La producción avícola depende de la demanda del mercado. Se han mejorado genéticamente las líneas de producción para mejorar los estirpes de aves mediante la reducción del ciclo de postura y engorda y el aumento de la conversión alimenticia. El primer eslabón de la selección genética son las progenitoras (abuelas) y reproductoras, que producen el material genético para incubar y criar las gallinas ponedoras y pollos de engorda.