Colita era un perro callejero que defendió valientemente un comercio durante un robo, recibiendo una fuerte patada en el estómago. Fue llevado gravemente herido al refugio A.P.A donde se recuperó, pasando el resto de sus años hasta su muerte. Era el perro más viejo y querido del refugio, recordado cariñosamente por sus peleas con otros perros y por lo mucho que disfrutaba recibir caricias.

1. A.P.A EL REFUGIO

2. Este es un homenaje para nuestro perro más viejo y
querido. Fuimos su familia y el único hogar que
conoció. El Refugio no será lo mismo sin él!
“COLITA”

3. Su historia:
Era el año 2001. Colita era el guardián y defensor de
varios comercios de 8 de octubre, zona en la que se
había aquerenciado cuando su vida lo dejó en la calle.
Fue durante un robo a uno de estos comercios, que él
con todo el coraje que tenía trató de evitar, que
recibió una fuertísima patada en la barriga.

5. Pero su valentía no recibió recompensa alguna por
parte de los comerciantes y Colita paso varios días
gravemente golpeado en la calle, hinchándose a más
no poder, hasta que ingresó a El Refugio…y ahí
quedó, olvidado.
Llegó doblado de dolor, tenía un hematoma que en el
correr de los días ocupó tórax y abdomen. También
orinaba con sangre y no se paraba…tenía todo
hinchado; patas, genitales….todo! Y como paciente
no colaboraba mucho…su pronóstico era malo, pero
las ganas de vivir muchas y Colita salió adelante.
Y así pasaron los años…

6. Colita recibiendo su baño semanal…

7. En los últimos meses, Colita ya no podía caminar…
pero su carácter era el mismo de siempre. No
tenía dientes, no caminaba, pero seguía siendo el
guardián de El Refugio e imponía respeto ante los
otros perros.

8. Colita y sus famosas
siestas…quedaba así
colgada y por más que
lo acomodábamos,
siempre volvía a esta
posición!

9. Recordamos sus “peleas” con Sócrates y Malevo, los tres
rezongando permanentemente, como si estuvieran
peleando sobre política y fútbol!

10. Pero lo que más le gustaba era las sesiones de
rasquidos y caricias que todos los que lo conocían le
dedicaban. Él recibía una caricia y entraba en un
éxtasis, se empezaba a restregar con fuerza contra
uno como diciendo: "Estas caricias te las devuelvo con
todo mi cuerpo y alma".

11. Buen viaje fiel guardián de El Refugio, ya quisiera
mucha gente que la recordaran con tanto cariño como
te recordamos a ti!!!