2. En ella se encuentra la estatua de San
Wenceslao flanqueada por otros santos
patrones de Bohemia (Prokop, Adalberto, Inés y
Ludmila).
Además hay un pequeño monumento a las
víctimas del comunismo... todo esto en
contraste con el carácter capitalista de la zona,
con multitud de bares y cafés donde los
turistas son carne de cañón para los hosteleros.
3.
4. Karlovy Vary (también conocida por sus nombres en alemán,
Karlsbad, e inglés, Carlsbad), es una ciudad balneario
situada en Bohemia, la región occidental de la República
Checa, en la confluencia de los ríos Eger y Teplá.
Karlovy Vary, recibió este nombre en honor del emperador
del Sacro Imperio Romano-Germánico Carlos IV, quien fundó
la ciudad en 1370. Es famosa históricamente por sus fuentes
termales (13 fuentes principales y unos cientos más
pequeñas) y el río Teplá, también de aguas calientes. Posee
también una interesante arquitectura.
Llegó a ser un famoso destino turístico en el siglo XIX,
especialmente para personajes internacionales ilustres que
buscaban tratamientos termales. La ciudad es también
conocida por el Festival Internacional de cine de Karlovy
Vary y el popular licor checo Karlovarská Bechorovka.
5.
6. Al norte de la llamada Ciudad Vieja de Praga,
ocupando un recodo junto al cauce del río,
aparece el viejo barrio judío, de trascendencia
histórica.
Cerca del viejo Ayuntamiento judío, está una
serie de sinagogas que encierran un espacio en
forma de ele mayúscula que es un antiguo
cementerio, en el que se apiñan millares de
lápidas. Es un punto singular. Aquí, desde 1478
se enterraban a las gentes judías(era el único
lugar donde se les podía enterrar) y estuvo en
activo hasta finales del XVIII. Se calcula que
puede haber enterrados allí 100.000 cuerpos.
Algunas lápidas de nobles y rabinos tienen
cierto interés.
7.
8. Aquí hubo una rotonda románica, donde pereció
San Wenceslao, asesinado por su hermano.
En el siglo XIV se levantó una iglesia gótica por
orden de Juan de Luxemburgo, siguiendo planos
de Matías de Arras, arquitecto francés.
La catedral quedó inacabada. Comprendía la
cabecera u terminaba a la altura de la gran
torre. Fue terminada en el siglo XIX y XX,
siguiendo el estilo gótico. Estas obras de
finalización duraron de 1972 a 1929.
9.
10. A la izquierda del cauce del río que divide en dos la
ciudad se halla un gran recinto que simboliza el
poder de la ciudad, con visos de solidez y eternidad.
Su base es medieval. Aquí surgió en el siglo IX un
fortín y una iglesia, en torno al cual fueron
ampliándose dependencias: casas sencillas o
palaciegas, patios, palacios y edificaciones
religiosas. Hoy, en el Castillo de Praga se pueden
ver, principalmente, dentro de un recinto defensivo:
La catedral, el palacio real, la basílica de San Jorge,
el palacio Lobkowizk, y algunas otras zona cargadas
de atractivo, como el Callejón de Oro, de sencillas
casitas artesanales.
Desde el medioevo hasta la época de los Habsburgo,
aquí residieron los mandatarios del estado. Aquí, en
palacios tardobarrocos, sigue estando el despacho
presidencial checo.
11.
12. El Reloj Astronómico de Praga (en checo
Staroměstský orloj), es un reloj astronómico
medieval localizado en Praga, la capital de la
República Checa. El Reloj se encuentra en la
pared sur del ayuntamiento de la Ciudad Vieja
de Praga, siendo una popular atracción turística.
Los tres principales componentes del Reloj son:
El cuadrante astronómico, que además de
indicar las 24 horas de día, representa las
posiciones del sol y de la luna en el cielo,
además de otros detalles astronómicos
Las figuras animadas que incluyen "El paseo de
los Apóstoles", un mecanismo de relojería que
13.
14. Terezín está dividido en dos partes, la fortaleza grande y la
pequeña. La primera fue un guetto judío donde vivieron más de
150.000 judíos y, la segunda, fue el campo de concentración
que hoy se puede visitar. Hay que recordar que éste fue un
campo de concentración, no uno de exterminio; en él muchos
judíos murieron y otros muchos fueron enviados a los campos de
exterminio.
En el campo de concentración visitaréis los barracones, los
patios, las celdas y otras habitaciones. Existe un túnel
subterráneo de casi un kilómetro por el que iban los reclusos, el
recorrido es angustioso y se hace realmente largo.
Con la entrada completa se puede entrar al campo de
concentración, a los barracones, al museo del guetto, al
cementerio y al crematorio. Esta última parte se encuentra
fuera de la fortaleza grande y será una de las imágenes más
impactantes del viaje.