2. Un argumento deductivo es aquel cuya conclusión deriva de
manera necesaria de las premisas. A esta característica se le denomina
validez y es lo que lo distingue de otro tipo de argumentos, como por
ejemplo del inductivo.
A la relación necesaria que se establece entre premisas y
conclusión se le denomina validez. Así, decimos que un razonamiento es
válido si al suponer que las premisas son verdaderas la conclusión se
sigue forzosamente; es decir, válidamente no podría seguirse otra
conclusión.
La validez de un argumento deductivo no depende de la verdad
de las proposiciones, sino que simplemente supongo que lo son y
entonces me pregunto: ¿si las premisas fueran verdaderas la conclusión
se sigue de manera necesaria o forzosamente?
3. Ejemplo: Esto parece un poco complicado, pero demos un ejemplo para
que notemos que no lo es tanto:
Premisa 1
Todos los novios de Luisa tienen ojos verdes.
Premisa 2
Juan es novio de Luisa.
Conclusión
Juan tiene los ojos verdes.
Para ver si este razonamiento es válido me pregunto: suponiendo que las
premisas fueran verdaderas ¿la conclusión se sigue de manera necesaria o
forzosamente?
Para evaluar la validez no tengo que verificar si las premisas son
verdaderas, simplemente me pregunto si fuera cierto que todos los que son novios
de Luisa tienen ojos verdes y Juan es su novio. Entonces, ¿se sigue con necesidad
que él tiene ojos verdes? Si razonamos un poco podemos afirmar que
efectivamente la conclusión se sigue necesariamente y por lo tanto el
razonamiento es válido.
4. En un argumento deductivo la conclusión no afirma nada que no esté ya
dicho, aunque quizá de manera implícita, en las premisas, así, lo que hace es sólo
hacer explícito algo ya afirmado en ellas.
Para reforzar la idea de validez veamos otro ejemplo:
Premisa 1
Todas las manzanas son azules.
Premisa 2
Este objeto es una manzana.
Conclusión
Este objeto es azul.
Evaluemos si el argumento anterior es válido preguntándonos: ¿suponiendo
que las premisas fueran verdaderas la conclusión se sigue de manera necesaria o
forzosamente?
Y entonces argumentamos:
“Si todas las manzanas son azules y este objeto es una manzana, entonces es
necesario que sea azul, pues la primera premisa ha establecido que todo lo que sea
manzana es azul”, por lo tanto el razonamiento es válido.
5. El argumento inductivo parte de la observación de un cierto
número de casos particulares en un número suficiente de individuos
de una clase determinada, para posteriormente generalizar la
propiedad que se predica en las premisas con respecto a ciertos
objetos o entidades de una clase dada a todas las entidades de esa
misma clase.
Dicha generalización valdrá no sólo para los casos observados
y experimentados, sino para todos los de su especie.
Veamos un ejemplo:
1) Kevin es adolescente y dejó de crecer a los 18 años
2) Luis es adolescente y dejó de crecer a los 18 años
3) María es adolescente y dejó de crecer a los 18 años
4) n…
Probablemente todos los adolescentes dejan de crecer a los
18 años
6. Muchos de los razonamientos que sostenemos en la vida
cotidiana son de tipo inductivo. Por ejemplo, cuando se afirma: “No
me voy a volver a involucrar con ninguna mujer, pues todas son
iguales”. Las premisas que apoyan tal conclusión son las siguientes:
1) Luisa es mujer y me ha sido infiel
2) Patricia es mujer y me ha sido infiel
3) Carmen es mujer y me ha sido infiel
4) n…
Probablemente todas las mujeres son infieles
Nota: La conclusión no es necesaria, es probable.
Dado que no se han analizado todos los casos existentes, es
decir, a todas las mujeres, cabe la posibilidad de que entre los casos
no analizados se encuentre alguno que falsifique la conclusión. Así,
podrían encontrarse casos de mujeres que sean fieles y, por lo tanto,
sería falso que todas las mujeres son infieles.
7. La diferencia fundamental que observamos pues, entre un
razonamiento deductivo y un inductivo es que en el primero la
conclusión es necesaria y en el segundo la conclusión es probable.
Otra diferencia es que en el argumento deductivo sólo nos interesaba la
forma, no el contenido, así no era necesario ir a contrastar con la
realidad la verdad de nuestras proposiciones.
En cambio, el argumento inductivo parte de la observación de la
realidad y sobre la base de ella es que puede arribarse a la conclusión y
afirmarse con mayor o menor grado de probabilidad la conclusión. De
esta manera, en el razonamiento inductivo importa tanto la forma como
el contenido.