La cultura maya desarrolló varios estilos arquitectónicos monumentales como el de Petén, Usumacinta y Puuc, caracterizados por pirámides, templos, crestas y bóvedas falsas. Algunas de las ciudades más representativas son Tikal, con sus altas pirámides y numerosos edificios, y Palenque, conocida por sus grandes templos. La arquitectura maya se distinguía por el uso de la bóveda falsa y elementos decorativos como cresterías.