1. Me brota del corazón un poema bello recito mis versos a un rey (sal 44)
2. 50 poemas de amor dedicados al Amor Por Nelson Orduz Bermúdez
3. HABLAME SEÑOR. Háblame señor, dime esta noche Palabras de amor para mi alma Que el fondo del mar esta agitado Y sólo en Tu amor encuentro calma. Háblame señor que tengo miedo A la oscura empedernida noche Las estrellas han cerrado sus pupilas Para hacer al mundo un reproche. Cerraré mis ojos, quiero oírte Si quieres contarme lo que pasa Quien te quiere, Quien te ama, Quien te abraza. Si los hombres no te aman, te rechazan. Cuando hayas concluido tu relato Me quedaré contigo mudo y quieto Esperando que las sombras de mi alma Se disipen con tu luz, dulce cordero. Y así poder mirarte a los ojos Sin decir con mis labios que te quiero Y perderme en tu amor ya para siempre Encontrándome contigo en el cielo.
4. Yo no voy a pedir La paz del cuerpo y del alma, Porque a quienes más amas Se la das en abundancia. No quiero pedirte la suerte Ni tampoco la desgracia, Esto te pide tanto Que seguro no te alcanza. A mí, dame de lo que te sobra Cuando a ti se te rechaza, Los desprecios y las burlas Bofetadas y asechanzas Dolores y tentaciones Que padeciste en tu alma. Pero dámelas Señor por siempre Porque quizás mañana No tendré el gran coraje De sentirlas en mi alma. DAME DE LO QUE TE SOBRA Hoy he venido a tus pies Para pedirte una cosa, No temas querido amigo Dame de lo que te sobra. Señor, no te voy a pedir Grandeza, dinero y honra, Es lo que todos te piden Y seguro no te sobra.
5. CUANDO TE BUSCABA SEÑOR . Le he preguntado a los ríos, Que con su suave rumor De cascabeles hermosos Que alaban al creador Sabes acaso decirme Donde es donde esta mi amor. Dime luna tú que velas En esas noches de amor Dime acaso si has perdido Tú también a tu creador. Hoy que miro a lo profundo, De mi vacío interior Que cansado de buscarte En este mundo exterior Dormidito he de hallarte Dentro de mi corazón. Cuando ayer yo te buscaba, Y no te podía encontrar, Le preguntaba a la luna, Al sol, al viento y al mar, ¿Dónde esta el amor de mi alma, Donde lo puedo encontrar?. Lo he buscado en todas partes, Y no lo he podido hallar, Lo he buscado en el cielo Y en lo profundo del mar. Dime viento tú que viajas ¿Dónde lo he de buscar? Le he preguntado a los niños Si no lo han visto pasar, Dime amor; dónde te escondes Si en el cielo, o en el mar. Solo quiero preguntarte ¿Cómo es que te debo amar? Oh ruiseñor tu que cantas Con tan hermoso trinar, Enséñame tu que sabes Como le puedo alabar.
6. EL ENCUENTRO Cuando voy solitario por las noches A mi cita de amor con el amado Yo me siento un poco avergonzado Cuando siento en mi alma tu reproche. Ya no me Amas como aquellos días Que decías ser Mi único consuelo. Que tu canto era risas y alegrías Y tu mirada puesta estaba en Mi cielo. No te admires si te digo que te quiero Te he soñado y es por eso que te espero Y aunque pienses que Me has decepcionado Mi amor será por ti como el primero. Cuando sentado en el balcón espero Quiero amarte, mi amor y mi lucero Ya lo sabes y es por eso que no puedo Descansar sin decirte que te quiero. Cuando vienes y te sientas a mi lado Se estremece el corazón entero Y me tiemblan en los labios las palabras Para decir que te amo y que te espero. Cuando veo que te alejas de mi lado Y mis pasos no siguen tus senderos Se estremece hasta el fondo de mi alma Al saber que sin ti; que sin tu amor me muero.
7. Si no es mío Jesús amarte en esta vida Aunque sienta en mi alma anhelos de quererte No permitas que te deje un solo instante Ni se mueran mis ganas de tenerte. Hay momentos que me siento atrapado Que me aprisionan las redes de la muerte Y si ves amor que te he olvidado No me dejes señor temo perderte. En esta playa amor donde te espero Cuando en las tardes Señor deseo verte En el sitio que Tú y yo ya conocemos Te entregare mi alma para siempre. Donde nadie sabrá lo que nos pasa Te contaré los proyectos que hay en mente Tú me dirás Amor lo que te pasa Porque entre Tú y yo todo es presente. Si quieres reír lo haré contigo Si quieres llorar sabré entenderte Y tomados juntos de las manos Nos iremos Amor ya para siempre Sin pensar mi amor que hemos sufrido Me fundiré en Tu amor eternamente. AMARTE EN ESTA VIDA
8. Cuando todos se hayan ido, y en mi vida este acabando Cuando nada quede en mis manos, y mis pies estén cansados Cuando mis ojos se cierren para el mundo y el pecado Y este corazón no palpite más por amores deseados Solo me quedaras Tu Amor de mis amores, Tú que siempre me has querido Tú que nunca me has dejado, yo que de Ti había huido, Tú estabas a mi lado Oh mi Jesús del alma, cuantas veces de he dejado, solitario y mal herido, por seguir en mi pecado. Cuando yo estaba perdido, vagabundo y maltratado, Tú seguías junto a mí como eterno enamorado, Sin importarle el dolor que mi desprecio ha causado. Cuando no estén mis amigos, porque todos se han marchado Y el vendaval de este mundo mi vida se esté llevando, Solo una cosa te pido, Oh mi eterno enamorado No me sueltes de Tú mano, yo quiero estar a Tu lado. CUANDO TODOS SE HAYAN IDO
9. ELLA ENCONTRÓ EL AMOR Era el día de una fiesta En la que Jesús se hallaba Comiendo con sus amigos Ella no era la invitada. Y postrándose por tierra Con sus lágrimas bañaba Aquellos divinos pies, Con sus cabellos secaba. Los ungía con perfume Con el cual ella engañaba A los hombres que en sus brazos Un falso amor les brindaba. Si este fuera un profeta Los curiosos murmuraban Sabría que esta mujer Tiene su alma manchada. Pero Él lo sabía todo Él conocía su alma El hombre mira apariencias El señor llega hasta el alma. Para juzgar a los hombres Y darles su justa paga Él pesa los corazones No se engaña por las caras. Y es quien ama más El que recibe la gracia De verse reconciliado Por el amor de las almas.
10. DAME DE BEBER Solitaria y silenciosa Iba en busca de las aguas, Sin saber que allá en el pozo Se cambiaría su alma, Que encontraría la fuente Que sacia la sed del alma. Dos miradas que se cruzan Una de fe y esperanza, La otra llena de miedo Y con vergüenza en la cara Y de los divinos labios De la fuente de la gracias Que brotan de lo profundo Como una inmensa cascada, Quieres darme de beber, Yo tengo sed en Mi alma. Conocerás el Don de Dios Y la vida de la gracia, Ella lo mira y responde, No me pidas de beber Que yo soy samaritana. Si conociera el Amor Y quien es el que te manda Me pedirías tú a Mí Que soy la fuente sagrada. El que bebe de mi pecho De la fuente de la gracia No volverá a tener sed, Porque yo soy esa fuente Aquella fuente sagrada, Que sacia los corazones Y que da vida a las almas .
Notas del editor
Me brota del corazón un poema bello recito mis versos a un rey (sal 44)
Por Nelson Orduz B
HABLAME SEÑOR. Háblame señor, dime esta noche Palabras de amor para mi alma Que el fondo del mar esta agitado Y sólo en Tu amor encuentro calma. Háblame señor que tengo miedo A la oscura empedernida noche Las estrellas han cerrado sus pupilas Para hacer al mundo un reproche. Cerraré mis ojos, quiero oírte Si quieres contarme lo que pasa Quien te quiere, Quien te ama, Quien te abraza. Si los hombres no te aman, te rechazan. Cuando hayas concluido tu relato Me quedaré contigo mudo y quieto Esperando que las sombras de mi alma Se disipen con tu luz, dulce cordero. Y así poder mirarte a los ojos Sin decir con mis labios que te quiero Y perderme en tu amor ya para siempre Encontrándome contigo en el cielo.
DAME DE LO QUE TE SOBRA. Hoy he venido a tus pies Para pedirte una cosa, No temas querido amigo Dame de lo que te sobra. Señor, no te voy a pedir Grandeza, dinero y honra, Es lo que todos te piden Y seguro no te sobra. Yo no voy a pedir La paz del cuerpo y del alma, Porque a quienes más amas Se la das en abundancia. No quiero pedirte la suerte Ni tampoco la desgracia, Esto te pide tanto Que seguro no te alcanza. As mí, dame de lo que te sobra Cuando a ti se te rechaza, Los desprecios y las burlas Bofetadas y asechanzas Dolores y tentaciones Que padeciste en tu alma. Pero Señor, dámelas por siempre Porque quizás mañana No tendré el gran coraje De sentirlas en mi alma.
Cuando ayer yo te buscaba, Y no te podía encontrar, Le preguntaba a la luna, Al sol, al viento y al mar, ¿Dónde esta el amor de mi alma, Donde lo puedo encontrar?. Lo he buscado en todas partes, Y no lo he podido hallar, Lo he buscado en el cielo Y en lo profundo del mar. Dime viento tú que viajas ¿Dónde lo he de buscar? Le he preguntado a los niños Si no lo han visto pasar, Dime amor; dónde te escondes Si en el cielo, o en el mar. Solo quiero preguntarte ¿Cómo es que te debo amar? OH ruiseñor tu que cantas Con tan hermoso trinar, Enséñame tu que sabes Como le puedo alabar. Le he preguntado a los ríos, Que con su suave rumor De cascabeles hermosos Que alaban al creador Sabes acaso decirme Donde es donde esta mi amor. Dime luna tú que velas En esas noches de amor Dime acaso si has perdido Tú también a tu creador. Hoy que miro a lo profundo, De mi vacío interior Que cansado de buscarte En este mundo exterior Dormidito he de hallarte Dentro de mi corazón.
Cuando voy solitario por las noches A mi cita de amor con el amado Yo me siento un poco avergonzado Cuando siento en mi alma tu reproche. Ya no me amas como aquellos días Que decías ser mi único consuelo. Que tu canto era risas y alegrías Y tu mirada puesta estaba en Mi cielo. No te admires si te digo que te quiero Te he soñado y es por eso que te espero Y aunque pienses que me has decepcionado Mi amor será por ti como el primero. Cuando sentado en el balcón espero Quiero amarte, mi amor y mi lucero Ya lo sabes y es por eso que no puedo Descansar sin decirte que te quiero. Cuando vienes y te sientas a mi lado Se estremece el corazón entero Y me tiemblan en los labios las palabras Para decir que te amo y que te espero. Cuando veo que te alejas de mi lado Y mis pasos no siguen tus senderos Se estremece hasta el fondo de mi alma Al saber que sin ti; que sin tu amor me muero.
AMARTE EN ESTA VIDA Si no es mío Jesús amarte en esta vida Aunque sienta en mi alma anhelos de quererte No permitas que te deje un solo instante Ni se mueran mis ganas de tenerte. Hay momentos que me siento atrapado Que me aprisionan las redes de la muerte Y si ves amor que te he olvidado No me dejes señor temo perderte. En esta playa amor donde te espero Cuando en las tardes Señor deseo verte En el sitio que Tú y yo ya conocemos Te entregare mi alma para siempre. Donde nadie sabrá lo que nos pasa Te contaré los proyectos que hay en mente Tú me dirás Amor lo que te pasa Porque entre Tú y yo todo es presente. Si quieres reír lo haré contigo Si quieres llorar sabré entenderte Y tomados juntos de las manos Nos iremos Amor ya para siempre Sin pensar mi amor que hemos sufrido Me fundiré en Tu amor eternamente.
CUANDO TODOS SE HAYAN IDO Cuando todos se hayan ido, y en mi vida este acabando Cuando nada quede en mis manos, y mis pies estén cansados Cuando mis ojos se cierren para el mundo y el pecado Y este corazón no palpite más por amores deseados Solo me quedaras Tu Amor de mis amores, Tú que siempre me has querido Tú que nunca me has dejado, yo que de Ti había huido, Tú estabas a mi lado Oh mi Jesús del alma, cuantas veces de he dejado, solitario y mal herido Cuando yo estaba perdido, vagabundo y maltratado, Tú seguías junto a mí como eterno enamorado, Sin importarle el dolor que mi desprecio ha causado. Cuando no estén mis amigos, porque todos se han marchado Y el vendaval de este mundo mi vida se esté llevando, Solo una cosa te pido mi eterno enamorado No me sueltes de Tú mano quiero estar a Tu lado.
Era el día de una fiesta En la que Jesús se hallaba Comiendo con sus amigos Ella no era la invitada. Y postrándose por tierra Con sus lágrimas bañaba Aquellos divinos pies, Con sus cabellos secaba. Los ungía con perfume Con el cual ella engañaba A los hombres que en sus brazos Un falso amor les brindaba. Si este fuera un profeta Los curiosos murmuraban Sabría que esta mujer Tiene su alma manchada. Pero Él lo sabía todo Él conocía su alma El hombre mira apariencias El señor llega hasta el alma. Para juzgar a los hombres Y darles su justa paga Él pesa los corazones No se engaña por las caras. Y es quien ama más El que recibe la gracia De verse reconciliado Por el amor de las almas.
Solitaria y silenciosa Iba en busca de las aguas, Sin saber que allá en el pozo Se cambiaría su alma, Que encontraría la fuente Que sacia la sed del alma. Dos miradas que se cruzan Una de fe y esperanza, La otra llena de miedo Y con vergüenza en la cara Y de los divinos labios De la fuente de la gracias Que brotan de lo profundo Como una inmensa cascada, Quieres darme de beber, Yo tengo sed en Mi alma . Conocerás el Don de Dios Y la vida de la gracia, Ella lo mira y responde, No me pidas de beber Que yo soy samaritana. Si conociera el Amor Y quien es el que te manda Me pedirías tú a Mí Que soy la fuente sagrada. El que bebe de mi pecho De la fuente de la gracia No volverá a tener sed, Porque yo soy esa fuente Aquella fuente sagrada, Que sacia los corazones Y que da vida a las almas.