Según la religión cristiana, Dios creó el universo y todo lo que contiene en 6 días, incluyendo a los seres humanos. La teoría científica más aceptada es la del Big Bang, que sostiene que el universo surgió de una gran explosión hace miles de millones de años. Existen dos teorías principales sobre el origen de la vida: la creacionista, basada en la Biblia, y la evolucionista, que argumenta que la vida surgió a través de procesos químicos y evolucionó de formas
Teoría de la creación del universo según el cristianismo
1. TEORÍA DE LA CREACIÓN DEL UNIVERSO SEGÚN EL
CRISTIANISMO.
Según la religión cristiana, el primer libro del Antiguo testamento de la
Biblia ( El Génesis, que significa "principio") nos cuenta el origen del
universo y de todos los seres que en ella habitan. Cuenta que en un
principio existía el caos ( similitud con la teoría griega) y en ella vagaba
Dios. Éste creo el Mundo de la nada en 6 días. El primero separó la luz de
las tinieblas y así creó el día y la noche en el mundo. El segundo día
separó las aguas de la tierra y así creó los mares, los ríos y todas las aguas
que la componen.
En el tercer día creó lo que sería el suelo, la tierra seca dónde habitamos y
les introdujo todo tipo de vegetación. El cuarto día creó los astros, el Sol ,
la Luna y las estrellas. El quinto día creó a los primeros seres vivos, las
aves y los peces y animales acuáticos y el último día creó a todos los
seres terrestres y al ser humano a su imagen y semejanza. Primero creó al
hombre, Adán y al verlo solo creyó que necesitaba una compañera y de la
costilla de Adán creó a la mujer, Eva.
Como podemos ver, la creación del universo según el Cristianismo no se
asemeja a los mitos griegos en el que en un principio existía un Caos y de
él nació Gea, personaje femenino que designaría a la tierra, que
engendraría de sus entrañas a los seres de la tierra.
1) ARGUMENTO RELIGIOSO –BÍBLICO, PARA SER MÁS
EXACTOS –: El creacionismo cristiano sostiene que la Tierra y todo ser
vivo que habita en ella provienen de un acto de creación del Dios Padre.
Los creacionistas cristianos señalan como pruebas irrefutables de una
Creación:
-El hecho de que todo esté perfectamente posicionado y que todo
en la naturaleza funcione correctamente, de modo que la Tierra –y
con ella el ser humano – tuvo que ser creada necesariamente por un
«diseñador inteligente». Asimismo, se acentúa la creencia
injustificada en suponer que el mundo es tan singular, que
simplemente no pudo ser producto de una causalidad.
-Se alude al físico Isaac Newton, quien dijo: “No hay reloj sin
relojero”, para subrayar la convicción de que la Tierra no pudo
surgir de la nada y que fue creada por Dios, de la misma manera
que el reloj es fabricado por el relojero.
2. -Las supuestas similitudes y exactitudes históricas de la Biblia,
alegando que el libro sagrado es verdaderamente la Palabra de
Dios, pues carece de errores históricos y científicos. Siendo esto
último refutado por muchas voces.
3. 2) ARGUMENTO CIENTÍFICO –TEORÍA DE LA GRAN
EXPLOSIÓN : Según la teoría del Big Bang, el Universo se originó en
una singularidad espaciotemporal de densidad infinita y matemáticamente
paradójica. Se dice que el espacio se ha expandido desde entonces, por lo
que los objetos astrofísicos se han alejado unos respecto de los otros.
Ahora bien, con las partículas subatómicas que se desprendieron de la
gran explosión, se formaron lo que hoy conocemos como “elementos
químicos”, los cuales contribuyeron en la formación de los planetas del
sistema solar –entre ellos la Tierra, el cual gracias a su abundante
cantidad de bioelementos, permitió el origen de la vida–.
Los teóricos del Big Bang indican como evidencias irrefutables del Big
Bang:
-La expansión del Universo que se expresa en la Ley de Hubble (ν
= H0 • D), y que se puede apreciar en el corrimiento hacia el rojo
de las galaxias.
-Las medidas detalladas del fondo cósmico de microondas.
-La abundancia de elementos ligeros (nucleosíntesis primordial).
-El hecho de que la función de correlación de la morfología y la
estructura a gran escala del Universo encaja con la teoría del Big
Bang.
Es probable que el cosmos, integrado por todo aquello que pertenece a la
realidad, tuviera su origen hace unos 10,000 a 20,000 millones de años.
La región específica del cosmos en la que se encuentra nuestro planeta es
el universo denominado vía láctea.
Por universo se entiende un conjunto formado por millones de estrellas,
aunque vulgarmente se suele aplicar este nombre al cosmos entero.
El sol es una estrella de medianas dimensiones situada aproximadamente
a dos terceras partes de la distancia entre el centro y la periferia de la Vía
láctea. El sol y sus satélites planetarios constituyen el sistema solar.
La teoría más aceptada sobre el origen del cosmos establece que éste
surgió hace muchos millones de años como resultado de una descomunal
explosión de materia densamente condensada: teoría del big bang o de la
gran explosión. Los vestigios de esa antiquísima explosión se han
estudiado mediante poderosos telescopios que hoy día captan la luz
4. emitida hace millones de años por estrellas muy lejanas y sino através de
la llamada “Máquina de Dios”, donde se llevó a cabo una explosión en
un microcosmos artificial.
Quizá nuestro sistema solar surgió como una nube giratoria de gases que
acabaron por condensarse formando el sol y los planetas. La Tierra debió
iniciar su existencia como una masa gaseosa, pero después de un tiempo
se formó un núcleo de metales pesados como el níquel y el plomo.
Por encima de ese núcleo hay un manto grueso y, finalmente, una corteza
relativamente delgada que constituye la superficie del planeta. Una teoría
postula que en un principio la Tierra era fría, pero que se calentó al
generarse colosales fuerzas de compresión durante la sedimentación y la
síntesis de los materiales del núcleo.
La radiactividad también produjo enormes cantidades de calor. Después
de unos 750 millones de años, la Tierra se enfrió lo suficiente para que se
formara la actual corteza. Así, puede decirse que vivimos en un planeta
relativamente frío.
El universo en el cual nosotros vivimos no es el único en el cosmos y se
asemeja a otros tipos de universos.
Asimismo, el Sol no es un tipo especial de estrella. Tampoco es rara su
posición y, en cuanto a dimensiones, cabe decir que es de mediana
estrella. El planeta Tierra es más grande que Mercurio pero mucho más
pequeño que Júpiter o Saturno.
5. 3)
ARGUMENTO
FILOSÓFICO
–COSMOLOGÍA
ARISTOTÉLICA: Aristóteles señala que la forma está íntimamente
unida a la materia, de modo que la materia es “potencia” y la forma es
“acto”; decía que la sustancia de las cosas era la unión de la materia y la
forma, mientras el movimiento es el paso de la potencia al acto.
Distinguió entre el mundo celeste y el mundo sublunar, según él, formado
por los cuatro elementos, mientras que en el celeste había un quinto
elemento, el «éter». Afirmo que los cuerpos celestes están arrastrados por
esferas, y la última esfera es la de las estrellas fijas, la cual es movida por
el motor inmóvil: Dios. Las implicaciones filosóficas de la metafísica de
Aristóteles son las siguientes:
-La realidad está perfectamente ordenada: Todo tiene su fin y todo
está relacionado entre sí.
-La realidad es totalmente cognoscible a través de la razón
humana: Conociendo en qué términos están cifrados los misterios
se puede revelar todo.
-Los cielos son divinos e influyen en la Tierra: El esquema
aristotélico es adaptable al ámbito escolástico, siendo así aceptado,
y haciendo así que esta implicación sea validada por la crítica y la
sociedad.
-Perspectiva antropocéntrica: Metafóricamente, al poner a la Tierra
en el centro del Universo, se le da al ser humano la cualidad de
supremacía frente a lo demás.
-El fin de la vida humana es el conocimiento: Como todos los seres
vivos, siempre tienen una finalidad. En el ser humano es llegar a
conocer el Primer Motor Inmóvil, ligado a la razón, con la cual se
puede llegar a donde el hombre se proponga. Además, proporciona
seguridad y confianza, lo que facilita la realización de la vida
humana en determinados momentos.
Todas las teorías científicas acerca del origen de la vida exigen que la
edad de la Tierra sea de varios miles de millones de años. Se tienen
pruebas que apoyan esa suposición. Una de las líneas de evidencia se
basa en la observación de otros universos y en los estudios de las
atmósferas de nuestros planetas vecinos.
6. Son dos las principales teorías acerca del origen de la vía. La teoría
creacionista o vitalista, basada en gran medida en la narración bíblica
del Génesis, afirma que la Tierra no tiene más de 10.000 años de edad,
que cada especie fue creada por separado durante un breve lapso de
actividad divina ocurrido hace unos 6.000 años y que cada especie tiene a
mantener a través del tiempo su peculiaridad única y bien definida.
El creacionismo científico, un replanteamiento reciente de la teoría
creacionista postulado por un grupo de geólogo e ingenieros
conservadores, fue causa de una serie de infructuosas batallas legales
provocadas por los fundamentalistas, quienes se empeñaban en que los
sistemas escolares laicos incluyeran la teoría creacionista como parte de
las clases de biología, en las que por supuesto se enseña el concepto de
evolución.
La otra teoría evolucionista, afirma que la vida surgió en un punto
selecto ubicado en el extremo superior del espectro continuo de
ordenamientos cada vez más complejos de la materia. Es decir, que
cuando la materia se vuelve suficientemente compleja aparecen las
características asociadas con la vida. A pesar de que ésta es una teoría
mecanicista, en ella se dio cabida a epifenómenos biológicos como el
amor, la conciencia, la moralidad, etc. cualidades que aparecen en las
formas biológicas; por ejemplo, el ser humano.
Los biólogos, después de los trabajos realizados por Darwin y Pasteur,
han tenido un pensamiento racionalista donde se intenta aplicar el
concepto de evolución a la materia inerte. Comenzó a esbozarse una
teoría evolucionista del origen de la vida que suponía que no existía
diferencia fundamental entre lo inerte y lo vivo. La materia viva sería el
fruto de largos procesos químicos, una larga evolución química que
habría precedido a la evolución biológica. Oparin, por un lado, y
Haldane, por otro, suponen que la vida apareció en la Tierra en un medio
rico en materias orgánicas y desprovistas de oxígeno. Esta teoría está en
la base de los argumentos que actualmente se inclinan para explicar un
origen natural de la vida
7. Son dos las principales teorías acerca del origen de la vía. La teoría
creacionista o vitalista, basada en gran medida en la narración bíblica
del Génesis, afirma que la Tierra no tiene más de 10.000 años de edad,
que cada especie fue creada por separado durante un breve lapso de
actividad divina ocurrido hace unos 6.000 años y que cada especie tiene a
mantener a través del tiempo su peculiaridad única y bien definida.
El creacionismo científico, un replanteamiento reciente de la teoría
creacionista postulado por un grupo de geólogo e ingenieros
conservadores, fue causa de una serie de infructuosas batallas legales
provocadas por los fundamentalistas, quienes se empeñaban en que los
sistemas escolares laicos incluyeran la teoría creacionista como parte de
las clases de biología, en las que por supuesto se enseña el concepto de
evolución.
La otra teoría evolucionista, afirma que la vida surgió en un punto
selecto ubicado en el extremo superior del espectro continuo de
ordenamientos cada vez más complejos de la materia. Es decir, que
cuando la materia se vuelve suficientemente compleja aparecen las
características asociadas con la vida. A pesar de que ésta es una teoría
mecanicista, en ella se dio cabida a epifenómenos biológicos como el
amor, la conciencia, la moralidad, etc. cualidades que aparecen en las
formas biológicas; por ejemplo, el ser humano.
Los biólogos, después de los trabajos realizados por Darwin y Pasteur,
han tenido un pensamiento racionalista donde se intenta aplicar el
concepto de evolución a la materia inerte. Comenzó a esbozarse una
teoría evolucionista del origen de la vida que suponía que no existía
diferencia fundamental entre lo inerte y lo vivo. La materia viva sería el
fruto de largos procesos químicos, una larga evolución química que
habría precedido a la evolución biológica. Oparin, por un lado, y
Haldane, por otro, suponen que la vida apareció en la Tierra en un medio
rico en materias orgánicas y desprovistas de oxígeno. Esta teoría está en
la base de los argumentos que actualmente se inclinan para explicar un
origen natural de la vida