El documento describe cómo la pobreza en Uruguay se ha ido concentrando territorialmente, especialmente en las periferias de las ciudades principales, donde se ha consolidado un núcleo duro de pobreza compuesto principalmente por personas menores de 30 años. La pobreza afecta negativamente el desarrollo cognitivo y emocional de los niños y jóvenes y los expone a mayores tasas de desnutrición, retraso de crecimiento, fracaso escolar y deserción educativa. Además, la pobreza se ha infantilizado