
un protagonismo importante, cuyas calles invitan al paseo
y a la conversación. Los mejores ejemplos de este tipo de
ciudades son Florencia y Venecia en Italia.
El Renacimiento surge en la República de Fiorencia. Los
grupos sociales dominantes pasan a residir en el interior
de las ciudades, formando la nobleza urbana. Así, a partir
del siglo XV el paisaje urbano verá aparecer el nuevo tipo
edificatorio: los palazzi. Surge la figura del arquitecto y
el proyecto arquitectónico, entre los que destacarán
Brunelleschi, Alberti, Filarete, Scamozzi... que llevarán a
cabo tratados sobre ciudades ideales.
6. A partir de la segunda mitad del siglo
XIX, el proceso colonial y la
consecuente apertura de nuevos
mundos amplían la geografía
económica de Europa y hacen surgir
un nuevo modo de entender la
actividad empresarial. Resulta ahora
necesario poner al servicio de la
producción nuevos medios
tecnológicos, nuevas condiciones de
accesibilidad y, sobre todo, una
nueva distribución del espacio.
7. La población urbana se distribuye formando arcos
más o menos amplios en torno al núcleo urbano, en
un movimiento centrífugo. En el arco exterior se
sitúan las crecientes masas residenciales,
constituidas por la nueva mano de obra inmigrante
para la industria. Son los “barrios obreros”, típicos de
los extrarradios de las grandes ciudades, densamente
poblados, con escasos servicios y en general con
pocas condiciones de habitabilidad. En estos barrios
se concentra la masa laboral, que comparte la
periferia con las grandes e insalubres instalaciones
industriales.
8. LA CIUDAD EN LA
ACTUALIDAD
El estilo de vida en la ciudad es cada vez más acelerado debido a
la cantidad de actividades que se realizan y a las que están
expuestos los ciudadanos. La rutina laboral condiciona los
hábitos alimentarios y de consumo en general.
La vida en la ciudad es ambivalente: brinda múltiples beneficios,
desde oportunidades laborales hasta acceso a múltiples servicios
pero, también, condiciona a seguir un ritmo acelerado para
cumplir con extensas jornadas de trabajo y la competencia que
se genera ante la gran demanda de trabajo.
9. ZONA URBANA Y SUS
CARACTERISTICAS
Cuando hablamos de zona urbana,
espacio urbano, medio urbano, área
urbana, núcleo urbano, casco urbano
o territorio urbano, nos referimos al
paisaje propio de las ciudades grandes
o pequeñas, lo cual supone ya ciertas
dificultades en su definición.
• Hay alta densidad de la población
• Existen edificaciones verticales
(edificios)
• Hay otro tipo de actividades
económicas (comercio, bancario)
• Variedad de transporte
• Infraestructura óptima (servicios
públicos, carreteras)
10. ZONA RURAL Y SUS
CARACTERISTICAS
Las zonas rurales son aquellas
destinadas a la actividad
agropecuaria, o que contiene espacios
verdes salvajes (reservas) o
recreativos.
Están menos densamente habitados
que las ciudades, además de que en
muchos países se encuentran alejadas
de ellas.
En algunos casos, están desprovistas
incluso de servicios básicos
indispensables para la vida en ciudad.
Sin embargo, es habitual en los paises
industrializados que el campo se haya
modernizado.
11. La vida rural responde a otros ritmos que la urbana. En
primer lugar, sus días inician más temprano, según el horario
agrícola que exige el aprovechamiento de los primeros rayos
del sol, además de la convivencia con animales de cría y con
especies salvajes eventuales.
Se trata de una vida más saludable en cuanto a alimentos
más frescos, recién extraídos, a poca necesidad de
desplazamiento diario, ya que la casa suele estar en el
mismo lugar de cosecha o muy cerca. Esto suele evitar
fuentes de estres, pero al mismo tiempo se trata de una vida
muy exigente desde el punto de vista físico