2. La igualdad ante la ley
El principio de igualdad ante la ley es el que establece que
todos los seres humanos son iguales ante la ley, sin que
existan privilegios ni prerrogativas de sangre o títulos
nobiliarios. Es un principio esencial de la democracia. El
principio de igualdad ante la ley es incompatible con sistemas
legales de dominación como la esclavitud, la servidumbre o
el colonialismo.
El principio de igualdad ante la ley se diferencia de otros
conceptos, derechos y principios emparentados, como
la igualdad de oportunidades y la igualdad social.
Igualdad ante la ley, es el conjunto de deberes, derechos y
garantías del ordenamiento jurídico. El contenido de las leyes
sea igual para todos, o desigual si así corresponde, sobre la
fase o en función de la justicia. Igualdad ante la ley, implica
que todos debemos cumplir el mandato de la ley, no sólo los
órganos del Estado, como asimismo, tales órganos deben
interpretar y aplicar el ordenamiento jurídico, sin incurrir en
discriminación
3. En Argentina el principio de igualdad ante la ley
está reconocido en el artículo 16 de la
Constitución.
La Nación Argentina no admite
prerrogativas de sangre, ni de
nacimiento: No hay en ella fueros
personales ni títulos de nobleza. Todos
sus habitantes son iguales ante la ley, y
admisibles en los empleos sin otra
condición que la idoneidad. La igualdad
es la base del impuesto y de las cargas
públicas
4. Es cierto que no somos iguales, pero tenemos varias cosas en
común:
Somos seres humanos con capacidad de pensar.
Con dignidad y derechos.
Merecemos respeto y somos libres de tomar
decisiones, siempre que no perjudiquen a otros.
Las leyes son más que un escrito en un papel,
porque su poder se extiende a cualquiera de los
miembros de una comunidad. Por eso se dice que
la justicia es "ciega", pues no toma en cuenta el
dinero, la raza, el sexo o el poder de alguien
cuando se trata de aplicar la ley.
5. Sin importar nuestras diferencias naturales y
sociales, todos somos iguales ante la ley. Frente
a ella, nadie debe tener privilegios injustos.
Una característica muy importante de las
leyes en una sociedad democrática, es que
aseguran la igualdad entre seres humanos y
protegen contra la discriminación y la
injusticia