Las consolas de videojuegos se han vuelto cada vez más populares, permitiendo a los jugadores disfrutar de experiencias interactivas desde la comodidad de su hogar. Sin embargo, algunos argumentan que pasar demasiado tiempo jugando puede ser perjudicial y distraer de otras responsabilidades y relaciones importantes. En general, todo debe consumirse con moderación para mantener un equilibrio saludable.