Pacific 02

CLUB A. F. C. G. SAN MARTÍN 39
La segunda década 1918 - 1927
El primer año de nuestra segunda década de vida
fue el más terrible de la primera guerra mun-
dial. La ofensiva alemana, dirigida por el General
Luddendorf hizo retroceder a los ejércitos aliados
y las noticias que llegaban de Londres no podían
ser más desesperanzadoras.
La actividad del deporte en la argentina se había
reducido a su mínima expresión y sólo los «crio-
llos» seguían practicándolo. Los jóvenes anglo-ar-
gentinos esperaban ansiosos cumplir los 18 años y
solicitar su lugar en el «Nuevo Ejército».
Sólo cuatro clubes asistieron a la asamblea de la
River Plate Rugby Union, entre ellos el San Isidro
Athletic Club, el que se había re-afiliado el año an-
terior, y se decidió llevar a cabo un campeonato,
pero fueron muy pocos los partidos que llegaron a
disputarse.
En 1919 se afilió CUBA, pero el campeonato no
se jugó, pues los Clubes no podían formar equipos
por la gran falta de jugadores.
La segunda década:
la consolidación, 1918 a 1927
Los cuatro hermanos López Gann, al costado del chalet que ocupaban en el Club, cerca de 1920.
En nuestro Club la actividad era casi nula: nada
de fútbol, nada de hockey, y sólo algunos jóvenes
que intentaban jugar al cricket en verano.
Hasta que llegó el final de la guerra. En forma
inesperada, luego de cinco años de lucha, Alema-
nia y Austria-Hungría, agotadas por un esfuerzo ti-
tánico, firmaron un armisticio el 11 de Noviembre
de 1918 a las 11 de la mañana y cesó el fuego a lo
largo de cientos de kilómetros.
Los voluntarios anglo-argentinos empezaron a
ser desmovilizados y muchos de ellos decidieron
volver lo más pronto posible al Río de la Plata, que
veían como un remanso de paz y tranquilidad des-
pués de los terribles cinco años que duró el conflic-
to mundial.
Los veteranos que habían sobrevivido al terri-
ble holocausto de las trincheras se integraron rápi-
damente a sus clubes tratando de olvidar esos tre-
mendos años a través de la actividad física y la re-
creación.

40 CLUB A. F. C. G. SAN MARTÍN
Retorna el Hockey al Club
El Hockey había suspendido los partidos por va-
rios años, tanto de caballeros con de damas, si bien
el carácter amistoso de los mismos (no había cam-
peonatos por decisión de la Asociación) permitió
que se jugara uno que otro partido sin demasiado
entusiasmo en 1918 y 1919.
En 1920, cuando la Asociación Argentina final-
mente decidió hacer campeonatos otra vez, el tor-
neo que comenzó recién el 18 de julio no finalizó
por falta de tiempo. San Isidro iba primero cuando
se suspendió. Nuestro Club presentó un equipo «a
medias», formado por varios veteranos que ya ha-
bían jugado antes de la guerra y unos pocos jóve-
nes casi sin experiencia.
En 1921 se jugó el campeonato completo con
cinco equipos (Pacific, Buenos Aires Hockey Club,
Quilmes, Buenos Aires Great Southem y San Isi-
dro) y San Isidro fue nuevamente campeón. Con
cada partido mejoraba la calidad de los jugadores
de nuestro Club. Recién en 1924 se jugó el primer
campeonato de damas, organizado por la nueva
Asociación de Hockey para Mujeres (Argentine
Ladies Hockey Association) fundada por los clu-
bes Pacific R.A.C., Quilmes AC, Arrow Girls,
Equipo de hockey de 1923.

Quilmes High School, Diamond Hockey Club y
Former Pupils (ex-alumnas del colegio Saint
Catherine).
El equipo de Caballeros lentamente intentó re-
verdecer viejos laureles, y pese a la competencia
que generaba el rugby por la atención de los jóve-
nes, cumplió muy buenas performances en 1924,
25 y 27, disputando palmo a palmo el campeonato
al San Isidro en 1926, aunque este lo ganó con bri-
llantes actuaciones.
Equipo de Hockey de PRAC de la temporada 1925.
Pacific Girl’s Hockey Team, Fotografía publicada en The
Standard.
Partido de Hockey Damas vs. Arrows. Fotografía publicada en
The Standard.

Y llega el Rugby para quedarse
El nacimiento del rugby en el Club se produjo en
1922, cuando el joven Bernardo Wisdom recién lle-
gaba del Colegio en Inglaterra, donde había juga-
do varios años en el primer quince. Como vivía en
Villa Devoto, se acercó a los socios del PRAC para
ver quienes estaban interesados en practicar rugby,
con el objeto de formar un equipo. También se in-
teresó a la Comisión Directiva, y aunque esta estu-
vo básicamente a favor, se pensó inicialmente que
esto podría llevar a algunos socios a tratar de re-
introducir el fútbol, lo que llevaría a sobrecargar
las instalaciones del Club e impedir la recreación
de los empleados del ferrocarril y sus familias.
Por esos días, el Sr. F.H. Walmsley, de 29 años,
acababa de llegar de Inglaterra, contratado para
unirse al Departamento Técnico del Ferrocarril, y
era un excelente jugador de Rugby. Y aunque esta-
ba casado y tenía un hijo pequeño, aceptó apoyar
la idea de todo corazón, y se convirtió inmediata-
mente en el primer Capitán del equipo en forma-
ción.
Rápidamente generó una reunión con el Sr. Little,
miembro del London Board (Directorio) del Ferro-
carril, quien también acababa de arribar de Gran Bre-
taña en una visita de negocios. El encuentro se llevó
a cabo en el Bar & Tea Room , en el último piso de la
Galería Guemes, en la calle Florida, y Mr. Little dio
su acuerdo entusiasta para que el Rugby fuera intro-
ducido en el Club y donó una Copa de plata esterli-
na para el ganador de la competencia anual de
pateadores, la que ganó Stanley Pattison Thomas, de
19 años. (En esos años el pateador debía esperar a
que un «colocador» de su equipo ubicara la pelota,
y una vez que esto sucedía, no podía volver a aco-
modarla, debiendo patear como quedaba).
El primer partido de práctica se jugó en un terre-
no baldío de Santos Lugares, y parado en la linea
de touch, observando, estaba el Sr. Miguel E. Mc
Cormick, que acababa de llegar de Irlanda para
cumplir el servicio militar, puesto que había nacido
en la Argentina en 1902 y asistido al Blackrock
College, de Dublín, una escuela tradicional y pio-
nera del rugby en Irlanda, donde practicó este jue-
go como forward para el primer XV, del que había
sido capitán, en un muy buen nivel.
Única fotografía conocida de un partido de rugby jugado en Sáenz Peña en 1923. Imaginamos que Pacific jugó con las camisetas
verdes lisas.

A lo pocos minutos Miguel, al que sus amigos
entonces llamaban «Mick» (para muchos un so-
brenombre genérico que se les daba a los irlande-
ses) y al que luego se conociera por «Mac», se qui-
tó el uniforme de soldado y pidió permiso para en-
trar en el partido, calzado con los borceguíes regla-
mentarios. Desde ese momento, Miguel McCormick
junto con Bernardo Wisdom dieron su total esfuer-
zo para convertir a esos entusiastas en un verdade-
ro equipo de jugadores de rugby.
Mientras tanto, Ernest Duncan Thomas y Stanley
Pattison Thomas, también fundadores del equipo
original, se pusieron a buscar candidatos para re-
forzarlo. Estos dos hermanos, junto con su herma-
na Marjorie, eran los únicos socios del Club que no
pertenecían al BAP, lo que facilitaba su tarea.
Stanley trabajaba en el Ferrocarril Oeste, y de allí
llegaron los deportistas que conformaron el núcleo
del equipo: Charlie, Jack y William Hood, J.C.
Simpson, E.A. Minter, C.A. Hadcock, T.E. Sawyer,
F.J. Mayne, etc.
También empleados de la Western Telegraph,
que tenía oficinas en Villa Devoto, y del Frigorífico
Anglo se unieron al proyecto, con lo cuál el Club
creció rápidamente en socios y en calidad de juga-
dores.
Entre quienes empezaron a entrenar juntos y to-
maron una parte activa en la conformación de aquel
primer equipo, podemos mencionar a:
Bernardo J. Wisdom, M.E. McCormick, O.J.
Grinrod, los hermanos Thomas, los hermanos Hood,
J.C. Simpson, C.A. Hadcock, T.E. Sawyer, F.J.
Mayne, E.A. Minter, F.J. Anderson, A.V. Bradford,
J. Coomes, Pratt, J. Arundel, J.B. Butler, M. Cooper-
Woodward, J.E. Tatton-Brown, U.S. Trunniger,
Donald R. Thomas, etc.
En el año 1923 se solicitó y se obtuvo la afilia-
ción a la River Plate Rugby Union, Ese año se ins-
cribió un equipo en Segunda División, con la de-
nominación de Pacific Railway Athletic Club.
Pacific Railway Athletic Club – Season 1924 - «A» Team.
Parados: H. K. Jordan, R. Y. Rodie, H. J. Sotham, J. Rymer, T. Livigstone, W. Hood, J. N. Wisner y H. W. Hayden.
Sentados: A. W. Brown, J. McCormick, I. Lewis, S. P. Thomas (Captain), R. H. Cowper-Coles, M. Hunt y T. Cavanagh.

En ese año, se inició la temporada con un amis-
toso contra CUBA, seguido de otros partidos, amis-
tosos también contra Buenos Aires, Gimnasia y
Esgrima «A» y Sportive Francaise (hoy Asociación
Deportiva Francesa).
Para ese primer amistoso, que fue el primer par-
tido de rugby que jugó el Club, el equipo citado
según la publicación de «The Standard» del 23 de
Abril es el que sigue:
Hayden, ap Iwan, Smith, Walmsley ( Capitán),
Cassini, J. Hood, D.C. Taylor, B. Wisdom, Colombo,
Grindrod, Hughes, Jack, Wynne, Maher, Minter, S.P.
Thomas, Lambert y Donadío.
En el campeonato de segunda en sí, que estaba
dividido en dos zonas, «A» y «B», debutamos el
27 de Mayo de 1923 contra CUBA «B».
Los otros integrantes de esa zona eran: Estudian-
tes de la Plata «B», CASI «B», Hindú y Gimnasia y
Esgrima «B». También fuimos invitados a interve-
nir en un torneo eliminatorio que se jugó en Belgrano
Athletic Club desde mediados de Junio hasta fines
de Julio, torneo en que PRAC pagó cara su inexpe-
riencia y fue eliminado en el primer partido, contra
los dueños de casa.
Los periódicos de la época no comentaban las
incidencias de los partidos de Segunda, por lo que
no hay detalle de los resultados de los partidos ju-
gados en este primer año de rugby, pero sí sabe-
mos que generó gran entusiasmo por nuestro de-
porte, a tal punto que en 1924, se solicitó a la Unión
la inscripción de dos equipos en el Torneo de Se-
gunda División, lo que fue aceptado., con la condi-
ción que fueran considerados como clubes distin-
tos, cada equipo tuviera su propio plantel, y los ju-
gadores no pudieran ser intercambiados.
El equipo «A» donde jugaba la mayoría de los
novicios fue capitaneado por el Sr. F.A. Jack, (aun-
que ya en los primeros partidos este cedió la capi-
tanía al Sr. Stanley P.Thomas) empleado del Ferro-
carril y el equipo «B» por Miguel McCormick.
El equipo «A» tuvo una actuación discreta,
como ya hemos dicho, con mayoría de jugadores
noveles, no ganó ninguno de sus ocho partidos ofi-
ciales.
Formaba habitualmente de la siguiente manera:
T. Cavanagh, J. J. McCormick, M. Hunt, I.Lewis,
A. Brown, S.P. Thomas (Capitán), R.Cowper-Co-
les, J. Rymer, T. Livigstone, L. Rodié, H.S.Jordan,
T. Hayden, R.Kirby, J.N. Wisner y W. Hood.
Las reservas eran: J.H. Sotham, J. Levy, S. Pring,
Mellana, Chaplin, J.Nash y J. Hovell.
Al equipo «B» le fue algo mejor: ganó cuatro y
perdio seis, ocupando el cuarto puesto en su sec-
ción.
Formaba con: S.Truninger, E.A. Minter, Ll.
Makin , F.H. Walmsley, M. Cunning; D.C. Taylor y
B.J. Wisdom; R.H. MacCorquodale, E. Wynne,
R.H. Hughes; J. Cunning y J. Harte; Hullet , Duggan
y M. E. McCormick (Capitán)
Las reservas: J. Muleady, Perkins y Stuart.
Cuando se enfrentaban entre sí, el equipo «A»
jugaba con pantalones blancos y camiseta verde, y
el equipo «B» lo hacía con pantalones azules y la
camiseta tricolor, que era la oficial del Club (a fran-
jas verdes y azules y con una fina raya blanca cada
dos franjas).
El 17 de Mayo de 1924 los dos equipos jugaron
entre sí, para ajustar las líneas y contaron con un
entrenador invitado del que no se conserva el nom-
bre, que los ayudó a mejorar su juego. Ya estaba
muy bien acondicionada una de las canchas del
Club, que hasta 1916 había usado Buenos Aires F.C.
para jugar como local.
El 25 de Mayo Pacific «A» debutó contra Gim-
nasia y Esgrima «B», el 15 de Junio jugó con Hin-
dú y como ya dijimos, pagó el precio de la inexpe-
riencia de sus jugadores. En la Copa «Knock-Out»,
que era por eliminación y seguía al Campeonato
Oficial, le tocó debutar con Belgrano Athletic, que
lo eliminó el 13 de Julio.
Pacific «B» jugó su primer partido contra
Belgrano, y los jugadores fueron los siguientes: M.E.
Mc Cormick, Al Cassini, A. Perkins, Ll. F. «Lin»
Makin, E.A. Minter, J.F. Hood, D.C. Taylor; B.J.
Wisdom, R. MacCorquodale, R.H. Hughes,
T.Sawyer, J. Simpson, U.S. Truninger y M.J.
Gunning.
En esa época no había ninguna temporada in-
ternacional de rugby tal como la conocemos hoy.
El partido del año, el que generaba mayor entu-
siasmo por la calidad del juego de los selecciona-
do, era «Argentinos» vs. «Extranjeros» y como
hecho destacable podemos mencionar que dos in-
tegrantes de nuestro equipo «B» de segunda Divi-

sión fueron elegidos para jugar para Extranjeros en
1924, equipo que triunfó ese año por 11 a 6.
Esos jugadores fueron B.J. Wisdom (Jugó de Oc-
tavo) y C.R. McCorquodale (fue Segunda Línea).
El partido se jugó en la sede Maldonado de Gimna-
sia y Esgrima y asistió numeroso público, entre el
que se contaba el Presidente Marcelo T. de Alvear.
La crónica dice que los delanteros de «Extranje-
ros» se mostraron rápidos en llegar a la pelota y
más seguros en el tackle, tarea en la que se destacó
B.J. Wisdom. Extranjeros jugaba con una camiseta
azul y Argentinos con una color blanco.
El primer año en primera
En 1925, con estos antecedentes, el entusiasmo y
empuje de Miguel McCormick, se solicitó permiso
a la Unión para inscribir un equipo de Primera Di-
visión, lo que fue recibido favorablemente por la
Asamblea Anual y luego aprobado por la Comi-
sión Directiva de la Unión.
Equipo de Segunda División 1925.
El primer partido en Primera División se jugó el
10 de Mayo, contra BAFC y en su cancha de
Palermo, y ganaron los locales con un penal de Govan
ocho minutos antes de la finalización del partido.
(Los partidos eran de dos tiempos de 35 minutos).
El equipo de PRAC formó de esta manera:
Stanley P. Thomas ( Full-back), E.A. Minter
(Wing), J.O. Grindrod (Insider), A.H. Perkins
(Insider) y Ll. Makin (Wing); I. Lewis (Medio Aper-
tura) y D.C. Taylor ( Medio Scrum); M.Gunning (
Ala), M.E. McCormick ( Octavo) y B.J. Wisdom (
Ala); E. Wynne (Segunda Línea) y M. Cooper (
Segunda Línea), C.A. Hadcock (Pilar), T.E. Sawyer
(Hooker) y C.R. MacCorquodale (Pilar).
También jugaron ese año Main, Veitch y K.N.
Williams.
Al equipo le fue bastante bien en ese primer año
de primera división, finalizó cuarto (jugaban siete
equipos), disputaron 11 partidos, ganaron tres, per-
dieron siete y empataron uno. Se destacaban los
Srs. Llewelyn Makin y Stanley Thomas, por su en-
trega y conocimiento del juego, pese a que ambos

M. E. Mc Cormick como Capitán del equipo de PRAC de Primera División.
Equipo del Combinado Británico 1927.

habían comenzado dos años atrás. (con San Isidro,
Buenos Aires y CUBA por encima y Gimnasia &
Esgrima, Hindú y Belgrano por debajo).
En la serie por eliminación, que se jugaba en
esa época, perdió por 27 a 0 con San Isidro A.C.
Como dato curioso, ambos equipos se presentaron
con 14 jugadores.
El capitán en 1925 fué Miguel McCormick y re-
dondeó un buen año personal, ya que fue elegido
para jugar como Wing-forward por «Argentinos» y
B.J. Wisdom y C.R. MacCorquodale fueron pilares
y C.A. Hadcock segunda línea del equipo de «Ex-
tranjeros». El partido termino 0 a 0, y las crónicas
mencionan que la pobreza del juego decepcionó a
la nutrida concurrencia.
El domingo siguiente comenzó el torneo por eli-
minación, que se jugó por primera vez al final de la
temporada, en vez de jugarse en el mes de Julio.
En el primer partido San Isidro derrotó a PRAC
por 27 a 0, presentándose nuestro equipo con sólo
14 jugadores, por una deserción de último momen-
to. Esto implicó, una vez finalizado el partido, una
seria reunión entre los jugadores del primer equi-
po, que se prometieron asegurar para siempre la
totalidad del equipo cada domingo.
En 1926 el Capitán del Club fue nuevamente M.
E. McCormick, y el campeonato de primera tuvo
ocho equipos anotados. La segunda se formó con
los segundos equipos de los ocho de primera más
Curupaytí y Lomas A.C. que reapareció después
de cinco años de ausencia.
La superioridad de San Isidro era muy grande, y
muy rápido se vio que saldría campeón nuevamente.
Nuestro Club jugó 14 partidos, ganó 4, perdió 9
y empató 1, con 58 puntos a favor y 120 en contra.
Terminó sexto, solo por arriba de Hindú y Sportive
Francaise.
Habitualmente, PRAC formaba con los siguien-
tes jugadores:
S.P. Thomas; A.Pavlovsky, Ll. Makin, Grindrod
y Hopkins; D.C. Taylor y Docherty, M.E.
McCormick (Capitán), I. Lewis y E.C. Hood; S.
Mackinnon y E. Wynne; Bradford, Titterington y
M. Gunning.
También jugaron en ese año: Clarkson, F.
Anderson, J.J. Mc Cormick, F.W. Levy y R.H.
Cowper-Coles.
En el tradicional partido de «Argentinos» Vs.
«Extranjeros», fueron seleccionados F.W. Levy, L.E.
Hopkins y Ian Lewis (quien era un wing-forward
muy vivo, marcó un try y llamó la atención de los
periodistas por la rapidez en la carga) para Extran-
jeros y M.E. McCormick (cuya actuación como
hooker fue destacada por todos los diarios) y
Llewellyn «Lin» Makin (muy veloz y seguro para
la crónica) para Argentinos, que ganó por 13 a 6.
En 1927 la temporada de rugby fue absoluta-
mente atípica. Después de muchos esfuerzos, se
recibió la visita de un equipo británico, los «Lions»,
formado por excelentes jugadores, entre los que se
destacaba siete internacionales por los cuatro paí-
ses de las islas, entre ellos jóvenes estudiantes de la
Universidades de Oxford y Cambridge. Esto se lo-
gró mediante una colecta, en la que los Clubes,
Bancos, periódicos y Ferrocarriles integraron la
suma de más de 25.000 pesos (el BAP contribuyó
con $ 1.000).
El equipo visitante estaba constituido por juga-
dores que podían dejar sus ocupaciones o estudios
por tres meses, y que tenían una buena posición
económica, pues como dice H. Mackern, «nadie
hubiera pensado en darle viáticos a un equipo de
rugby en gira».
Este equipo, denominado «británicos» y que
luego se llamaría «Lions» ya que la gira figura en
los records de dicho equipo, jugó nueve partidos,
en la cancha de Gimnasia y Esgrima, en Maldonado,
cuatro de ellos contra el seleccionado de la RPRU.
Dos jugadores de Pacific fueron elegidos para
enfrentarlos en el Seleccionado de la River Plate
Rugby Union: Miguel E. McCormick en el primer
match y Llewelyn F. Makin en el tercero.
La Unión tenía 17 Clubes afiliados y 33 equipos
disputaban sus campeonatos, el rugby tenía un gran
prestigio social, como deporte de caballeros y eso,
sumado a la importancia creciente de la colectivi-
dad británica, hizo de esta visita un acontecimiento
nacional, reflejado por la extraordinaria cobertura
que le dio la prensa.
Los visitantes se hospedaban en el Hurlingham
Club, y allí jugaron su primer encuentro, contra un
combinado de anglo-argentinos (jugadores británi-
cos o hijos de británicos), que se formó con 11 ju-
gadores de BAFC. 2 de Belgrano y 2 de Pacific

(M.E. McCormick y Ll.F. Makin). Más de 5.000
personas, según The Standard, colmaron las insta-
laciones en una hermosa tarde de sol y los británi-
cos ganaron 24 a 0, apoyando 8 tries. La crónica
elogia a Makin por sus excelentes tackles y destaca
a McCormick entre los delanteros.
En el tercer partido de la gira, los británicos se mi-
dieron con el seleccionado Argentino, en la sección
Maldonado, y Miguel McCormick fue elegido para
jugar de wing-forward. De esta manera se convirtió
en el primer jugador de Pacific en representar a nues-
tro país. El partido fue para los británicos, por 37 a 0,
marcado 8 tries, convirtiendo 3, un drop y un penal.
En la crónica de The Standard del 2 de agosto,
según cita H.Mackern, el columnista que firmaba
«Garryowen» y que había sido o era un dirigente
de Pacific, critica la elección de varios jugadores,
entre ellos Zappa, de Belgrano, afirmando que «J.
Arundell de Pacific podría haber sido una mejor
opción como medio de apertura».
Es interesante que Miguel McCormick tuvo que
reemplazar a Lucione, de San Isidro, como wing
tres cuartos, pues este se lesionó antes de finalizar
el primer tiempo y en esa época (y por muchos años
más) cuando salía un jugador, el equipo debía se-
guir con los que quedaban.
El 14 de agosto los visitantes jugaron nuevamen-
te con el Seleccionado y Llewelyn «Lin» Makin lo
hizo de wing tres cuartos. La crónica lo registra
como el menos brillante de los matches jugados
hasta la fecha y ganaron nuevamente los británicos
por 34 a 3 (un drop de Torino para Argentina).
La temporada 1927 comenzó con una contro-
versia en el seno de la Unión: M. McCormick pro-
puso que al haberse programado la visita del com-
binado británico, no se jugaran los partidos de re-
vancha, acortando así el campeonato. Finalmente
la propuesta no fue aceptada.
PRAC jugó 14 partidos, ganó 4 y perdió 10, con
153 puntos en contra y sólo 65 a favor. La tempo-
rada no fue buena y por consiguiente ninguno de
sus jugadores fue citado para formar parte de los
equipos de Argentinos o Extranjeros.
Habitualmente, el equipo jugó ese año de esta
manera:
A.H. Perkins, J.J. Mc Cormick, F.C. Anderson,
J.Zuñiga, E.Wynne, M.J. Gunning, S.P. Thomas,
B.M. Pullin, Ll. Makin, R.L. (Buster) Makin, M.E.
Mc Cormick (Capitán), A.V. Bradford, R.H.
Downes, J.A. Arundell y el Dr. Luis Sagasti. Tam-
bién jugaba G. Bradford.
En ese año PRAC jugó un amistoso en el Cole-
gio Saint George de Quilmes, alimentando el entu-
siasmo por el rugby, que se tradujera, diez años
después en el recordado equipo de Old Georgians.
Para llegar hasta el colegio, los jugadores de nues-
tro Club debieron tomar un tranvía a caballo (pro-
bablemente uno de los últimos en servicio) desde
la estación de tren, y se encontraron con una multi-
tud de que alentaba sin cesar a sus jugadores desde
la línea del touch en el primer partido que jugaban
contra un Club. El tercer tiempo fue excelente, y
las madres y hermanas de los pupilos se ocuparon
que no faltaran comestibles ni bebidas, haciendo
que la fiesta fuera recordada por muchos años por
los protagonistas. El tranvía los fue a buscar bien
tarde en la noche y regresaron hasta el ferrocarril
Sud.

Otro episodio memorable es el primer partido
de rugby en la ciudad de Mendoza, el que fue or-
ganizado por Roy Mayne, veterano del Club y que
entonces formaba parte del Union Club Mendoza.
Pacific fue invitado y nuestros jugadores llegaron
el sábado por la mañana y se alojaron en el magní-
fico Plaza Hotel, que hoy es el Hotel Hyatt. Varios
entusiastas mendocinos los llevaron a conocer si-
tios históricos y los hermosos paisajes de Luján de
Cuyo y Puente del Inca. A la noche, una cena espe-
cial estaba preparada en las instalaciones del Union
Club, regada con el excelente vino cuyano.
El partido fue el domingo por la tarde ante una
enorme multitud, y en los primeros diez minutos
PRAC perdía insólitamente por 10 a 0, y sus juga-
dores «estaban resoplando con la lengua afuera,
tratando de tomar aliento a causa del liviano aire
provocado por la altitud. La pelota rebotaba mu-
cho más alto que en Buenos Aires y los jugadores
visitantes estaban desorientados, aunque finalmente
ganaron el partido», cuenta Stanley Thomas en una
carta personal a Hugo Mackern.
Luego todos participaron en una «reunión dan-
zante» en el Plaza, a la que asistieron los Goberna-
dores de Mendoza y de San Juan, y finalmente par-
tieron en el vagón «Comedor / dormitorio», que
había sido puesto a disposición de los deportistas
por las autoridades del BAP en la estación de
Mendoza. Al llegar al coche se encontraron con la
inesperada sorpresa de un barrilito de coñac
(brandy), enviado por el Gobernador de San Juan
para celebrar la ocasión, y que fue alegremente
despachado en el viaje de vuelta, en el que el canto
seguramente no cesó por varias horas.
Por estos años pioneros, nuestro equipo jugaba
un partido anual en Rosario, para lo cuál el Ferro-
carril Central Argentino ponía a disposición, gra-
cias a la influencia de Miguel McCormick, un co-
che «comedor/dormitorio». Dicho coche era engan-
chado al tren «Rosario Express», y desenganchado
en los talleres de la localidad de Pérez, en las afue-
ras de la estación Rosario Central. Allí quedaba hasta
la vuelta, el domingo por la noche. Los jugadores
pagaban la tarifa normal más un «tip» o propina
por el servicio especial.
Al respecto nos recuerda Charlie Llabrés: «En
esos tiempos al terminar el partido el capitán del
equipo local juntaba a sus jugadores y decía bien
fuerte: «Three cheers for the referee: Hip, hip-ra»
y todos los presentes lo coreaban. Esa era la grati-
ficación pública que recibía el árbitro del partido,
generalmente vestido con camisa y corbata ( a
menudo de moñito), saco en los días fríos y
«cardigan» en los templados, a veces con los colo-
res y escudo de su club o de su colegio. También
componían su atuendo los pantalones cortos, y las
medias prolijamente ajustadas por debajo de las
rodillas.
Generalmente eran caballeros británicos de cierta
edad, menos ágiles que los jugadores, a quienes no
podían seguir de cerca».
Mr. Francis Albert Chiswell, Presidente de PRAC por casi veinte
años y muy buen jugador de hockey.
El Club
Fueron presidentes del PRAC a comienzos de está
década J.W. Stubbs (1918/19) y R. Docherty (1920/
21) y a partir de ese año comenzó la larga presi-
dencia de F.A. Chiswell, que como veremos finali-
zó recién en 1939. Todo estaba muy bien organi-
zado, en gran medida por la labor incansable del

Sr. Wenceslao K. Romero, representante del BAP y
luego Secretario Honorario por varias décadas.
El Tenis, el Cricket y el Golf
Cada deporte tenía sus tiempos: el rugby termi-
naba infaliblemente el 31 de Octubre de cada año,
y ¡pobre el que tocara una «guinda» hasta el mes
de Marzo del año próximo! El verano era el tiempo
del cricket y había que distraerse, para que un solo
deporte no absorbiera la atención y cansara a los
jugadores… El fútbol había sido abandonado para
siempre como en casi todos los clubes de las carac-
terísticas del PRAC, por las razones que tan bien
explica Hugo Mackern: «…le tenían escasa estima
al ambiente que entonces rodeaba al fútbol.» «Las
grescas y desórdenes originados por la incultura
de muchos jugadores y espectadores, que ya eran
corrientes en los partidos de ese campeonato, se
tornarían intolerables para las costumbres y estilo
de vida de un club…»
En 1921, el crecimiento de la práctica del Golf,
que estaba ampliando sus greens a 18 hoyos, llevó
a la fundación del «Sáenz Peña Golf Club», luego
llamado «Golf Club General San Martín». Ya que
desde que desde 1913 el mantenimiento de los links
estaba a cargo de quienes practicaban el deporte,
parecía adecuado que se establecieran dos institu-
ciones distintas, aunque hermanadas (desde el ini-
cio nunca hubo cercas que separaran a los distintos
predios.)
Probable fotografía de las primeras canchas de tenis
El cricket se seguía practicando, tanto en el Cam-
peonato como en la liga de los Sábados (Saturday
Cricket Champioship), en la que PRAC venía cum-
pliendo buenos desempeños, pero ya no constituía,
como quince años atrás, el centro deportivo del Club.
El capitán de Cricket entre 1920 y 1922 fue E.L.
Lacey, para la temporada 1922/23 el Sr. Ivor
Williams, la temporada 1923/24 R.J. Wright, 1924/
25 D. St. J. Whittypara 1925 al 27 J.F. Hood.
Aunque no se participaba en campeona-
tos, el tenis tenía numerosos devotos, y se
llevaban a cabo permanentes competencias
con jugadores del BAP radicados en el inte-
rior desde 1924. Inicialmente solo se cons-
truyeron tres canchas de polvo de ladrillo.
Como era costumbre en esa época los va-
rones jugaban con pantalones largos blan-
cos (de franela en invierno y de brin en ve-
rano) tanto al cricket como al tenis, y solían
usar sacos o cardigans a franjas, con los
colores del club, en nuestro caso el azul,
verde y blanco. Las señoras y señoritas lo

hacían con las tradicionales polleras por de-
bajo de la rodilla.
Nuestro Club tenía entonces tres campos
de juego, todos ellos con drenaje y prepa-
rados para que no se inundaran en caso de
lluvias torrenciales y fue Miguel
McCormick quien en 1926 realizó una co-
lecta y logró construir la primera tribuna,
de madera, que fue pintada de verde, y po-
día retirarse en verano para permitir la prác-
tica del cricket (no había alambrados en las
canchas…)
La casa del Club fue reformada, y en 1927
se la techó con las magníficas tejas de Mar-
sella que llegaban al país como lastre en los
barcos que luego partían repletos de gra-
nos. Cada vez había más socios, y como ya
dijimos muc hos no eran empleados o pa-
rientes de empleados del Ferrocarril BAP.
Lo que atraía a los muchachos y chicas era
el ambiente alegre y deportivo, en el que se
Equipo de Cricket que jugó como diversión con las damas del club. Al costado se puede observar a Enrique «Kiko» López y a su
hermano Daniel.
Los cuatro hermanos López Gann, Daniel, Enrique, Lulú y Lily.
Esta última la única persona, hasta ahora, nacida en el Club.

organizaban fiestas casi todos los sábados,
y se practicaban «sports» tanto de invierno
como de verano. Por otra parte, el Club es-
taba muy bien ubicado en una Buenos Aires
que crecía vertiginosamente y el tren era el
medio de acceso al Club más conveniente y
seguro, (y para muchos el único) y se habi-
litó un «paradero» donde llegaba un coche,
en donde hoy se encuentra la casilla de los
caddies en el Golf Club. Se cuenta que mu-
chas veces la vuelta de los domingos por la
tarde era especialmente animada, en la que
no faltaban bebidas espirituosas. Como cu-
riosidad, había un convoy, con locomotora
y dos vagones, que iba desde Sáenz Peña a
Villa Luro, parando en el Club y en Liniers,
lo que era muy conveniente para los juga-
dores que trabajaban en el Ferrocarril Oes-
te, que allí hacían combinación a Once.
La segunda década terminó con un Club
en crecimiento, cada vez con más socios (de
tal manera que por primera vez empezó a
pensarse en establecer un límite, para que
no se superpoblaran las instalaciones). y con
una gran fiesta de fin de año, a la que
concurrieron más de 300 personas.

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