El documento discute la importancia de la investigación en la sociedad del conocimiento. Señala que aunque el desarrollo científico ha impulsado el crecimiento económico, también ha descuidado el bienestar social y el desarrollo humano sostenible. Argumenta que la educación superior debe enseñar aptitudes investigativas para mejorar la sociedad y crear mentes éticas. Además, afirma que los países latinoamericanos carecen de cultura de investigación y que las universidades pueden contribuir mediante proyectos de investigación aplicada que